•Antes•//C.R.O

17

Al llegar a casa estaban todos ahí. Realmente no estaba de humor y haber cargado siete bolsas llenas de cosas no ayudó en nada.

-¡Eh Cenfe!- gritó Franky en cuando me vio.

-¿Donde estabas?- preguntó Lucho pero no respondí. -¿Te ayudo?- se acercó un poco al ver que estaban pesadas.

-Si la concha de tu hermana- respondí de mala manera.

Una vez que dejamos las compras en la cocina, miré a los presentes, Vicky sonrió cuando nuestras miradas conectaron. No obtuvo lo mismo de mi parte, solo quería estar solo.

-¿Paso algo?- Lucas tocó mi hombro. Iba a hablar, hasta que ví a Julieta salir del baño.

¿Algo más?
¿No quiere venir Joaquín también?

Movió su mano en señal de saludo. Le sonreí sin mostrar los dientes.

-No pasó nada- respondí a la pregunta de Homer. -Voy a la pieza- avisé.

Al llegar a ésta, cerré con llave. Abrí un cajón, saqué marihuana y armé un par de porros.

Llamada entrante de Lunita💜.

No iba a atender, así que la rechace y silencie mi celular. Comencé a fumar, escuchando la música, gritos y risas de los pibes.

No tenía sueño, asique salí nuevamente, había más gente en el departamento. Caminé hasta la cocina, agarré unos conitos y no me llamaba la atención estar acá.

Cuando estaba volviendo agarraron mi brazo.

-Te re cortas pibe- habló Vicky.

-Que onda wacha- respondí sonriendo de lado.

En un abrir y cerrar de ojos comenzó a besarme. Se la seguí de onda, realmente no tenía ganas de nada.

-¿No era por ahí?- preguntó divertida y un poco apenada.

-Perdón, pero hoy tuve un día de mierda- hice una mueca.

-Si queres hablar, acá estoy- guiño un ojo y sonreí.

-Nos vemos loquita- me despedí. Seguí mi camino.

Me sorprendí al ver a Duki, Seba, Franky, Troca, Lucho, Homer, Ivo, Alejo y Chulu sentados en la cama cual pendejos de cinco años.

Sabía lo que se venía y no quería.

-Me decís que no es nada y te juro que te pego un voleo en el orto- avisó Neo.

-Dale, que quiero ir con las pibas- pidió Troca.

-No les importa- respondí sentándome en el piso. Éstos suspiraron al mismo tiempo.

-Dale, ¿Que te haces la estrella?- Mauro alargó la primera vocal mientras levantaba sus brazos.

-Encima viniste re enojado- acotó mi hermano.

-Porque haces preguntar re pelotudas Luciano- me queje.

-Conta, porque no nos vamos- amenazó Chulu.

Harto, cansado, agotado me tienen.

-Hablé con mi viejo y me dijo que me deje de gastar plata- mentí.

Éstos fruncieron en ceño.

-¿Que?- preguntó Lucho.

Bueno, fue una muy mala mentira.

-Si, justo tu viejo te va a decir eso- se rió Franky.

-Cenfe, esa no te la crees ni vos- respondió Lucas.

-Posta, les juro que fue eso- intenté seguir, pero fue imposible. Suspire frustrado y comenzaron a reír.

-Si, papá te va a decir algo a vos, acá no gil- habló mi hermano.

-Callate- pedí. -Bueno, no les voy a decir detalles, pero estoy así por Luna- solté de una vez.

-Ah, anda a cagar- se quejó Troca.

-¿Algun día vas a dejar de estar atrás del mismo culo?- preguntó Ivo.

-Mal, encima tiene novio- se metió Alejo.

-No los quiero escuchar- tape mis oidios. -Lalalalalalala- repetí incontables veces.

Una vez que ví que sus labios dejaron de moverse, deje de hacerlo.

-¿Ya se van?- pregunté.

-No, porque estas mal- respondió Mauro. Todos coincidieron.

-Si, te damos apoyo moral- acotó Chulu.

Quiero odiarlos, pero es que no puedo.

-¿Y no pueden darme apoyo moral estando allá?- señale en dirección al living.

-No- hablaron al mismo tiempo.

-Quiero acostarme- pedí.

Y no sé cómo hicimos para entrar diez monos en una cama de dos plazas y media. La joda siguió normal. No voy a negar que me hacían bien al alma, realmente no dejé de reír en toda la noche, incluso me olvidé de lo mal que me sentía.

Miré mi celular después de unas cuantas horas, todas las notificaciones eran de ella. Volví a dejarlo en alguna parte de la habitación y salí en busca de agua junto con Ysy.

Ya no había casi nadie, la mayoría solo dormía en el sillón, el piso y la otra habitación.

-Los volas yá- señale a Alejo, éste asintió.

Volví a la cama y cerré mis ojos, dispuesto a dormir de una vez por todas.

-Cenfe, me esta llamando Luna- habló Luciano.

-Decile que no estoy- respondí ronco.

¿Que mierda hace despierta tan temprano?

-Pelotudo, ya atendi- susurró moviendo mi hombro.

Me senté y lo miré con mi mejor cara de orto,  agarré su celular y suspire antes de hablar.

-¿Que?- pregunte.

-Quiero que hablemos- pidió.

-Otro día, quiero dormir Luna- respondí cansado.

-Tomi, por favor- su voz entrecortada provocó un escalofrío en mí.

-No me digas que estas llorando- me pare de la cama.

-Estoy abajo en tu edificio- habló con dificultad.

-Voy- corté, busqué mis zapatillas, una campera y salí hacia el ascensor.

💫HOLIS💫

Jeje no puedo dormir y bueno pintó.

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