PRÓLOGO

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Hasta hace unas semanas no sabía absolutamente nada sobre mi pasado, desde que tengo memoria he estado en este lugar, no conozco a mis padres, ni siquiera sé si los tengo y si los tengo... no sé por qué me abandonaron.

La persona que me crió como un hijo, el padre Andrew, fue quien me contó cómo me encontró fuera de la catedral en medio de una noche lluviosa. Me dijo que habían tratado de encontrar a mis padres, pero que no había registros de mi nacimiento por ninguna parte, no tenía forma de saber quiénes eran mis o porqué me habían abandonado... ellos simplemente se habían esfumado de la faz de la tierra de un día para otro... o al menos hubiera preferido creer eso durante toda mi vida, habría sido lo más fácil.

Poco después de cumplir siete años encontré un libro muy curioso que, en la opinión de mi pequeño yo, no tendría que haber estado en una iglesia... al menos si no pretendías quemarlo. Era una especie de diario de color azul con un pino con el número 3 estampado en la portada, al abrirlo encontré una especie de carta que no supe leer en ese entonces, principalmente por la letra de quien lo escribió...

– Tyrone ¿Qué haces aquí? – dejé caer el diario cuando Andrew me descubrió, él parecía sorprendido de que tuviera eso en mis manos – Por la Santísima Virgen... ¿Dónde encontraste esto?

– ...

No dije nada, tenía miedo que me fuera a regañar a pesar de que nunca lo había hecho. Mi "padre adoptivo" siempre había sido muy comprensivo conmigo, me educó con cariño y paciencia por 15 años, y aquel día no había sido la excepción. Ese día me explicó sobre ese libro, sobre cómo lo habían encontrado junto a mí el día en que me dejaron frente a la catedral y algo sobre lo que estaba escrito dentro de este... realmente no me reveló mucho, aunque me dijo que me lo quedara y que yo mismo lo leyera cuando estuviera preparado.

Fue así como descubrí las investigaciones de mi padre biológico (o madre, en ese momento no lo sabía) a lo largo del tiempo, al principio me centré únicamente en leer la nota introductoria del diario, esta no decía mucho... remarcaba algunos lugares que había encontrado junto con alguien (cuyo nombre estaba tachado) en un pueblo en Oregón llamado "Gravity Falls". Había muchas cosas en ese diario escritas en códigos que logré descifrar con el paso del tiempo.

Mientras que mi investigación me acercaba cada vez más a saber sobre mis verdaderos padres, estar en la iglesia donde me había criado y saber que cuando creciera tendría que abandonarla me llenaba de terror. Fue cuando cumplí 12 años cuando decidí que entraría al seminario para convertirme en sacerdote, nadie se opuso a ello.

Una parte de mi vida me acercaba a la verdad que había "buscado" desde que tenía memoria la otra parte sabía que era mejor no conocer la verdad.

– ¿Qué harás? – me pregunto una noche Peter, mi mejor amigo dentro del seminario, desde que habíamos iniciado unos años atrás – Digo... en Gravity Falls encontrarás las respuestas que buscas.

– Pero tal vez será mejor que no sean resueltas – dije en un susurro cerrando el diario de mi progenitor que había estado estudiando desde hacía mucho tiempo atrás – No lo sé... creo que me aterra saber la verdad al final, con todo lo que está escrito en este diario... y como se detiene abruptamente... algo tuvo que suceder para que ellos hayan dejado las investigaciones a medias... tal vez ni siquiera estén vivos ahora.

– En eso tienes razón.

– Sin embargo... viajar a este pueblo puede que me ayude a encontrar las respuestas que busco y, quien sabe, tal vez logre conocer la razón por la que me abandonaron – suspiré, tirando el diario al escritorio de madera que se encontraba frente a la ventana – Señor, no sé qué hacer...

– Creo que deberías viajar – la voz de Andrew nos sorprendió a ambos, él casi siempre entraba en las habitaciones de la mayoría de seminaristas a dar las buenas noches, ciertamente ya era muy tarde – Conocer tus orígenes, saber de dónde vienes para estar seguro a donde quieres ir... Además, hijo mío... tu y yo sabemos que aún hay algo con tus padres biológicos que tienes que arreglar ¿cierto?

– No lo niego – sonreí – no quiero guardarles rencor... pero no saber por qué me abandonaron...

– Tal vez el viaje te de las respuestas que necesitas para perdonarlos.

"Perdonar a mis padres", ese era el único obstáculo que tenía para seguir con mi vida... no sabía porque me habían abandonado, no sabía lo que significaba este diario en sí... la ignorancia hacia quienes habían sido mis padres era algo que me molestaba desde que era niño.

Teniendo la oportunidad de responder a mis preguntas en mis manos, era algo que no podía ignorar...

En ese momento pensé que Dios me estaba dando una señal, que lo mejor era viajar a Gravity Falls para conocer el pasado de mi familia biológica, estaba tan emocionado con ello que olvidé por completo que, a veces, las trampas del demonio se disfrazan como grandes oportunidades...

¿Qué mejor frase podría usar en este caso? Bendita ironía. 


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*Editado*

De este capítulo solo cambié detalles, pues me encanta como empieza.

Haré todo lo posible por tener editados todos los capítulos para los primeros días de la próxima semana y poder comenzar con lo que quieren leer.

Así que, bueno, este es un nuevo proyecto que me tiene muy emocionada. Espero que les guste y si hay alguna falta de ortografía o incoherencia, avísenme, por favor.

También les invito a pasar a ver mis otras historias: "A un paso del más allá" (Percico) y "Viviré por ti" (Larry Stylinson), si les gustan los ships y quieren que me apresure, claro.

Se les quiere,

Daira Ajax.

(Saori - san)

(@user81868273)

Pd. Ahora si me disculpan, mi tarea de comunicación no se va a hacer sola.

El Final de su mundoWhere stories live. Discover now