CAPITULO 17

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- ¿No estoy interfiriendo con tu rutina?

Preguntó Haechan mientras aún conversaban en el sofá.

- No, si es por lo que te dije que siempre hago está bien, no importa.

Haechan frunció los labios.

- Pero dijiste que lavas la ropa ¿No es así? Puedo ayudarte.

Mark hizo una mueca y negó.

- Está bien, lo haré después.

Haechan suspiró.

- ¿Cuando Mark? Si apenas y puedes respirar, vamos a lavarla.

Su "novio" sonrió divertido.

- No tengo lavadora, ¿aún así vas a ayudarme?

Bueno, jamás la había lavado así pero suponía que no era muy difícil.

- ¿Cómo la lavas? He visto que bailan sobre ella o con esas tablitas las tallan.

Mark rió, se sintió un poco tonto pero a la vez feliz, después apretó sus mejillas y le dió un pequeño beso en los labios.

- No dejaré que toques la ropa sucia - respondió aún divertido - Pero podemos "bailar sobre ella".

Haechan asintió divertido.

- ¿Te estás burlando de mí Lee?

Mark alzó sus cejas y lo miró coqueto.

- Para nada mi radiante sol.

Se sintió idiota por no poder enojarse más de dos segundos y sonrió, compartieron un último beso y se levantaron.

Mark preparó una tina que tenía junto con la ropa, la llenó de agua y puso jabón también en ella, se quitó los calcetines y él lo imitó, después entró a la tina.

- Está muy fría, ¿Seguro que quieres hacerlo?

Haechan le sonrió.

- Será divertido.

Entró y Mark si que tenía razón, pero poco a poco se fue acostumbrando.

Ambos estaban muy cerca del otro y tuvo que sostenerse de sus brazos para no caer, estaban muy cerca del otro también y resultaba divertido.

¿Quién diría que lavar ropa sería divertido?

Después de muchas risas y un agradable momento al fin terminaron, quitaron el jabón y después la exprimieron para colgarla en ese soporte que Haechan no sabía su nombre.

Se sentía satisfecho, cuando le presumió a Jeno que sabía hacer muchas cosas se refería a usar la lavadora y lavaplatos, pero ahora al fin había aprendido a hacer algo sin tecnología.

- Gracias por tu ayuda - dijo Mark cuando se sentó a su lado.

- Fue divertido, tal vez venga casa semana a lavar tu ropa, ahora que lo pienso, el día de nuestras citas ¿Cómo lo hacías?

- Me levantaba temprano.

Ah, sí.

Sonrió sintiendose un poco idiota, pero Mark simplemente lo miró con ternura.

- Mark - llamó queriendo cambiar el tema - ¿Puedo ver tu habitación?

Su "novio" lo miró inseguro.

- ¿Mi habitación?

Haechan asintió.

- Sí, ¿No quieres? ¿Tienes escondido a alguien ahí?

Love of the Million - MarkhyuckWhere stories live. Discover now