Tᴡᴇʟᴠᴇ Kɪʟʟᴇʀs. ᶻᵒᵈⁱᵃᶜ

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 12

- ¡Maldita sea! - Decía un Mao molesto por aquella situación.

Mientras se ponía una chaqueta negra de cuero, lo más rápido que podía.

- ¡Ese idiota me va a escuchar!

Seguía hablando cosas así de su propia sangre, su hermano. Hasta que pudo escuchar el sonido de la puerta.

Bajó inmediatamente.

- ¡No me despertaste para la junta estúpido! - Le reclamaba mientras parecía buscar alguna mochila de cosas.

Por fin dijo algo Tao. - Tus chaquetas me dan demasiado calor ¿Has intentado usar poleras sencillas?

- No me gustan de ese tipo y... No pregunté eso. ¿Porqué no me despertaste?

- Lo escribí claro en la nota que dejé ¿La leíste?

- Eso es obvio, ahora debo correr para saber que dijeron.

Tao tomó un yogurt del refrigerador y mientras se llevaba la segunda cucharada a su boca preguntó. - ¿Y planeas ir con el pantalón de tu pijama?

- ¡No puede ser! - Estaba a punto de salir y tuvo que darse la vuelta para subir corriendo hasta su cuarto.

No tardó demasiado tiempo en bajar de nuevo pero ya había pasado mucho tiempo desde la hora en la que debió estar ahí.

- Creo que deberías quedarte Mao.

- ¡Agh! Tienes razón, no tiene caso. - Tomó asiento frente a la TV

- No hubo nada interesante en tu área, pero prácticamente te querían culpar de algo.

- Gracias...

- Y... Cuénteme de esa chica ¿Cuál era su nombre? Ah si, Cáncer...

- Es mi jefa, ¿porqué?

- Se nota que eres su favorito. - Tao rió aún con algo de yogurt en su boca.

- ¿Qué habrás hecho Géminis? - Sonrió.

Para ellos era raro llamarse por "Géminis", cuando ya se conocían mutuamente desde la cuna.

- En fin, creo que Kanna sabe que yo no era tú, mañana si te dice algo, dí que si eras tú.

- Claro, me hiciste ver responsable.

- Y... Si pregunta Escorpio por mí, estaba enfermo ¿Va?

- Creo que no pensaste en eso ¿verdad?

No hubo respuesta, era obvio que no lo hizo y solo quería "molestar" a su gemelo.

- Creo que le deberías mandar un mensaje avisándole.

- ¿Que debería decirle?

- Mmm, no lo sé ¿Quizá que estabas enfermo y todo ese disparate?

- Bueno... - Tomó su teléfono y comenzó a escribir una de esas excusas.

Era muy bueno en eso de las mentiras, jueguitos y actuaciones, desde luego que le han creído todo lo que ha dicho y escrito desde tiempos inmemorables.