Era un día como cualquier otro; la Academia Hyakkaou giraba en torno a los estudiantes y a todos aquellos apostadores compulsivos.
Sayaka Igarashi caminaba apresuradamente hacia el Consejo Estudiantil, cuando de pronto una distracción y la rápidez le causaron un choque con otra persona que la hizo caer fuertemente al piso, golpeándose el delicado trasero.
-¡Lo siento! No vi por dónde caminaba, ¿estás bien, señorita Igarashi? -preguntó una voz femenina con un toque peculiar en su voz.
-No te preocupes, todo bien. -Sayaka se levantó lentamente, sobándose discretamente el trasero con una mano. -Tranq..., -la joven peliazul levantó la mirada para encontrarse con la persona que la había hecho caer, y su rostro cambió definitivamente cuando se dió cuenta que esa persona era a quien más detestaba en el mundo. -Se-ño-ri-ta Ja-ba-mi -pronunció lentamente aquél nombre y le lanzó una mirada fulminante a Yumeko Jabami. -No te preocupes, estoy bien. Descuida -respondió por educación, tragándose su desagrado por la joven morena.
-¿Segura que estás bien, señorita Igarashi? O, ¿acaso necesitas mi ayuda para sobarte ese lindo trasero?-cuestionó juguetona la joven de ojos almendrados, mientras se mordía el labio inferior.
-Ah, ¡¿QUÉ?! ¿Acaso estás loca, Jabami? ¡Por nada del mundo te dejaría ponerme una mano encima! -respondió la ojiazul con un tono de voz alto y con desagrado.
-¡Vamos, Sayaka! Déjame ayudarte..., déjame consolarte por ese terrible dolor que te cause al tirarte accidentalmente al suelo -Yumeko se acercó hasta Sayaka y la jaló fuertemente de la cintura, pengándola a su contorneado cuerpo.
-¡¿QUÉ TE PASA, JABAMI?! -gritó la secretaria de Kirari Momobami, aventando a la joven contraria para que la soltara, pero ésta no se soltó de su agarre y volvió a jalar a la joven peliazul.
-¿Quieres que te sobe el trasero, Sayaka? -la joven morena rozó con deseo su mano por el trasero de Sayaka y lo apretó con fuerza, mientras ésta se esforzaba por quitársela de encima.
-¡Suéltame, estúpida! -Sayaka logró aventar más fuerte a Yumeko, ésta se rió irónicamente y de nuevo intentó jalar a la joven ojiazul, pero esta vez no lo logró.
-¡¿Qué sucede aquí?! -una voz seria y firme se hizo presente, y tanto Sayaka como Yumeko desviaron sus miradas para ver de quién se trataba. -¡¿Qué está pasando?! -cuestionó Kirari Momobami con su típica expresión de seriedad y tranquilidad en su rostro.
La cara de su joven secretaria estaba en shock, no podía procesar las palabras ni mucho menos lo que estaba pasando; en cambio, la apostadora compulsiva, tenía una sonrisa pícara en su rostro.
P.O.V Kirari
-Llevo esperándote en mi oficina más de cinco minutos, Sayaka Igarashi..., pero veo que prefieres perder el tiempo aquí, con la señorita Jabami -pronuncié con mi acostumbrada seriedad para que mis celos no se notaran, pero lo cierto es que me estaba muriendo de los celos por dentro.
-¡Pr-Pre! -al parecer, Sayaka no podía pronunciar las palabras, estaba abrumada. -¡Kirari! No es lo que parece, ¡déjame explicarte! -su rostro estaba colorado y unas gotas de sudor comenzaban a asomarse por su frente.
-No quiero tus explicaciones, Sayaka. Quiero que hable Yumeko Jabami..., -mi ojiazul me interrumpió.
-Pero, Presidenta, ¡puedo explicarle! -insistió Sayaka.
-<Sayaka> -pronuncié su nombre y le lancé una mirada fría y de seriedad, para que dejara hablar a la tal Jabami.
Me gustaba apostar con Yumeko, pero eso no quiere decir que le voy a permitir que toque a MI NOVIA.
ŞİMDİ OKUDUĞUN
Kɪʀᴀsᴀʏᴀ | Oɴᴇ Sʜᴏᴛs
Hayran Kurgu❝─Pr-Presidenta... ─la joven peliazul sintió desvanecerse cuando la Presidente Kirari Momobami introdujo su lengua en el oído de ésta. ─Me gustas, Sayaka Igarashi... ─pronunció en el oído de su secretaria mientras le brindaba otra lengüetada.❞ ˖˖˖˖˖...