Viendo el PercyJackson-Verso

Capítulo XXXI Décimo Primer Mundo

Percy Jackson a Rick Riordan, así como de cualquier otro elemento de cualquier otra obra, creación que aparezca, créditos a quien corresponda

—Pensamientos—

—Hablando—

<acción>

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Percy empezaba a molestarse ... otra vez, llevaba horas caminando a través de una niebla sin fin, solo acababa de regresar de su misión donde descubrió que los dioses egipcios existen, podía haber ido al campamento a informar a Quiron, pero había decidido que Blackjack lo dejara en las calles de New York, quería un rato para pensar.

Había estado atrapado en sus pensamiento sobre los sucesos del ultimo año, que no había sido ... fácil, tras la guerra su relación con su novia estaba ... tensa, Annabeth se había centrado en su trabajo como arquitecto del Olimpo, que hizo que pasaran cada vez menos tiempo juntos, le molesto en un inicio, pero después de hablar con Quiron que notó que estaba enojado; su viejo maestro y segunda figura paterna aunque a veces parece serlo más que Poseidon, había decidido ser su confidente; tras hablar con él pudo ver que el trabajo de la hija de Atenea era su forma de lidiar con el Tártaro, necesitaba tiempo, al igual que él.

La cuestión era ¿cuánto tiempo?, no podía quejarse, el también aun estaba sanando, aun seguía sufriendo de pesadillas, su padre Poseidon le ofreció borrar sus memorias de ese lugar, pero se negó ya que decidió superarlo.

Su padre lo respeto pero sano su cuerpo de todo el daño que había quedado de su vida como semidiós, pero también las pesadillas disminuyeron, su padre hizo algo, no borro sus memorias, pero disminuyo su tormento, una pequeña parte de Percy estaba molesto, pero principalmente agradecido debido a algunos episodios que tuvo en los que llegó a creer que seguía en el Tártaro y lastimar a algunos campistas en algunas de estas ocasiones, ahora eso ya no pasaba. Se entero que Atenea le ofreció lo mismo a su hija, sanó su cuerpo, pero no pudo borrar todos los recuerdos de Annabeth del pozo.

Otros pensamientos que estaban en la cabeza de Percy eran que esperaba que esta vez los dioses cumplieran lo que le habían prometido tras la guerra con Kronos, que solo cumplieron en cierta medida, pensando en ello esperaba que esta vez Calypso fuera libre, para asegurarse debería preguntarle a su padre. 

Pensamientos similares estaban en su cabeza cuando la niebla lo rodeo, desde entonces había estado caminando desde entonces, por momentos tratando de usar sus poderes para despejar su camino pero nada ocurrió. La preocupación tardó tiempo en llegar ya que comparado con el Tártaro, su situación actual era mucho mejor, después de un tiempo las Moiras se le aparecieron y solo le dijeron que caminara en una dirección que señalaron antes de desaparecer, eso fue hace 2 o 3 horas pero no veía la salida de esta niebla.

Siguió caminando y caminando, hasta que finalmente perecía que podía ver algo de luz, acelero el pasó, no lo suficiente para trotar.

EN EL OLIMPO

Todos los presentes en la sala de los tronos de los dioses estaba cuchicheando sobre las ultimas acciones vistas en el segundo mundo por las contrapartes de los héroes de antaño, jamás se los hubieran imagina actuar así por miedo a una enfermera, aunque por lo que habían visto que dicha enfermera hizo a Quiron era comprensible.

Hestia estaba por decir que tomaran un descanso, justo después de que Hermes guardo el disco y estaba por poner el siguiente, cuando la niebla volvió a aparecer, todos voltearon de inmediato su atención a esta, podían ver una silueta acercarse, que poco a poco fue revelándose, los del futuro fueron quienes mostraron más sorpresa, los griegosF se empezaban a levantar de sus asientos lentamente.