|Estoy aquí|

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Sukuna

Nanamin, Megumi, Ieiri, Kugisaki y yo llevábamos un mes buscando a Narumi sin éxito alguno. Estaba cansado, mi salud mental estaba al límite, me estaba volviendo completamente loco. Mis ojeras estaban realmente marcadas, había pasado noches enteras llorando y en este tiempo no había descansado nada. Si dormía, tenía pesadillas, en las cuales ella simplemente moría ante mis ojos o cuando la encontraba... Ya era muy tarde.

Salí a dar una vuelta por Japón, simplemente para despejarme. Eran las 4 de la mañana y las calles estaban vacías, me dirigí hacia el puente y me senté en la barandilla de este mirando la enorme caída que había desde ahí

. - Ey, tranquilo, la encontraremos - escuché a alguien detrás de mí

- Tú también tienes insomnio viejo?- Reí amargamente.

Nanamin se sentó a mi lado en la barandilla. Saco un cigarro y comenzó a fumar.

- Que padre podría dormir con su hija secuestrada y ni siquiera saber su estado físico y mental?- le miré con asombro, ¿Padre?

- No pongas esa cara, no soy su verdadero padre, pero hago el papel de uno desde que el suyo no está- le dio una pequeña calada a su cigarro para luego soltar el humo en un suspiro.

- ¿Qué pasó con sus padres? Si se puede saber, claro- Narumi no me había dicho nada sobre ellos y necesitaba saberlo.

- Es complicado, la verdad, nadie sabe con exactitud lo que ocurrió, solo Narumi- Mi boca formó una ''o'' perfecta.

- Narumi se fue una tarde con sus padres a la montaña, todo parecía normal hasta que Ijichi el que estaba a cargo del hermano de Narumi esa misma tarde, nos llamó para decirnos que ellos deberían haber vuelto hace 2 horas y no daban señales de vida.- Los ojos de Nanamin se cristalizaron.

- No me digas que...- tragué saliva.

- Cuando llegamos Gojo, Ieiri, Ijichi y yo a la zona nos encontramos con todo lleno de sangre, tanto el césped incluso hasta los árboles- Nanamin apagó su cigarro, y me miró triste.

- Efectivamente los habían asesinado, el padre de Narumi había sido... Destrozado.- Unas lágrimas cayeron por sus mejillas y carraspeó para poder continuar.

- La madre de Narumi tenía todo el cuerpo agujereado, Narumi estaba frente a ella sorprendentemente, intacta.- nada tenía sentido ¿quién haría algo así?

- Cuando nos acercamos a Narumi, ella tenía unas marcas, las marcas que aparecieron en ella hace un par de días.- Empezaba a comprender toda la preocupación de ellos al ver las marcas.

- Esas marcas desaparecieron después de un par de días. Narumi después del accidente de sus padres estaba siempre... Ausente. Toda su alegría se fué, solo volvía a ser la de antes con su mejor amigo, Satoru Gojo.- Escuchar eso causó que me sintiera culpable, si yo no hubiera aparecido en la vida de Narumi, ellos todavía serían amigos.

- Tranquilo, me encargué de que ellos volvieran a hablarse, aunque creo que Narumi no le perdonará nunca lo que os hizo Gojo- Agaché mi cabeza para mirar el río que había bajo el puente, me sentía tan culpable, había destrozado una amistad.

- No te sientas culpable, Narumi tiene el derecho de dormir con el que quiera, Gojo no es nadie para impedírselo- me ofreció un cigarro, lo encendí y empece a fumar. Lo siento mocoso, compartimos pulmones.

- ¿Quieres saber más?- asentí.

- Después de un tiempo de la muerte de los padres de Narumi, me llevé a Gojo y a ella a una misión. En ese momento tanto Gojo como Narumi eran menos experimentados y desgraciadamente , en la zona había un categoría especial. Este modificó el área alejándome de ellos, y dejándolos solos con el categoría especial.- mi piel se erizó al escuchar aquello.

Imposible |Ryomen Sukuna × (T/N)|Where stories live. Discover now