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Las horas habían transcurrido sin tanta prisa desde que TaeHyung y JungKook habían llegado al departamento del menor de ambos.

JungKook ya había ordenado hacía algún par de horas comida japonesa, y tanto él como TaeHyung ya habían terminado de comer mientras charlaban entre ellos.

Ahora las seis de la tarde marcaban, JungKook por suerte y con ayuda de TaeHyung habían logrado terminar sus tareas en tiempo record, y ahora ambos jóvenes se encontraban sentados en la cama que usualmente Jimin y JungKook compartían riendo exageradamente sobre algún relato contando por el menor mientras bebían algunas botellas de cerveza y escuchaban un poco de música rap colocada por JungKook.

—El idiota de mi novio había creído que se encontraba aún sentado a mi lado, y le había parecido buena idea ponerse un poco... ya sabes, cariñoso—Explicó JungKook con una gran sonrisa en sus labios de burla por contener sus carcajadas siendo escuchado por el violinista que de misma manera sonreía, riendo un poco en ocasiones—, yo no lo había notado al principio, pero luego solo escuché a la chica comenzar a maldecirlo antes de empujar a Jimin...

— ¡No! —Exclamó TaeHyung alzando ambas cejas mientras miraba a JungKook reír asintiendo — ¿Cómo pudo confundirte con una chica?

—La sala ni siquiera estaba tan oscura—Rió un poco más escandaloso el menor—, incluso el novio de la chica lo había visto al llegar.

— ¡Oh joder!—Volvió a reír TaeHyung, prediciendo ya los próximos sucesos que ocurrirían en el relato de JungKook mientras que este solo trataba de contener su risa.

—Solo recuerdo al chico reventándole las bolas a Jimin, y...—Sin poder sostenerlo más, la carcajada que escupió JungKook resonó, manteniéndose así por algunos segundos en la compañía próxima de TaeHyung— ¡Mierda, quiero sentirme mal por reírme... pero fue tan estúpido!

TaeHyung y JungKook pronto estallaron en escandalosas carcajadas sonoras, riendo como si nunca antes lo hubiesen hecho de esa manera por simples estupideces. Tal vez se trataba de los efectos del alcohol, pues tanto TaeHyung como JungKook ya iban para la cuarta botella, pero la sensación de sentirse tan alegres y risueños se sentía tan bien, era bastante curativo.

Y desde luego que ambos lo disfrutaban. Ambos podían estar seguros de que jamás se habían sentido tan bien mientras bebían cervezas como adolescentes, estando ampliamente cómodos con el otro de una manera fabulosa.

TaeHyung lo apreciaba bastante, sin darse cuenta de lo significativo que se volvía el momento para él, algo tan simple como estallar en carcajadas por cualquier cosa, sonreír y sentirse realmente tranquilo al mismo tiempo en que miraba la misma amplia y encantadora sonrisa de JungKook, su aguda y escandalosa risa llenando su audio.

Se sentía tan ligero. Y era tocar como el mismísimo cielo.

—Bien , tu turno—Dijo por fin el castaño al sentirse seguro de que ya no reiría más, dando un trago a su cerveza mientras miraba al mayor carraspear un poco tras terminar igualmente de reír y dar un trago a su botella— ¿Qué hay de los alters? ¿Han hecho cosas... no sé, cómicas o estúpidas... o ambas?

—Cuando no, sería la mejor pregunta—Aclaró TaeHyung sonriendo, sus mejillas dolían, pero simplemente no podía dejar de sonreír—. A veces es embarazoso, porque de algún modo termino cargando con las consecuencias a sus cosas... pero verlos tan apenados por lo que hacen, es tan gracioso.

— ¿Quién de todos es el más ocurrente?—Preguntó JungKook sonriendo constantemente al igual que el mayor.

—Definitivamente Travis—Dijo el azabache—, y aunque cueste creerlo, Taegan también parece querer quitarle el puesto a Travis al más idiota.

toska ━ taeggukDonde viven las historias. Descúbrelo ahora