Capítulo 26: Lo Que Te Conté Mientras Fingías Dormir.

1K 134 54
                                    

Tap, tap, tap. Suenan los tacones de Yaoyorozu, quien camina por toda la habitación. NO podía creer que a dos días de su boda eso ocurriera.

Inasa le toma del brazo para que se siente y deje al doctor Kodai seguir hablando. No le queda más remedio que aceptar. En el lugar esta Katsuki, Momo, Inasa e Izuku; Shoto había ido con Kirishima.

–Las quimioterapias ya no surgen el efecto que se esperaba, sus células no se recuperan por los cuatro años que lo dejó pasar, es muy difícil para su cuerpo recuperase.

–Pero debe haber alguna forma, algo que lo ayude. No puede dejarlo morir.

–No voy a dejarlo morir, señorita Yaoyorozu, mi trabajo es salvarlo. En todo caso lo que se puede hacer es adelantar la cirugía de médula osea, pero él tiene que firmar, si no acepta no se puede hacer nada.

–No se preocupe, él va a aceptar. – a Izuku le aterraba la idea de perder a Eijiro. Intentaría cualquier forma de convencerlo, así le cortara la mano para que firmase.

–Y si no acepta... –Katsuki saca un bate de quien sabe dónde. Por mayoría de votos sería Izuku quien le convenciera.

¬ /// ¬) . . .

Entra a la habitación, sus manos tiemblan, se encuentro a Todoroki observando a Eijiro dormir. Se levanta de la silla cuando lo ve entrar y hace ademán de irse, le agradece su amabilidad con un gesto mientras se sienta en la cama mirando hacia la ventana, alguien ya había tomado asiento en la silla.

–Dicen que deben operarte rápido, pero hay probabilidad de que no lo resistas. Si aceptas se dará el diecisiete de Julio, en una semana, un día antes de cumplir cinco meses... No quiero perderte. –lo miro, sigue dormido, respirando por un tubo en su nariz. –¿Sabes? Esto nunca te lo había contado, pensaba hacerlo cuando todo esto pasara pero... tengo dos amigos de la infancia: Shinsou Hitoshi y Bakugou Katsuki.

>Cuando comenzamos el quinto año de primaria Kacchan comenzó a gustarme y comenzamos a salir poco después. Para el día en que pasamos a preparatoria mi padre volvió para llevarnos a mi y a mi madre con él a España, significaba dejarlo todo, incluso mi relación, pero quería ir para probar algo nuevo; además, Uraraka Ochako, la chica que estaba enamorada de Kacchan desde la secundaria, también se transfirió a allá y le prometió que me cuidaría con su vida porque era más importante pare él que la suya, nunca debí haberla dejado.

Tuve que aprender el español y las tradiciones de la cuidad que me acogía, pensaba vivir ahí hasta acabar la universidad, pero nunca le dije eso a Kacchan. Mi padre tenía una avioneta que me enseñó a usar y me hice amigo de Ochako-san pues antes solo me veía como un roba amores, y cuando me dijo que volviésemos a Japón para retomar nuestra vida normal, después de casi dos años, me la pensé.

Acepté y esa noche hurtamos la avioneta de mi padre. Lo que no sabía era que una ala no estaba del todo firme. Era algo vieja. Chocamos en costas del río Segura, cerca del mar mediterráneo, ella prefirió darme una mascarilla de oxígeno y un paracaídas que intentar salvarse. Estuvo internada en el hospital mucho tiempo, hasta que murió en Abril. Perdí conexión con Japón y todo lo que le involucraba.

Desde entonces me acompaña a todos lados, protegiéndome de todo para no fallar su palabra. Yo volví cuando acabe la Universidad con prefectura en Edición y Escritura, pero no me atrevía a buscar contacto con Kacchan por miedo a su reacción. Pero te conocí a ti y todo explotó, jamás me culpé por su muerte porque no me dejaba y en ocasiones hablamos tan ameno que olvido todo.

Ella de hecho me mira demasiado tranquila, sentada sobre la silla con el vestido floreado que le dio Yaomomo. Nunca le hablé a nadie sobre esto. Y por eso está tan enojada pese a su gesto. Realmente te quiero, Ochako-san pero sé que si le cuento a alguien de ella  me tacharán de loco y tendré que ir con psicólogos y blablablá, así que evito mencionarlo porque yo me considero muy bien. 

Persona Equivocada 》Kirideku《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora