Capítulo 25: Séptimo día de vacaciones; Descubriéndome

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Saludos; AlexanderRodrguez346 blaneyglz373 danieladaniel1301 por sus votos y comentarios ❤️❤️
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Stephania

Me tapa la boca ese alguien y me adentra en una habitación oscura, trato de sacar mi arma pero no está, fui muy lenta.

—Te gusta jugar, ¿eh Steph?— Franco me pregunta mientras se acerca a mi oreja derecha.

—¿Jugar?— pregunto haciéndome la tonta.

—¿No es lo que has estado haciendo?

—No sé de qué me hablas— me alejo de él.

—¿Qué escondes Steph?—se recarga en la pared cruzado de brazos.

—¿Que qué escondo? No sé si logras verlo pero mi belleza aflora, no se controla— jugueteo con la respuesta.

—Sabes que no hablo de tu belleza—dice adusto.

—Entonces, ¿me encuentras guapa?— Me acerco a él para acariciar sus hombros.

—Sabes que sí y más que eso Steph— me mira a los ojos.

—Entonces demuéstramelo— rozo mis labios con los de él y juego con ellos.

—Steph..—lo interrumpo con un beso largo y profundo antes de que diga algo más.

Nos movemos al sillón entre tropiezos y carcajadas, él me hace sentir una mujer libre y segura de sí misma, es algo que no sé explicar. Me ilusiona pensar en esas cosas, sé que son mentiras pero me gusta creérmelas.

Le quito la polera, quiero ver cada detalle de él como las pecas de su rostro, lo beso intensa como si fuera lo último que haré, tiendo a separarme un instante de él, quiero apreciarlo.

—¿Que haces?—se extraña por mi acción.

—Te veo— carcajeo.

—Si, me doy cuenta de eso— sonríe—, me refiero a por qué lo haces.

Paso mis dedos por su abdomen hasta dentro de su pantalón, toco esa suave piel que lo caracteriza.. Esa piel de bebé.

—Me gusta tocarte, sentirte de otra manera que no sea sexual— lo miro a los ojos—, es algo que se ha vuelto mi hobby, mi atracción.

—¿Entonces no te gusto sexualmente Steph?— me pregunta con esa voz que moja cuando lo escucho hablar.

—No seas idiota— suelto media molesta y me  alejo de él.

—Hey ven—me toma del brazo.

—No— digo, ésta vez molesta—, no sé qué mierdas te ando diciendo y tú me sales con esto, suéltame.

—Me encanta que me digas estas cosas Steph. Mírame— él me toma del mentón—. ¿Crees que no estoy pendiente de ti?

—No— respondo.

—¡Claro que no! ¿Pensabas que si?— carcajea.

Mierda.

—Eres un gran imbécil— intento irme.

—No seas tontita, es una broma— carcajea—. Obvio que pienso en ti.

—¿En serio?— pregunto, tengo una pizca de ilusión en mis ojos.

—Cada vez que puedo, si—vuelve a carcajear.

Todo eso se va a la mierda.

—Idiota— bufo.

Todo Lo Impredecible Es PredecibleWhere stories live. Discover now