❝ 8 ¡!

785 145 46
                                    

maratón
(1/5)

Ya había pasado aproximadamente una semana desde que la primera nota por parte de su admirador secreto llegó a alegrar sus días, una semana donde cada mañana recibía lindos mensajitos motivándolo o halagándolo, por cosas tan pequeñas como, su voz,...

Йой! Нажаль, це зображення не відповідає нашим правилам. Щоб продовжити публікацію, будь ласка, видаліть його або завантажте інше.

Ya había pasado aproximadamente una semana desde que la primera nota por parte de su admirador secreto llegó a alegrar sus días, una semana donde cada mañana recibía lindos mensajitos motivándolo o halagándolo, por cosas tan pequeñas como, su voz, ojos e incluso su baile, y es que, pues como "C" le había contado en la ultima nota, uno de sus mejores amigos era parte del mismo club en él que estaba y le había mostrado el video donde junto a sus compañeros practicaban una coreografía que recientemente crearon.

Eso en cierta parte lo emocionaba, pues alguien cercano conocía al dueño de tan lindas palabras y sabía que podía de cierta forma, confiar en él. Además, su curiosidad por saber de quien se trataba era obvia, solo que respetaba la decisión del chico y no pensaba buscarlo.

Hasta el momento sólo sabia tres cosas sobre el responsable de las cartas: era un chico, tenían amistades en común y que era demasiado, pero demasiado tierno y atento.

Sinceramente cada nota que recibía, era una nota que tenia ganas de responder, moría por poder establecer una conversación con su admirador, quería conocerlo, aun si tan solo era por escrito. El problema era que justamente no tenia ningún indicio de quien era el "mensajero" de todo, y no existía un lugar seguro donde dejar sus papelitos para que "C" los encontrara.

Recordar eso siempre le causaba un puchero, aquel que ahora mismo llevaba en su rostro mientras caminaba hacia la escuela.

No le había contado nada a ninguno de sus amigos, entonces no era una opción pedirles ayuda, y en verdad le frustraba el no poder ni siquiera darle las gracias al causante de sus sonrisas sinceras y noches tranquilas.

Y es que, sí, desde la 4ta nota comenzó a creer que todo era real, sincero y que no se trataba de una broma cruel. Ahora confiaba en que en verdad era así ante los ojos de alguien más, siendo algo que lo alegro tanto al punto de llorar de la emoción, por sentirse querido de cierta forma, por sentirse incluso lindo para un chico tan dulce como lo era el contrario.

El puchero que antes se encontraba decorando sus labios ahora había sido reemplazado por una tímida sonrisa, antes de negar con su cabeza para despejarse y apurar sus pasos con el propósito de llegar a la escuela a tiempo.

Todo aquello ocurrió sin darse cuenta de que un pálido pelinegro lo observaba disimuladamente desde la vereda de el frente, con una expresión preocupada al inicio, pero con la misma sonrisa al observar su cambio de humor.

El día de hoy Bang Chan tenía una sorpresa para el menor, pues se había enterado por parte de Seungmin que el pecoso, cada vez que terminaba de leer las palabras en la notita, escribía algo a la orilla de cualquier hoja del cuaderno, para al final recortarla y adjuntarla al post it.

Gracias a la inteligencia de Jeongin y Sana, habían llegado a la conclusión, de que cada papelito adjunto se trataba de la respuesta de Lee, emocionando demasiado al mayor, ya que ahora podría cumplir con lo que le había aconsejado Sua.

❝ Dear boy of the stars ¡! ChanlixWhere stories live. Discover now