Melodía del Corazón |Larry Stylinson|

Capítulo 3.

Autora: Normalmente escuchamos nuestros pensamientos, ¿alguien se ha puesto a escuchar únicamente a su corazón?

Harry.

Las melodías que se comprendían con sólo escucharlas eran aquellas que salían del alma y que acariciaban la piel de las personas que las apreciaban mientras eran interpretadas. Cuando los sentimientos al escribir eran grandes y profundos como las aguas de los mares, se lograba eso y mucho más; lo sabía porque lo había vivido en más de una ocasión, razón por la cual se esforzaba por lograr ese efecto siempre que se sentaba a componer delante del piano.

El piano era un instrumento gentil. Siempre lo describió así cuando le había tocado explicar la razón por la que lo había elegido en lugar de cualquier otro. Entendía las emociones que se cargaban en el corazón al instante, aunque creía que todos los instrumentos tenían ese comportamiento igualmente, por alguna razón él se había aferrado al piano y no se arrepentía de su decisión, y tampoco se arrepentía de las horas y años que le había dedicado.

La vida le había llevado hasta el piano y sentía que no podía haber elegido un instrumento distinto para liberar las emociones de un corazón tan roto como el suyo. Sin embargo, Louis parecía comprender ello, tomarlo y llevarlo a su interpretación con violín, o al menos eso era lo que le hacía creer al estar de pie frente a él tocando "Kiss the rain" con maestría en su violín, como si fuese lo más sencillo del mundo.

En ciertas partes de la melodía había captado a Louis cerrando los ojos, sintiendo el dolor con el que Harry había escrito esas notas, como si fueran letras de canciones con sentimientos explícitos.

- Excelente - dijo, Niall, aplaudiendo sin muchas ganas apenas el chico concluyó la pieza.

Harry miró a su amigo, quien se encontraba sentado a su lado. Sabía que el rubio no había sentido lo mismo que él, que las cosas más importantes las había dejado pasar por alto como el entendimiento de los sentimientos que era grande y profundo. Aunque en realidad, no entendía muy bien lo que su amigo hacía ahí en general.

Sin embargo, a pesar de que Niall aplaudía, la mirada de Luis se encontraba fija en él, como si esperase a que le diese su aprobación.

- Opino lo mismo - sonrió - Fue excelente.

Miró al de ojos azules sonreírle de vuelta y sintió aquella extraña sensación que antes le había causado cuando se dio cuenta de que sabía su nombre y lo trataba con familiaridad.

Desde el día anterior habían decidido que tenían que empezar a elegir las melodías que interpretarian lo antes posible, de todos los sitios les pareció que la casa de alguno de los dos sería el sitio más idóneo, por lo que Louis había llegado temprano a casa del rizado, quien le había proporcionado la dirección aquella misma mañana por medio de un mensaje de texto.

Sí, aceptaba que él había dado aviso a Niall sobre el ensayo que tendría con el chico de ojos azules, era necesario debido a que él se encargaba de todo en su vida y necesitaba que mantuviera su día libre de molestias para poder concentrarse en lo que trabajaría con el violinista. Sin embargo, no esperaba que su amigo rubio se apareciera en el lugar un par de minutos después de que Louis llegó a su casa.

Apenas estuvieron en la sala de estar todos juntos, Harry se había animado a pedirle a Luis que interpretara "Kiss the rain" únicamente porque desde aquella mañana en la escuela de música, esa pieza interpretada por Louis sonaba una y otra vez en su mente.

No era que sintiera molestia por la presencia del rubio, simplemente era que el chico no tenía idea de lo que trataba aquello. Niall a pesar de que llevaba años a su lado, no entendía al cien por ciento su manera de ver la música, lo dejaba más claro aún cuando se quedaba por lagos minutos mirando su móvil y dando pequeños sorbos a su vaso térmico que contenía café unos minutos después de soltar un largo bostezo.