Capítulo 34: "La Patrona"

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Salgo enfurecida de la casa con dolor abdominal y en mi pierna izquierda, debería estar en recuperación, Franco debería estar mimandome, apapachandome, diciendome que le parece mi mensaje, si me perdonó, si me quiere o ya no hay oportunidad, pero eso no sucederá.

Voy directo al garaje a sacar el auto de mi padre BMW tiene una tecnología avanzada, al momento de egresar la llave los escoltas saben que tienen que seguirme.

El motor me urge, me emociona pero no dejo de pensar en ellos, que estarán haciendo en este preciso momento, me enerva cada movimiento que transcurre en conjunto.

Enciendo la música con “Radioactive” y me dejo ir en mis pensamientos y pensar en mi recuperación.

Me encanta New York, sus paisajes, los edificios, la gente, pero lo mejor son los negocios de este lugar, es la central de muchas instituciones y de la Mafia también.

Me estaciono en el centro comercial más cercano para abastecerme, entro como una persona común sin estilo. Comienzo a ver ropa necesaria, ya que se me cruza una mini tortura para Franco —río para mis adentros —me llevo ropa interior, unos par de jeans, zapatos, un telefono y un terno para el.

Salgo con pocas cosas pero ya no doy con el hambre, voy a una comida rápida de la calle, me enorgullece las personas que se esfuerzan por sacar a su familia a delante y no estar en este negocio de la mierda que te lleva a la muerte.

Pido una chorrillana, con una coca cola, mientras espero reflexiono de que me gustaría a ver nacido en una familia normal, de esfuerzo, que mi preocupación sea solo que saque mis estudios adelante y no la muerte que me avecina y me sopla cada día, que  problema de mi familia sea el dinero y no que nos invadan el territorio.

-    Esta listo –me indica la niña
-    Gracias linda –le entrego 100 dólares
-    Sale 5 dolares la comida mi niña –me lo dice mirando a mis ojos
-    Lo se, pero usted lo necesita más que yo –tomo la comida.

Me siento un poco realizada con mi afecto con la mujer y en el auto termino de comer mientras actualizo mi nuevo telefono, durante marco a la mano derecha de mi familia.

-    ¿Ferro? –pregunto
-    ¿Cómo te has sentido? –me pregunta por llamada
-    Mejor. ¿Cuándo puedo volver a Florida? –le pregunto
-    Recién estamos invadiendo el territorio, lo mejor es que te quedes unas semanas allá, hasta cuando esto se tranquilize –me indica
-    Está bien –contesto resignada
-    Recuerda, más de tres minutos no puedes hablar –me indica
-    Está bien –corto.

Me intriga mi angustia por mi mejor amiga y la llamo.

-    Ale –contesto
-    Stephania!! –grita emocionada –despertaste!!! –sigue emocionada, no me deja hablar –¿hace cuánto despertaste? –pregunta emocionada
-    Recien, hace unos minutos –le contesto
-    No me ha dicho nada de que despertaste Francisco..
-    ¿Francisco? –le pregunto
-    Si, vino a buscarme cuando fue Franco a darte la sorpresa ..
-    Ok –la corto
-    Me encantaría que estuvieras acá –me abro
-    A mi igual –se le pone rasposa la voz
-    Ya sabe la verdad Franco –corto el momento
-    Que!!!!
-    Si..
-    ¿Cómo ?, ¿Cuándo? –pregunta
-    Le envie un mensaje cuando estaba en mis últimas –le contesto –pero luego te cuento bien, se me esta acabando el tiempo
-    Te amo!!! –me dice
-    Yo igual!!!

Corto la llamada.

Doy un respiro y prosigo a la casa de seguridad donde establesco, ya no soy la misma, desde la muerte del hombre del bar algo se apagó en mi, lo siento y tengo miedo de eso el apagar mi humanidad; algo me falta, mi inocencia, mi tranquilidad, ahora soy una verdadera Ivankov.

No me doy cuenta de cuando llego a la casa de seguridad, le entrego las llaves a un escolta para que se encargue, entro  y solo me encuentro con Claudia en la cocina.

-    Claudia, entraga esta bolsa a Franco ese será su uniforme desde ahora –levanto mi brazo para que no opine

Voy a mi cuarto a colocarme ropa interior, necesito hacer ejercicio y así lo haré, en ropa interior. Bajo al subterráneo donde está el gimnasio y doy aleatoria al mix de David Guetta.
Se me hace mucho más cómodo entrenar así con ropa interior que con ropa deportiva, todos deberían hacerlo, pero la sociedad criticaría como siempre pero eso no me impide hacerlo yo.

Comienzo con 20 minutos de trotadora, luego sentadillas con pesas, así hasta que decido hacer boxeo, no me coloco guantes, si no solo vendas.
Me imagino a Claudia con Franco y le doy duro al saco, hasta que siento alguien detrás mío , se quien es y con más razón al momento de girarme le doy con mi pie en la mandíbula , pero Franco se agacha rápidamente y quedo jadeando.

-    Quiero que salgas y te coloques tu uniforme Franco –le informo
-    No encuentro la necesidad Sveta –Franco recalca el Sveta
-    Para mi sí es necesario –me giro pero no me deja
-    ¿Porque te gusta joder? –me pregunta alterado.
-    Porque me encanta y es lo único que se hacer–le respondo –pero ese no es el caso, estamos en New York y todos mis guarda espaldas vestirán así. No llamaré la atención porque eres pretencioso Franco.

De un momento a otro siento un tirón muy fuerte en mi pierna, lo que hace que llegue al suelo.
Franco reacciona inmediatamente y se agacha e intenta tocarme.

-    No me toques imbécil–trato de empujarlo
-    Eres terca y no reconoces que necesitas ayuda –me mira fijo.
-    Necesito a Nicolas, llamalo –le indico
-    Estas delirando —ignora mis palabras.
-    No lo estoy –me comienzo a enfurecer
-    ¿Porqué necesitas a otro hombre si estoy aquí? –me interroga
-    Porque no lo estas Franco!! —me altero fácilmente — y el hombre que necesito en estos momentos es a Nicolás.
—Perfecto, no se que hago en éste lugar, llegará Nicolás y me iré a Florida que te quede claro —carcajeo
—¿Todavía no te das cuenta? —Le pregunto
—Si me doy cuenta —contraataca
—No, no te das cuenta —me colocó de pie a duras penas — Soy tu patrona desde el momento que te revelé quién soy, ya no soy la Stephania que conociste —lo recalco —y mientras se me de la gana tenerte a mis pies lo haré.
No lo dejo responder, ya que me retiro del lugar.
Toma mi brazo.
—Tu no me conoces —recalca — Y menos de lo que soy capaz — me mira con odio.
—Tu menos — Lo miro con rabia, porqué no puedo odiarlo — ¿De qué eres capaz? —Me río — ¿Matar?.
— Créeme qué más —se implora
— Y yo más —Le recalcó — Di estuve a nada de hacerlo contigo eso debería responder todas tus dudas.

Me retiro a mi cuarto a darme una ducha y desplegar mi sueño, es lo único que anhelo en estos momentos..

                               (...)          

Holaa, disculpen la demora de los capítulos pero he estado muy ocupada estoy terminando el año y me están llenando de cosas.  Para compensar haré un especial de halloween..

Saludos Desde Chile ❤️🇨🇱

Saludos Desde Chile ❤️🇨🇱

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Todo Lo Impredecible Es PredecibleWhere stories live. Discover now