Amor...¿Qué es eso?[Draco Malfoy & Tu]

Me amas?

La luz chocando contra mi ventana me despertó, me tallé los ojos mientras bostezaba y me senté en mi cama, no tenía ganas de hacer nada, la mañana siguiente terminarían las vacaciones de invierno así que todos los demás chicos vendrían y solo quería descansar un ultimo día, aun debía contarles todo lo que había pasado en esas vacaciones.

Me vestí y baje al gran comedor donde habían algunos Hufflepuffs desayunando, en la distancia vi al rubio, tenía un gran plato de hot cakes frente a el, pensé si debía ir a a sentarme con el cuando me di cuenta que lo estaba mirando fijamente y el se había dado cuenta, no se le veía muy alegre así que decidí simplemente sentarme junto a los amarillos, ellos no tardaron en incluirme en su platica, son muy simpáticos.

Al terminar me levante de la mesa y me dirigí hacia Hogsmade, aun había un poco de nieve, pase un poco por las tiendas hasta que entré a Honeydukes y compré una rana de chocolate para luego ir a las tres escobas a pensar un poco, ordené una cerveza de mantequilla y me acomodé en mi asiento. Estaba abrumada, los pensamientos acerca de toda mi estadía hasta ahora golpeaban mi conciencia como molestas piedras. 

Ni siquiera agradecí la bebida cuando comencé a beberla, como si fuera algún tipo de alcohol muggle que me ayudara a olvidar a Malfoy. Dejé el vaso casi con agresividad sobre la barra y pagué, saliendo del lugar mas frustrada que antes. 

Abrí la envoltura de la rana de chocolate y la comí, concentrándome en el chocolate mas que en mi alrededor, solo hasta que pasé por lugares conocidos, mas conocidos por los recuerdos, y si, lamentablemente el mas recurrente era el beso. Apuré el paso de vuelta a Hogwarts, tratando de no cruzar miradas con la gente. 

Sabía el lugar donde seguramente no encontraría a nadie. La biblioteca. Era un plan perfecto. Sonreí orgullosa de mi misma y corrí hasta el sitio, buscando la mesa mas alejada y poniéndome a leer cualquier cosa que encontré. 

Por un efímero momento sentí verdadera paz en mi misma, cosa que no duró, pues una bella lechuza, que reconocí como la de Malfoy, entró y me dejó una carta pulcramente cerrada con un lazo. Sostuve la respiración mientras retiraba el lazo y abría la carta. 

"T/N:

Se que estas ciertamente confundida o enojada conmigo, por lo que me encantaría hablar en la sala común de Slytherin en 1 hora para arreglar todo lo que nos moleste. 

Hasta luego, 

D. M."

Suspiré, pues no estaba esperando esa invitación en ningún momento, pero aún así iría, aunque me costara admitirlo, todo ese día extrañe a Draco. 

Fui hasta mi dormitorio para arreglar mi cabello y ropas, solo por si acaso. En el espejo pude preguntarme a mi misma si realmente quería que ese lindo rubio de ojos plateados se metiera en mi vida de tal manera, aún cuando al día siguiente su novia se encontraría ahí. Al final decidí que valía la pena. 

Sonreí y salí hacia el lugar acordado, después de decir la contraseña y adentrarme dentro de la sala común pude divisar a Draco, sentado, mirando hacia una ventana donde pequeños animales acuáticos nadaban como si nada mas importara. 

--Hey Malfoy. --Saludé, notando como su mirada se iluminaba al verle, cosa que me revolvió el estómago con mariposas. 

--Hey T/n, es bueno verte... --Habló un poco nervioso, le sonreí mas para darle seguridad y me acerqué a el. 

--Entonces, ¿Querías hablar?

--Necesitamos hablar... --Asentí mirando al suelo. --T/N, yo no quiero presionarte, se todo lo que hemos pasado, pero necesito una respuesta. --Tomó mis manos cuidadosamente, subí mi mirada y la clave en sus orbes grises. --¿Me amas? --Habló claramente, tanto que me quede sin saber que responder por segundos y  no lo hice, ninguna palabra abandono mis labios.

