Capitulo XXX

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"esa persona solía ser amable, velaba por nuestra seguridad, y siempre elegía morir de hambre para que otros comieran, y en ocasiones daba de su propia carne para alimentarnos, pero un día los humanos, la atacaron, ella se negó a responder, así que los humanos atacaron lo mas preciado para esa persona"-The X

*horas antes, de camino a la central:

-Alicia, estamos por llegar a la central, recuerdas lo que tienes que hacer.

-debo infiltrarme junto a los druidas y deshabilitar los inhibidores, una vez se inicie el traslado, los prisioneros asistirán a los refugiados, en el asalto.

-sí, pero Alicia debes recordar esto, es muy importante, sin importar nada, no debes matar a nadie, y también convencer a los prisioneros de no hacerlo.

-no le harán caso, aunque consigas engañar a la república, los druidas saben reconocer a los suyos. -dijo la rata negra.

-para eso iras tú. Al ser discípulo del maestro Pyro, seguro te deben creer en ti.

-aun así, como sabes, que creerán en mí.

-el maestro Pyro m dijo, que confía plenamente en ti. - al decir eso pareció. que se avivaba una flama en él.

*volvemos al presente, en la base central.

Matt tenía razón la forma en la que son tratados los druidas en deplorable, a aquellos que no presentaron poderes eran llevados hasta un camión encerrados como ovejas en un corral, a aquellos que presentaban habilidades no les iba mejor.

A la rata y a mí nos encerraron en jaulas tan pequeñas que apenas permitían movernos, y nos metían a todos en la parte trasera de un camión, como si de apilar cajas se tratase, honestamente no estaba incomoda, pero la rata no paraba de quejarse, ahora todo dependía de el:

-humana, puedes moverte.

*le señale un pulgar arriba.

Sin esfuerzo, aplasté el candado de la jaula, y conseguí salir, después de eso, procedí a deshabilitar los inhibidores, mientras la rata los convencía:

-escuchen atenta mente, durante el traslado, un equipo va a extraer a los prisioneros, pero nuestros números son limitados, necesitaremos de su ayuda, para liberar a los prisioneros.

-puedes contar con nuestra ayuda.

-pero, hay una cosa más, durante el asalto, no pueden matar a nadie.

*El ambiente se agita, y los druidas empiezan a reclamar:

-después de todo lo que hicieron no quieres matarlos.

-si quiero, pero se formó una alianza, a cambio de ayudarnos, prometimos no matar a los soldados.

-formaron una alianza con los humanos, esto es indignante, no mereces llamarte un druida.

-tú no puedes decirme eso, el maestro Pyro, dio su libertad porque creía en el potencial humano, si no creen en mí, crean en él.

-pero que hay de esa humana, todos podemos sentirlo, una esencia oscura emana de ella, aunque confiáramos en los humanos, como confiaríamos en ella.

*Miré a la rata negra y dije:

-Rata negra puedes traducirme.

*La rata inicio la traducción:

-Tienen razón, deberían estar locos para seguirnos.

-pero también son druidas, yo no sé mucho sobre sus costumbres, pero que ustedes no deben preservar la vida.

-ustedes sirven para proteger el equilibrio.

-el maestro Pyro pudo haber destruido la ciudad y liberado a los prisioneros, pero eligió no hacerlo.

-porque él cree en preservar la vida.

-y ahí está el deber de un druida, ¿no?

Hubo un silencio inquietante, quizás no eran las palabras correctas, o quizás la rata, tradujo mal lo que dije, además de que él dijo muchas cosas que yo no mencione, este silencio era cada vez más inquietante, hasta que.

*Un aplauso se escucha, y luego otro y otro más:

-Arkraptor no se los motivos, que tengas, pero si en esta operación no quieres muertos, entonces por mi parte no los tendrás.

-Ni la mía.

-Ni la mía.

Matt y el maestro Pyro tenían razón, la rata negra era la indicada para esta operación, de no ser por ella esto no sería posible.

*repentina mente un soldado de la república abre la puerta y encuentra Alicia fuera de la jaula.

-oye, tu como te quitaste el inhibidor...

*un resplandor sale de su espalda y el soldado cae al suelo.

Otro soldado aparece y cierra la puerta, era aquel soldado volador que vi antes:

-eres Alicia verdad, escucha no hay tiempo, el dormirá por unas 5 horas.

-quien eres y como conoces a la humana. –dijo la rata negra.

-soy el infiltrado; me envió Matt Harker –lo envió Matt, entonces él es el idiota

-entonces tu eres Manchester.

-sí, vine a darles un mensaje, la base 9 fue destruida, quiero saber que está pasando.

- ¿base 9?, es ahí donde está el maestro, que paso.

-es exactamente lo que quiero saber, encontraron soldados, cercenados, y Pyro no está.

- ¿estás diciendo que el maestro escapo?

-bueno no exactamente, encontramos sus piernas, en la escena. Al parecer lo arrastraron fuera, toda la ciudad está en alerta porque piensan que escapo, pero ambos sabemos que no es así.

-es imposible, nadie podría lastimar al maestro, menos que podría perder sus dos piernas.

-eso también lo creo, pero ahora, me están presionando con acelerar el traslado, que debemos hacer.

La situación era seria si Matt estuviese aquí el seguro sabría qué hacer, pero ahora no estaba, así que la situación era catastrófica.

*alguien toca la puerta de camión:

-mayor Manchester, nos solicitan en el hospital sur.

-que le paso al hospital.

-mayor, el hospital está en llamas, hay llamadas de socorro por toda la ciudad. Además, según testigos se ha avistado aves de rapiña gigantes y un dragón

- ¿un dragón?

*son las 11:00 PM faltan 2 horas para el traslado.

wonderland nigthmaresWhere stories live. Discover now