Sunbae [BTS Fanfic] ✓

🎶20🎶

“Sentimientos”

—¡Jiminie! —gritó Taehyung entrando en la habitación de su soulmate.

—¿Qué pasó? —preguntó Jimin.

—Creo que lo arruiné todo.

Tae hizó puchero y se sentó en su cama.

—¿Y qué hay de nuevo en eso? —cuestionó Jimin viéndolo desde la silla de su escritorio, donde se hallaba sentado.

Rió de su propio chiste.

—Es en serio, Park Jimin —le dijo Taehyung con seriedad— Hye, ya no me quiere. Dijo que se daba por vencida.

—¿No seguirá haciendo cosas para tratar de conquistarte?.

Tae negó a su pregunta.

—¿Y eso te molesta?.

—Sí, muchísimo —aceptó Taehyung mirando sus manos.

—¿Por qué te molesta? —volvió a preguntar Jimin, intentando hacerlo llegar a una conclusión en específico.

Taehyung lo pensó largo rato.

—No sé —terminó por decir.

Jimin soltó una exclamación de desgano.

—Ah, es que tú también, hombre. Piénsalo bién, con el corazón —le insistió.

El más joven por sólo algunos meses volvió a hacer esfuerzo, incluso puso cara de concentración profunda.

—¡Te gusta Kim Hye! —soltó Jimin impaciente.

Taehyung se acaloró de repente, avergonzado.

—¿Y qué hago? —preguntó nervioso.

—Ve a hablar con ella —le indicó Jimin.

Taehyung asintió. Se levantó de su sitio y salió corriendo. Jimin se quedó mirando el lugar por donde se había ido su mejor amigo. Soltó unas carcajadas poco después.

—Que buen Cupido soy —se autofelicitó, luego soltó un suspiro—. Debería empezar a aplicar mis consejos a mí mismo.

Varias personas pensarían que el encantador Park Jimin de BTS, sería muy coqueto en cuanto a mujeres. Sin embargo Jié le interesaba de una forma muy distinta a otras chicas.

El sentimiento a penas comenzaba a desarrollarse pero ya era tan potente que Jimin no podía evitar sentir miedo.

—No, Park Jimin. No seas cobarde —se habló a sí mismo—. Tú puedes. ¡Ánimo!.

Eso era. Él podía enfrentar el problema. Eso si el problema no lo hubiera tomado por sorpresa. Estaba tan ensimismado hablando consigo mismo que no notó la presencia de la peliazul

—¡Jimin-ssi! —gritó Jié para que le hiciera caso.

Park dió un salto del susto. Se llevó una mano al corazón que casi se le salía del pecho, no sólo por el susto.