En vez de eso lo sostuve del frente de su camisa y lo acerque a mi, estampando nuestros labios en un beso que esperaba que pudiera expresar los sentimientos confusos, y hablar incluso mas que mis propios balbuceos. 

--Creo que con eso ya tienes una respuesta clara, Malfoy. --Le sonreí y el me devolvió aquel gesto. Unas expresiones cómplices que tal vez solo nosotros dos entenderíamos. 

Nos sentamos en el sillón frente a la fogata y charlamos hasta la hora de la cena,--Tengo un poco de hambre, deberíamos ir a cenar-- asentí y salimos de la sala común, mientras caminaba sentí el leve toque de su mano con la mía, me detuve y entrelacé nuestros dedos, en ese momento sentí mariposas en mi estomago pero esta vez estaba feliz por eso, al abrir la puerta del gran comedor y entrar, los pocos estudiantes ahí comenzaron a murmurar al vernos tomados de la mano pero a nosotros no nos importo y nos sentamos en una mesa.

Podría decir que esa fue una de las mejores noches de mi vida, reír toda la cena y solo concentrarme en aquel chico rubio olvidando a toda la gente que nos rodeaba era la mejor sensación que podía experimentar, al fin el ultimo día de vacaciones, me emocionaba bastante volver a ver a mis amigos, pero me aterraba que podrían pensar de lo mío con Draco.

Igual, eran mis amigos, debían apoyarme, aunque no podría decir lo mismo de los amigos de Malfoy... ya me estaba desviando del tema, lo importante era el en ese momento, el y nuestros ya no tan confusos sentimientos. 

--Niña, deberíamos ir a dormir. --Asentí a su sugerencia y me levanté. 

--Claro, nos vemos mañana Draco. --Sonreí y me voltee dispuesta a irme, solo hasta que el me tomo del brazo impidiendo que caminara más.

-- ¿A donde vas?--

--A mi dormitorio tontito, ¿a donde más?--

--Dije deberíamos en plural, tu y yo, en Slytherin...-- 

-- Uhm.. tal vez vaya-- dije caminando hacia atrás de forma no notoria-- Solo si me atrapas.-- Al terminar de decir esto hui de forma juguetona.

Alcance a escuchar al rubio  decir--Con que así quieres jugar eh-- corrimos por todo el castillo, ambos reíamos y seguramente hicimos el bullicio del año en los pasillos. 

Corrí hasta que mis pies se cansaron, voltee hacia atrás y cuando no vi a Malfoy pensé que lo había perdido, pero de repente me elevaron, cargándome. 

--¡Draco! --Reí tratando de separarme, pero el hizo mas fuerte su agarre. 

--No te dejare, vamos a los dormitorios, me deje llevar ya que estaba muy cansada, al llegar me dejó en la cama y se sentó al lado mío.

--Mierda--

--¿Qué pasó Gryffindor?--

--Olvide traer ropa para dormir ya vuelvo--

--Estas muy equivocada si crees que te voy a dejar ir-- dijo mientras le lanzaba un hechizo a la puerta que no permitía que fuera abierta.

--Ten--  me ofreció su sudadera.

--¿El mismísimo Draco Malfoy me esta prestando su sudadera?--reí burlonamente 

--¿La tomaras o no?--

--Claro que si Mr. Malfoy-- dicho esto me la puse con alguno de sus shorts deportivos, aun olía a el.

Me recosté en la cama, tras unos minutos mis ojos se comenzaron a cerrar pero no estaba del todo dormida, el rubio comenzó a quitarse la camisa, algo dentro me decía que no debía verlo pero aun así no me moví, la prenda cayó al piso dejando su marcada espalda a la vista, al ver esto un jadeo salió de mi boca pero intente cubrirlo con mi mano.

--Ya se que estas despierta niña así que deja de intentar cubrir lo que te hago sentir-- el rubio volteó y me dedico una de sus coquetas sonrisas, apago la luz y se acostó conmigo mientras me abrazaba.

*** 

Hola estrellitaas! espero que les guste este capitulo, pongan que opinan en los comentarios los tqm 

-Alex x