Prologo.

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                Apenas entraron a la sala fueron invadidos por un olor que conocían de memoria, a pesar de lo jóvenes que eran la mayoría de los presentes. Aquel aroma en especial, logró a más de uno impedirle el paso y permanecer quieto ante el asco que causaba. Varios siguieron caminando e ignorando aquel olor a podredumbre y sobre todo a algo en especial, muerte. Todos los presentes podían sentir ese aroma en especial que más de una vez habían tenido la mala suerte de experimentar. Más de uno había tenido la oportunidad, todos llevaban sangre debajo de sus uñas y lo sabían completamente. Por lo tanto, nadie se detuvo y siguieron avanzando con las armas en alto, dispuestos a matar a quien quisiera detenerlos.

                Era una de esas misiones suicidas, que no tenían solución y que eran pocas las posibilidades de sobrevivir. Pero aún ahí estaban, siguiendo a la jefa del grupo. Los Williams eran un grupo de motoqueros que habían dejado de pensar en motos desde hacía mucho tiempo, se dedicaban a cosas mucho más oscuras y tapaban todo con su pequeño club de motos. Pero a nadie le importaba, a fin de cuentas en Auburn se sobrevivía.

                La jefa del grupo, Francis Williams, era una mujer dura y cruel desde que había nacido. Su esposo había muerto en sus brazos, víctima de un disparo de sus enemigos. Ella había tomado la dirección del grupo y estaba esperando que su hijo Hunter, ya bastante grandecito, comenzará a hacerlo. El chico ya era un hombre y estaba rozando los treinta, pero aun así se negaba a sentar cabeza. Era de esas personas malhumoradas que no deseaban nada de lo que les había tocado y Francis tenía mucho para él. Más de lo que imaginaba.

                Con la mujer a la cabeza, el grupo de hombres se movían dispuestos a robar las armas de sus enemigos, los mafiosos rusos que invadían Auburn. Les habían robado las armas que ellos exportaban y los problemas habían llegado, por lo tanto estaban perdiendo muchos clientes. Francis creía que aquella era una mala idea, entrar en la boca del lobo nunca era una buena estrategia. Pero los integrantes del grupo habían votado por hacerlo y ella no podía quedarse atrás, le había costado conseguir el respeto que tenía. Todos le temían y ella no le importaba disparar en la frente de algún inocente para demostrar que tenía el mismo coraje que un hombre.

                Uno de sus hijos estaba a su lado, Hunter, con aquella barba bastante crecida y sus ojos azules observando el terreno. Como de costumbre, las casas de Auburn estaban destruidas y esa no era la excepción. Le habían dado la información sobre la mafia en aquel lugar pero no estaban seguros por completo.

                Confiaba en sus fuentes, pero no estaba del todo segura en ese momento. Ella era una de las personas más buscadas en la ciudad y tenía el lugar más codiciado por sus compañeros del grupo. Podían traicionarla en cualquier momento y nadie iba a pelear por ella, aunque por la mirada de su hijo dudaba de eso.

                —Ya estarían atacándonos si estuvieran aquí —le comentó Luke, su hijo del medio. Aquel chico amaba ese club y daba su vida, a diferencia de su hermano mayor. Francis no lo dejaba tomar el mando porque sabía que Hunter era el mayor y era el más parecido a su padre. Eso traía mucho rencor en la familia, pero Francis sabía controlar a sus dos retoños con un buen golpe.

                —No son idiotas, están ocultos —aseguró con mucha firmeza, sin dudar de las fuentes. La persona que le había dado esa información era confiable para ella y no estaba ciega como para ver a varios mafiosos entrar en esa casa. Pero lucía realmente destruida y abandonada, quitándole todo tipo de esperanzas.

                —Madre... esto es una locura, aquí no hay nadie —se quejó Hunter, hablando finalmente y haciéndolo casi a gruñidos. Así era él, no hablaba sino que gruñía. Sus hermanos decían que se parecía a un gato gruñón que nadie quería y que terminaba muriendo solo. Ella esperaba que no fuera así, de hecho, Hunter era muy guapo para morir solo. Además, ella quería nietos.

HUNTER. Tierra de salvajes #1 [Terminada]Where stories live. Discover now