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Wooyoung abrochó su cinturón de seguridad una vez que se acomodó en el asiento del acompañante de copiloto

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Wooyoung abrochó su cinturón de seguridad una vez que se acomodó en el asiento del acompañante de copiloto.        

—Vayamos a desayunar.—invita San con sus manos en el volante, mirando a los alrededores de la estación.

Wooyoung puso una mueca, no le convencía mucho la idea de tener que pasar un rato con San. De todas formas asintió, para no quedar mal.

—¿Me invitas sabiendo que no me agrada desayunar?.—ladea su cabeza como un perrito confundido, causándole ternura a San.

—Sabes que me gusta verte comer, no me agrada saber que te saltas las comidas.—lo mira a los ojos enarcando una de sus cejas.

Wooyoung hizo un pequeño pucherito de labios, mirando hacia la ventanilla del auto. Se siente débil por tener que aceptar las invitaciones de San solo con simples palabras. Definitivamente es débil.

El menor se propuso y prometió que no volvería a caer antes los encantos de San, lo juró. Claramente eso no es caer a los encantos de San, solo aceptó una invitación, solo es eso... ¿verdad?.

San está superado, esa parte de su vida esta superada y convivir con él no será un problema, aceptar ese tipo de invitaciones tal vez era la costumbre de tantos años, pero no va a pasar nada mas que una conversación laboral. Eso piensa cada que ve como pasan los arboles a medida que el mayor tomaba camino hacia una cafetería.

Asustado por las cosas que pueden pasar si sigue acercándose más al mayor. Miedo, siente mucho miedo y el miedo no es un sentimiento que sienta seguido el menor, sino que aquello le pasaba cada vez que estaba cerca de aquel policía.

Dejó de pensar en todo cuando San frenó de golpe por culpa de alguien que pasó en rojo cuando en realidad le tocaba a ellos pasar. Wooyoung solo oye gritar a San, escuchando un zumbido en sus oído mientras su mirada está clavada en el perfil del mayor.

—Precioso.—suspiró.

                                            […]

Están en una cafetería a unas cuadras de la jefatura de San, aquel lugar le traía viejos recuerdos a ambos, los cuales se estaban reproduciendo en sus cabezas en aquel momento.

Cuando eran una pareja, wooyoung solía visitar a san al trabajo, el mayor siempre se tomaba un tiempo para poder ir con su pareja a esa cafetería, era una rutina que al parecer inconcientemente san le mostró a wooyoung que esa rutina no la había superado del todo.

Y puede que el menor inconsciente de la situación haya pedido lo de siempre, con esas simples palabras al mismo mesero que los atendía cuando solían ir juntos.

Carraspeando su garganta incómodo por la situación al darse cuenta. Aunque tampoco entiende porque su cuerpo estaba actuando así, se supone que está más que superado el pasado, su mente y corazón le estaba jugando una mala pasada.

Bad romance • sanwooWhere stories live. Discover now