Capítulo 8.

2.1K 48 3
                                    

Narra Alessandra :

El primer día en Tailandia, fue increíble hicimos muchísimas actividades y el día de hoy va a ser muy parecido aunque solo se eso porque Marcos no me ha querido contar mucho más, según el mi reacción va a ser muy buena. Y yo pues si no me dice nada no se ni como vestirme : no se si ponerme unos vaqueros cortos o un vestido así anchito sueltito tipo playa vamos.

- ¡ MARCOSSS PUEDES VENIR POR FAVOR RÁPIDOOO ! - grito y es que aunque estemos en la misma casita los dos, este hombre se entera de lo que quiere.

- ¿ Pero que pasa? ¿ No estarás mala no? - pregunta preocupado y acalorado, normal habrá subido muy rápido.

- No no nada de eso, solo era que no se que ropa ponerme o a donde vamos para elegir esa ropa.

- Ay Alessandra ya me lo podrías haber dicho antes. - dice con una mano en la frente. - Donde vamos no te lo voy a decir, pero si me dejas puedo elegirte la ropa - contesta poniendo cara de travieso

- No se yo eh - digo y se ríe. - Anda vale, pero yo también quiero elegir la tuya un día.

- Pues esta noche la eliges.

No se que ropa me va a coger Marcos, mal gusto no es que tenga pero tampoco para tirar cohetes. La verdad a ser sincera me ha sorprendido mucho con la ropa que ha escogido : para la parte de arriba ha escogido un top blanco y para la parte de abajo unos pantalones vaqueros cortos, todo esto junto a unas deportivas negras y un bolso negro también.

- La ropa interior también te la puedo elegir eh - dice pícaro.

- Si claro, anda y tira a esperarme en el salón que ya voy. - digo empujandole para que salga y no me vea roja.

- ¿ No me digas que la niña se ha puesto nerviosa? - pregunta y no contesto. - Ay pero que se ha puesto nerviosa la nena.

- Tira ya Marcos que me estas hartando . - digo y se ríe a carcajadas.

Cuando Marcos sale de la habitación, me cambio y me peino el pelo, lo dejo suelto porque me da pereza hacerme ahora algo en el pelo.

- Por fin has acabado, dios gracias - dice mirando al techo.

- Si claro, habrá que saber qué le pides tu a dios.

- Mejor que no lo sepas - contesta dejándome sin habla, por mi cabeza han pasado muchas cosas - Anda vamos antes de que empiece a hacerse tarde.

Vamos al coche que Marcos ha alquilado para estar estos días y no puedo ver nada. Por que aquí el señorito se ha empeñado en ponerme una venda en los ojos. El trayecto se me hace corto, el coche se apaga y yo intento quitarme la venda pero Marcos no me deja.
Escucho la puerta del coche abrirse y después se abre mi puerta, marcos me coje de las manos.

- necesito que confíes en mi.

¿ De verdad confío en el? La última vez que confíe en un chico, fue el peor momento de mi vida.

Flashback :

Estoy en el suelo llorando abrazada a mi misma, más bien a mi cuerpo, a mis heridas tanto físicamente como mentalmente. No puedo moverme, se ha pasado mucho. Veo como pasa de nuevo por el pasillo y yo ya no puedo ni abrazarme más fuerte, ya no tengo fuerzas no doy para más.

- Seguro que no puedes moverte. - dice y yo no digo nada, sigo con mi cabeza entre mis piernas. - pues yo tengo que irme con mi club así que tira a la ducha. Me coje en brazos y me lleva hasta el baño de su casa. Al ver que va enserio lo de meterme en la ducha, como puedo me deszazgo de su agarre.

Menos mal Where stories live. Discover now