Senderismo.

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Senderismo: Actividad no competitiva que consiste en caminar, preferentemente por el campo o la montaña, siguiendo un itinerario determinado.

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—Bien, llegamos a Blackberry Woords, estaremos todo el verano aquí, la universidad pagará los gastos y los cuartos, así que cuídenlos, si rompen algo, ustedes lo pagarán. —dijo la maestra Bustier. —Hablo en serio, mas a ustedes, muchachitos. —la maestra señaló a los amigos de Felix.

—Felix, Felix... llegamos. —dijo Marinette al rubio que dormía tranquilamente, hasta que hizo un pequeño ronquido.—Uffff, que encantador. —dijo.

—Marinette, vamos, ya quiero que... Oh, ¿sigue dormido? —dijo Alya que se había acercado al lugar donde estaban.

—En verdad, ¿cómo quieres cuidarlo? No es nada tuyo...—dijo Alix muy curiosa detrás de ella.

—Yo me encargo, guárdenme una cama en la cabaña, ya las alcanzo.

—Esta bien, no vayan a quedarse encerrados en el autobús. —dijo Rose.

—Ja ja ja, que chistosa. Vayan. —dijo ella, mientras veía a todas sus amigas bajarse del autobús.

—Owwwwwwww, miren a Fel, como duerme como niño tierno. —dijo Nino mientras pasaba por el asiento.—Oye, tu lo cuidarás... ehmm...

—Marinette.

—Oh, bueno, lo dejo en tus manos, Mari. Él tiene el sueño pesado, cuando nosotros lo queremos despertar o pensamos que está muerto o tal vez estuvo soñando a profundidad, pocas personas en el mundo lo hacen, es como despertar a un tronco. Buena suerte si lo levantas.

—Gracias.

Marinette vio que todos se bajaron del autobús, incluyendo la maestra, así que se quedaron solos.

—Felix, vamos, no me hagas esto. Ya se va a ir el conductor del autobús a no se donde. Vamos...

No reaccionaba, mas bien se acomodaba en el asiento para seguir descansando y lo sorprendente fue que comenzó a balbucear.

—Felix, despierta, ya avanzó el autobús. Tenemos que bajar.

—Mamá... Mamá... lo siento.—decía Felix en sueños.

—Felix...¿Estás bien? —dijo Marinette.

—Mamá...¡Mamá! ¡CUIDADO! —gritó y despertó de golpe. —¿Dónde estoy? ¿Ah? ¿Marinette? —dijo algo aturdido.

—¡TONTO! ¡DUERMES DEMASIADO! —gritó. —Bajémos del autobús que ya arrancó.

Tomaron sus mochilas y se fueron donde el conductor.

—Señor, queremos regresar al campamento. Olvidamos bajar con el resto.

—Niños estúpidos, hace mucho dejaron el campamento y no volveré. —paró y abrió la puerta. —Ahora si vayanse y déjenme solo.

Bajaron en silencio.

El autobús siguió su camino.

—Guau... no pensé que fuera tan...

—¡¿QUÉ DEMONIOS TE PASÓ?! ¡NO DESPERTABAS Y ME DESESPERÉ! —interrumpió las palabras del chico.

—Creo que ahora si debo irme al médico para ver porque duermo así. Suelo asustar a muchas personas así.

—Demasiado, ¡creí que estabas muerto!

—Dicen que hierba mala nunca...

—Ah, callate. Ahora debemos caminar hasta el campamento y, por suerte, sé por donde ir.

Feelings.  - Felix Month 2020Where stories live. Discover now