Your Eyes Tell ᵏᵛ

58: no necesito ni un Alfa

Yoongi se acomodó frente al espejo, el moño atado a su cuello que cubría su cicatriz, lo giró, lo volteó y al final lo deshizo al sentir que era demasiado

Quería impresionar a Hoseok, pero no quería ser tan obvio

— me veo ridículo con esa cosa — balbuceó, peinando su cabello con sus dedos

Suspiró y se vio de pies a cabeza. Aquella fea cicatriz resaltaba mucho, debía ocultarla si o si.

Volvió a ponerse el moño mientras fabricaba mentalmente una excusa para Hoseok por si le preguntaba por eso

Hobi comenzó a llorar y a chillar por atención, estirando sus bracitos, abriendo y cerrando sus manitos como podía.

- todo no se trata de ti cariño - le contestó Yoongi, retocándose los labios antes de ir a por él

Se asomó en su cuna y le sonrió. Hobi dejó de llorar y le miró fijamente

— ¿ya ves? Estoy aquí. No tengas miedo — le susurró, dándole caricias en su pancita

Su madre tocó a la puerta: — ve bajando, Hoseok está por llegar

Yoongi mordió sus labios y tronó sus dedos para liberar sus nervios: — yo puedo yo puedo — se balbuceó, sujetando y llevando a su cachorro a su pecho — nosotros podemos, ¿verdad? —preguntó a su pequeño, buscando su chupetín para colocarlo en sus labios y hacer que se distrajera — eso, vamos a quedarnos tranquilitos, sin llorar, sin gritar y sin cagarnos — le susurró, dejando su habitación atrás

— ¿quieres que te baje la carriola para que estés más cómodo? — su padre pasó por su lado y acarició con la yema de su dedo la mejilla de Hobi

Yoongi asintió: — gracias pa

— escuché un auto, creó que ya llegó — dijo su madre, llevando la ultima olla de comida a la mesa y asomándose por la ventana para verificar — ¡llegó! ¡Llegó!

Yoongi fue a sentarse al comedor, mirando la puerta fijamente mientras acariciaba la espalda de su bebé, un tanto nervioso.

— ¡bienvenido Hoseok! — Choa le dejó pasar a la casa — es un gusto poder cenar y charlar contigo

Yoongi suspiró y sonrió forzadamente. Deseaba que su madre dejase de parecer más emocionada que él

 Hoseok saludó a sus padres con reverencias y luego se acercó al Omega — ¡hola Yoongi, hola hobi! — se agachó frente al cachorro y le hizo caritas

— hola — correspondió Yoongi el saludo, viendo como su pequeño estiraba un brazo hacia Hoseok para tocar su rostro, mirándole con ojos curiosos

— un gusto — Hoseok tomó su manito con dos dedos y rió

Yoongi no sabia cual sonrisa era la más linda, si la de Hoseok, o la de su cachorro al ver al Alfa.

— Hobi a crecido bastante, la ultima vez que le vi estaba más pequeño — comentó el Alfa con una gran sonrisa, tomando el lugar en la mesa que le habían asignado

— mmh si, toma... mucha formula — Yoongi frunció su ceño, tratando de calmar a su pequeño inquieto en su regazo

El cachorro comenzó a chillar y a llorar, tratando de voltear su cabecita para ver a Hoseok y usando sus piernas para patear. El Omega se sonrojó por la escena que estaba haciendo y se disculpó con Hoseok de inmediato

— lo siento, él no es así usualmente — agregó, intentando sonreír para fingir que no se sentía incómodo

— no se preocupen por mi, que un cachorro haga rabietas es normal — contestó encogiéndose de hombros