"𝑵𝒂𝒓𝒏𝒊𝒂 𝒚 𝑯𝒐𝒈𝒘𝒂𝒓𝒕𝒔; 𝒅𝒐𝒔 𝒎𝒖𝒏𝒅𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒄𝒐𝒎𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆𝒏 𝒖𝒏 𝒎𝒊𝒔𝒎𝒐 𝒑𝒂𝒔𝒂𝒅𝒐 𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒔𝒐𝒃𝒓𝒆 𝒕𝒐𝒅𝒐 𝒖𝒏 𝒎𝒊𝒔𝒎𝒐 𝒅𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐"
Hermione Granger es la bruja más brillante de su edad, acostumbrada a siempre...
Narnia era un sitio donde la magia reinaba sin embargo frente a sus ojos un lugar tanto extraño como espléndido se mostraba como el nuevo ropero de aventuras ante los ojos de los reyes.
Las cuatro mesas, estaban repletas de estudiantes que curiosos no dejaban de susurrar y señalar hacia los reyes, sus rostros frescos y nuevos resultaban pálidas linternas de luz en medio de la sombría cotidianidad del lugar. Algunos estudiantes estaban molestos pues ya llevaban la pijama puesta debajo de la bata debido al repentino anuncio de regresar al comedor pero su curiosidad era mayor a su impulso por dormir.
Las miradas de los estudiantes eran como veloces flechas que surcaban el viento hasta llegar a ellos, sin embargo la atención de Edmund no estaba en ningún estudiante o profesor, él miraba boquiabierto el techo del lugar, el cual parecía estar expuesto al cielo sólo que en lugar de estrellas eran velas flotando, las que daban luz al lugar. Fue encontonces que recordó las palabras de Hermione durante la cena: El techo estaba encantado.
Tanto el trío de oro como Ginny y Draco caminaron con discreción hacia sus correspondientes mesas.
Ginny claramente sintió como Dean Thomas le dedicaba una dulce mirada pues se veía realmente hermosa con su cabello de fuego y su vestido amarillo mientras Draco tomaba asiento en su mesa para ser rodeado por sus compañeras de Slytherin quienes estaban impresionadas por lo bien que el rubio se veía con aquellas prendas que tanto disfrutaba traer encima.
—¡Estudiantes de Hogwarts!—continuó el profesor Dumbledore—. Es un honor para mí presentarles y contar con la presencia de los reyes y reinas de Narnia, quienes se nos unieran a partir de este año en nuestros estudios, aquí en el colegio. Les pido que les den una cálida bienvenida y los hagan sentir como en casa—los susurros aumentaron, sedientos de curiosidad pues nadie daba fe de que la leyenda de Narnia era cierta—. ¡Ahora, la ceremonia de selección de las casas!.
El director se había encargado personalmente de explicarles—durante la cena en Narnia—cada una de las características de las casas que existían en Hogwarts, así como sus fundadores e inclusive un poco de historia sobre cada una de ellas y la importancia que tenía la ceremonia de selección, ya que sus casas se convertirían en sus familias durante su estadía en Hogwarts, o por lo menos eso había mencionado el profesor Dumbledore, así como serían los lugares donde tendrían sus dormitorios y pasarían parte de su tiempo libre.
Con la mente sin prejuicios los reyes estaban con el corazón saltando en el pecho, no les importaba la casa para la que fueran seleccionados, su mayor deseo era poner el nombre de Aslan en alto, así como cumplir con su misión, y sin importar en que casa estuvieran, los cinco reyes iban a dar todo lo que estuviera en ellos para lograr que Aslan se sintiera orgulloso. Además el profesor Dumbledore les había hablado maravillas de cada una de las casas.