•Antes•//C.R.O

21

Un mes después.

Me encontraba en la quinta de mi vieja, vinimos a despejarnos un poco, aunque lo único que hicimos toda la semana fue estar de joda. Creo que dormí veinte horas como mucho.

Sobre el tema de Luna, tengo para decir que no le hablé, no se lo dije y tampoco pensaba hacerlo. Tengo que preocuparme por las personas que si me quieren en su vida y ella ya me dejó muy en claro que no me necesita.

-¿Vas a comer algo? Estoy haciendo panqueques- habló Vicky desde el marco de la puerta.

-¿Te puedo comer a vos?- pregunté divertido.

Ella se acercó a la cama y se sentó sobre mí.

-Si a todo- susurró para después besarme.

Saqué su remera y comencé a besar su cuello.

-Cenfe- me llamaron. -Uh amigo cierren- habló Homer al vernos.

Suspire pesadamente antes de mirarlo.

-¿Que necesitás?- pregunté como si no pasara nada.

-¿Me acompañas a comprar para la noche?

Lo pensé un poco, pero a Vicky la podía tener cuando quisiera.

-Seguimos después- la miré. Asintió y dejó un pequeño beso en la punta de mi nariz. Se vistió y se fué.

-Te cagué el garche, pero es que los otros están durmiendo- se sentó a mi lado.

-No, ya fué- le reste importancia. Comencé a vestirme.

Una vez listo, subimos al auto.

Maneje hasta la ciudad, que quedaba a una hora aproximadamente.

Aprovechamos para comprar más comida, ya que no sabíamos cuando íbamos a volver. Yo me dediqué a buscar el alcohol, Lucas lo demás. En cuanto por fin terminamos acomodamos todo y subimos nuevamente.

-¿Me vas a decir que onda con la piba esa?- preguntó sonriendo.

-No me mires así, porque no pasa nada- respondí.

-No te creo- acotó.

-No me creas- lo miré de reojo y rió.

-A mi me gusta como se ven- admitió. -Es solo una opinión- levantó sus brazos al ver que lo miré serio.

-A mi me gusta cuando estas callado- respondí.

-Bueno, está bien- le subió a la música y prendió un porro.

(...)

La cabeza me daba vueltas. Habia muchísima gente, realmente no sabía porqué.

Caminé agarrado de las paredes, ni siquiera podía mantenerme de pié. Al final del largo pasillo ví a Victoria.

Comenzó a reír al verme así.

-¿Estas bien?- preguntó.

-Si- agarré su cintura y la pegué a mí. -No sé que mierda me diste, pero no puedo caminar- apoyé mi cabeza en su hombro.

-Ni yo sé que te di- admitió. -¿Vamos a la pieza?

Asenti sin emitir palabra alguna, agarró mi mano y comenzamos a caminar. Ya no sentía ninguna de mis extremidades, pero no era tan malo.

Empezó a sacar mi ropa y me tiró a la cama.

-Si te empezas a sentir mal avisame- pidió.

La besé y ahora era yo el que sacaba su ropa. La miré por unos segundos, su cuerpo me encantaba.

Metió mi miembro en su boca y lo chupó, agarré su pelo para poder manejarla a mi antojo, después de un rato se subió sobre mí y sin más lo metió dentro suyo. Se movía lento, lo cual me volvía loco.

Todo fue subiendo de nivel, hasta que fui yo quien se subió encima. Puse sus piernas en mis hombros y comencé a moverme realmente rápido.

Mi celular sonó, corté sin siquiera ver quien era. Seguí en lo mío. Nuevamente sonó, pero repetí la acción anterior.

Cambiamos de posición, ahora la tenía en cuatro. Golpeaba su culo mientras ella pedía cada vez más.

Por tercera vez, el sonido de mi celular provocó que no pudiera seguir.

Lo miré para ver si era importante.

Llamada entrante número desconocido.

-No atiendas- pidió con dificultad.

Pero ya me había cansado.

-Hola- respondí de mala manera.

-Tomi- se escuchó del otro lado.

Deje de moverme al escuchar que era Luna.

-Tomi, ¿Estas en tu casa?- su voz entrecortada me dio a entender que estaba llorando.

No sabía que mierda hacer.

-Te necesito tanto- volvió a hablar.

Miré a Victoria, quien se separó de mí para sentarse justo enfrente.

-Ahora voy, esperame- dicho eso corté. Me paré y busqué mi ropa.

-¿Vos me estas jodiendo?- habló indignada.

-Perdoname, posta- me disculpe.

Comenzó a insultarme sin parar.

Cuando terminé salí corriendo hacia mi auto. Escucharla llorar me rompía en mil pedazos.

Maneje lo más rápido que pude, en treinta minutos ya estaba a una cuadra del departamento.

Estacione así no más. Y ahí estaba ella, con una pequeña mochila, llorando sin parar.

En cuanto bajé simplemente corrió hacia mí.

-Perdón, perdoname- pidió abrazandome cada vez más fuerte.

-Lu, yo te perdono- respondí intentando no llorar.

-No, yo fui una mierda, no te merezco.

-No llores- me alejé para poder verla mejor. -¿Que pasó?- pregunté, aunque creía saber la respuesta.

Cuando estaba apunto de hablar, la interrumpi.

-Vamos arriba- agarré su mano y entramos.

💫HOLIS💫

Ke le dirá Luna a Tomi?

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