ʏɛʟʟօա - Draco Malfoy | traducción |

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 33- ᴄᴏɴꜰɪᴀɴᴢᴀ

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-Y me gustaría que me
amaras, me amaras, me amaras –

-The Wisp Sings - Winter Aid

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—DÉ A CADA HOMBRE SU OÍDO PERO POCOS SU VOZ— leyó Ophelia en voz alta de su copia de Hamlet. Ella soltó un suspiro. —Esa es una de mis citas favoritas de esta parte— Dijo hablando con Draco, que estaba tirado en el suelo con la cabeza apoyada en su regazo.

—¿Por qué?—Su voz se quebró mientras la miraba fijamente, el libro bloqueaba su rostro.

Movió el libro para poder mirarlo.

—Realmente no lo sé— se encogió de hombros.—Siento que significa asegurarse de que estás escuchando todo lo que dicen— frunció el ceño.
—Pero para no hablar mucho de ti misma—se mordió el labio.—Porque es importante ser un buen oyente, pero a veces está bien guardarte las cosas para ti— se subió las gafas. —No estoy segura de si eso tiene sentido—ella se rió ligeramente.

Draco se llevó la mano a las cejas para tapar el sol de sus ojos.—Me gusta tu forma de pensar— murmuró.

Se mordió la mejilla, tratando de contener su sonrisa. Cerró el libro y lo colocó en el suelo junto a ellos. Apoyó la cabeza en el tronco del árbol contra el que estaba presionada la espalda. Entrelazó los dedos en los mechones rubios de Draco.
Ella tarareó suavemente Heart Of Glass en voz baja mientras jugaba con su cabello. Malfoy cerró suavemente los ojos y un suave suspiro escapó de sus labios.
Se sintió relajado. Su mente estaba en el presente y no pensaba en la horrible tarea que el Señor Oscuro lo estaba obligando a hacer.

—Necesito enseñarte a patinar—pensó en voz alta.

—¿Por qué harías eso?—perezosamente abrió los ojos.

—Porque sería divertido— sonrió.—Si alguna vez vienes a mi casa, puedo enseñarte mi patineta— se rió entre dientes. —Aunque creo que necesito una nueva porque la mía está llena de arañazos y golpes— dijo. —La he tenido desde que tenía 10 años.

—No tengo energía para aprender una actividad muggle tan infantil— Le dijo con una sonrisa de satisfacción.

—Tu n'es pas marrant— hizo un puchero. —No me gusta cuando hablas mal de los muggles.

—Lo que sea—pronunció mientras suspiraba. —¿Tienes frío?— preguntó mientras notaba la piel de gallina impresa en sus brazos y piernas desnudas.
Las mangas de su camisa blanca abotonada estaban perezosamente subidas hasta sus antebrazos, mientras que tenía puesta la falda del uniforme, que tampoco le daba mucho calor.

—Un poco— Ella se mordió el labio. Parecía que el aire que alguna vez fue cálido en el otoño de octubre se había vuelto amargo y frío más recientemente.
Draco se sentó después de estar acostado y se quitó la bata del uniforme.

—Oh, no tienes que hacer eso—dijo mientras se lo entregaba.

Él negó con la cabeza.—Deberías haber traído tu capa aquí— ignoró su comentario.—Adelante, tómala— dijo con una sonrisa. _No quiero que te resfríes.

Suspiró, lo tomó y se envolvió en él. Había olvidado su capa de hufflepuff en su dormitorio cuando fue a buscar a Hamlet a su habitación después de clases.
—Bueno, ahora vas a tener frío— dijo mientras se daba cuenta de que él era solo su camisa blanca de manga larga con botones con su corbata Slytherin y pantalones de vestir negros.