Capítulo 12. Secreto

194 18 24
                                    

Cuando Woo Hyun llega a su dormitorio, se sorprende un poco al ver a Sung Yeol haciendo sus deberes frente a la computadora. Por lo regular, a su mejor amigo no le importa tener buenas calificaciones, incluso si sus profesores envían reportes semanales a su padre por la poca atención que pone en las clases. Lee ha dicho en innumerables ocasiones que no necesita una carrera para dedicarse a la actuación o al modelaje. Y a decir verdad, tiene algo de razón, puesto que gran parte de su familia se dedica al medio del espectáculo. Sin mucho esfuerzo, el joven ya tiene asegurado un lugar entre las estrellas más reconocidas de la televisión y el cine.

A veces Woo Hyun siente un poco de envidia de él porque su vida parece tan tranquila y fácil, pero sabe de sobra que Sung Yeol ha estado para él en los momentos más difíciles y no puede evitar pensar que le debe demasiado.

—¿Te sientes bien? —pregunta Sung Yeol cuando ve a su mejor amigo echarse en la cama.

Woo Hyun suspira y mueve un par de veces la cabeza antes de responder.

—Sí.

—No lo parece; tienes el rostro enrojecido. ¿Quieres que te tome la temperatura?

—Estoy bien. Es sólo que hace demasiado calor.

—¿Calor? ¡Pero si estamos a cero grados allá afuera! Yo creo que vas a pescar un resfriado. Últimamente has estado bajo mucho estrés y no has comido muy bien —recapitula mientras se pone de pie para aproximarse a Woo Hyun.

—Ya te dije que estoy bien.

—Yo creo que necesitas tomar algunas vitaminas. Espera; buscaré si hay algunas en el botiquín.

Y Sung Yeol se adentra en el baño sin tomar en cuenta lo que Woo Hyun está diciéndole. A decir verdad, desde hace algunos meses siente que no duerme muy bien y que su alimentación ya no es la misma. La mayor parte del tiempo está cabreado o gritando por cualquier cosa y eso ya lo tiene cansado. No recuerda cuándo fue la última vez que tuvo algo de tranquilidad, pues desde que Sung Kyu llegó a la escuela, todo para él ha sido una molestia tras otra. Ese omega ya ha cruzado todas sus barreras y ha terminado con su paciencia; Woo Hyun siente que en cualquier momento caerá desmayado por un colapso nervioso. No hay absolutamente nada que pueda calmarlo ahora, y lo que más lo tiene tan desorientado y en extremo impotente, es que ni siquiera sabe por qué Sung Kyu tiene ese efecto en él.

Su cabeza se siente embotada de sólo pensar en ese tonto omega; tal parece que ya no puede sacárselo de la mente ni por un segundo. Sin importar lo que haga, todo le recuerda a Sung Kyu y tampoco puede evitar caer ante las memorias de las incontables veces que lo ha dejado en ridículo frente a sus amigos, pero, aquello se ha quedado corto con lo que acaba de pasar en el baño hace un rato, porque no puede creer que haya pensado siquiera en acercarse más a él para...

—¡Noooo! —masculla mordiéndose los labios mientras se da pequeños golpes en la frente con ambas manos.

Esa es una imagen que ni en sus más locas pesadillas está dispuesto a consentir. ¿Cómo es que ha empezado siquiera a preguntárselo? ¡Es inaudito! ¡Es inaceptable! ¡Es tan ridículo! Pero, por más que anhele mentirse a sí mismo y obligarse a aceptar que realmente no lo quería, más se da cuenta de que en verdad lo deseaba.

—¡¿Por qué?! —chilla tomando la almohada para presionarla sobre su cara—. ¡Es que no puede ser cierto! ¡¿Cómo es posible que yo quiera besar a Sung Kyu?!

—¡¿Qué has dicho?! —exclama Sung Yeol casi sintiendo que su mandíbula se desencaja. Woo Hyun se incorpora de pronto y no sabe donde meter la cabeza por la vergüenza—. ¡¿Quieres besar a Sung Kyu?! Pero tú... ¿Cómo es que...? ¡¿Por qué?!

Te Odio | WooGyu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora