El Rey de los Titanes

Capítulo 2: 104

Han pasado ya dos años desde la caída de Shingashina y del muro María, dos años desde que aparecieron dos titanes únicos que pusieron al límite la existencia de la raza humana, dos años, desde que un joven rubio despertó en medio del campo, rodeado de una gran cantidad de cadáveres, tanto de humanos como de titanes.

Ese acontecimientos causó tanto revuelo que se lo llamó como "La noche del valle rojo", por el simple hecho de que ocurrió a altas horas de la madrugada, dejando el lugar completamente teñido de sangre. No se sabe que fue lo que pasó, ya que incluso había una gran cantidad de titanes que yacían muertos en el lugar. No sabían quién fue el que se encargó de eso, quién pudo ser capaz de eliminar dicha cantidad.

Era un misterio, al ver que dicha persona quien se encargó de ellos no estaba presente. La gran mayoría asumió que había muerto a manos de otro titán, otros que simplemente había desaparecido y murió a causa de heridas. Pero hubo una parte de la población que pensaba lo contrario. No por el hecho de que el asesino de titanes estuviese muerto, sino, de la cosa que los mató.

Varias personas pudieron asegurar que fueron capaces de oír algo del otro lado del muro. Pudieron escuchar lo que era una especie de rugido tan fuerte y temible que incluso provocó que a varios se les erizara la piel. Solo una persona fue capaz de siquiera ver algo. Un guardia nocturno que se encontraba sobre la muralla.

Esta persona juró por su vida que vió como algo se encontraba peleando con los titanes en la oscuridad, lo deducía por los grandes estruendos que oía, además de que también podía escuchar cómo rugía. Era como si se tratara de un demonio, aún más temible que los mismos titanes, enfrentándose a muerte contra ellos.

Aun así, nadie creyó nada. La gran mayoría del pueblo no se tomó en serio eso, y al joven guardia nadie le hizo caso. Al final, se decidió que fue una horrible masacre de parte de los titanes, y de que hubo una o varias personas que fueron capaces de eliminarlos, perdiendo la vida junto con los demás.

Solamente una persona sobrevivió a eso, un pequeño niño que fue rescatado al día siguiente, un joven que tenía una meta en su mente, y que para poder cumplirla, tendría que atravesar un largo camino.

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-¡¿A que se debe esto?!-

-Tu lo sabes... Lo sabes perfectamente... Nami----.-

-¡¡Por favor, Min-----!!-

-Ku----... ¡Ku----, mírame!...-

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-...-

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-todo saldrá bien... ¿Me oíste?-

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-....te amo...-

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