Una deducción de más

429 44 25
                                    

Cuando viste que Sherlock se quedó solo dejaste a Noah para ir con él, tocaste su hombro haciendo que el detective volteé a verte.

Cuando viste que Sherlock se quedó solo dejaste a Noah para ir con él, tocaste su hombro haciendo que el detective volteé a verte

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¿te dejaron solo? -reíste- me concede esta pieza sociópata altamente funcional -extendiste tu mano.

- nope -ríe Sherlock- estaba por irme

- lo sé, por eso vine, no voy a dejar que mi amigo se vaya sin haber molestando a las personas conmigo

- ¿me~ me consideras tu amigo? -preguntó el detective anonadado.

- claro que sí, Sherlock. Eres mi mejor amigo -sonreíste y tomaste su mano para guiarlo a la barra junto a ti y beber un trago con él.

- ¡que bailen los novios con otras parejas! -gritó Janine.

Y gracias a los empujones de la señora Hudson, los gritos de Molly y tu padre silbando terminaste en la pista de baile con John tomando tu mano derecha y tu cintura con fuerza.

- ¿Qué tal Italia? -preguntó John para no estar en un incómodo silencio mientras bailaban.

- ¿en 2 años? -preguntaste son sarcasmo- bien, ya no me quejo... y felicidades por cierto, ya no sé cuántas veces te felicité...

- gracias -respondió mirando hacia otro lado- él se ve un chico... agradable

- ¿quién? ¿Noah? -levantaste una ceja- claro que sí, y él me responde los mensajes... -le tiraste una indirecta al doctor mientras mirabas hacia otro lado.

- ___, eso pasó hace años -respondió John restándole importancia.

- ¿por qué nunca me respondiste? -lo miraste a los ojos con la intención de obtener una respuesta sincera- espere a que me escribieras... te llamé infinidad de veces ¿borraste mis llamadas de la contestadora? Siempre espere a que me respondieras...

- estaba pasando por un mal momento... -lo interrumpiste.

- ¿ah, sí? ¿En ese mal momento conociste a Mary? No me vengas con excusas ¿Qué fue tan impactante como para no escribir o llamar e ignorar mis intentos de comunicarme contigo por... casi medio año?

- Sherlock fingió su muerte, él... -se le hizo un nudo en la garganta al recordar la escena- lo vi caer del techo de Bart's

- sabes que yo podría haberte ayudado, podría haber vuelto a Londres para estar a tu lado y consolarte. Hubiera hecho cualquier cosa para que estuvieras bien, John -confesaste exasperada.

- ese es el problema, yo no quería que dejaras de lado tu vida por la mía

- miraste hacia otro lado indignada- en momentos como esos no puedes escapar... no podes ser un soldado marchando como si nada pasara, no... -respiraste profundamente- ya no tiene sentido, porque de nada sirve pelear o reclamarte, todo lo que nos prometimos y dijimos fue en vano... disfruta de tu boda, lo mereces...

Te zafaste de su agarre y saliste de la pista yendo a la esquina donde se encontraban todos, junto con Noah, fuiste hacia él y lo abrazaste con fuerza afirmando tu cabeza en su hombro.

- ¿qué sucede, cielo? -preguntó correspondiendo.

- nada, yo... tengo ganas de tomar aire, ya regreso -te separaste de él y caminaste a la salida.

A penas pisaste afuera sentiste la brisa dar contra tu rostro, suspiraste tratando de olvidar lo que pasó con John hace unos minutos, pues tú habías querido contactarte con él, volver a Londres para estar a su lado, pero nunca respondió.
La razón de no responder fue por la fingida muerte de Sherlock, después de eso él conoció a Mary cuando tu ya te dabas por vencida al no recibir noticias de él y al final terminaste aceptando una cita de Noah.

- ¿quieres ir a comer papas? -sentiste la voz de Sherlock detrás de ti, te volteas y le dedicas la mejor sonrisa que puedes, la cual es una mueca que refleja un poco de tristeza.

- prefiero helado, se me antoja -dijiste al mirarlo.

- bueno, conozco un lugar... vamos por ese helado -se puso su abrigo.

- tengo que ir por mí... -señalaste hacia el salón- hace frío

- toma -se quitó el abrigo y lo pasó por tu espalda colocándolo en tus hombros- así no tienes que volver a entrar

- ¿Acabas de darme tu abrigo? -preguntaste anonadada.

- sipe. No le cuentes a nadie -ríe mientras caminas.

- será nuestro secreto -pasaste tus brazos por las mangas.

Sherlock paró un taxi y le dió la dirección del puesto de helados que conocía, al llegar pidieron sus sabores y empezaron a caminar mientras comían.

- agh ¿yo elegí este sabor? -pusiste cara de asco- no es como lo recordaba...

- ¿ese era tu sabor favorito? -preguntó el detective y tú asentiste- dámelo -te lo cambio por el suyo.

- gracias Sherlock -le diste una probada- extrañaba el sabor del helado londinense

- ¿tú cómo te sientes con... lo de John? -preguntó Holmes mirandote.

- te mentiría si te dijera que estoy bien, yo traté de contactarme muchas veces con él, pero bueno, ya se casó, y yo tengo un futuro... esposo...

- ¿sabías que estás embarazada? -te interrumpió Sherlock.

- ¡¿qué?! -preguntaste frunciendo el ceño.

- lo siento, hice una deducción de más. Tuviste cambios de humor todo el día, hasta tu... pareja lo noto, tenías... -se alejó un poco para que no lo golpearas- tenías un gran apetito y ahora repugnancia hacia un helado que antes era tu favorito, sin contar que dijiste "tengo antojo". Te sugiero que hagas una prueba de embarazo, para confirmar mi deducción

- no... -quedas anonadada- ¿es~ estás seguro? -lo miraste y te vió con cara de "¿Cuando no estoy seguro de una deducción?"- olvídalo. Necesito que no le digas a nadie, Sherlock. Absolutamente a nadie

- ¿por qué? -preguntó confundido.

- porque aún no quiero que nadie se entere ¿me prometes guardar el secreto? -asintió- gracias...

Haría cualquier cosa por ti(John Watson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora