terror of surrender | l.s | traducción

Parte XII.

Para el sábado, se está volviendo a acostar con Harry, incapaz de resistir la tentación.

Louis enreda sus dedos con los de Harry, sus hombros rozándose con su piel aún pegajosa por el sudor. Harry suspira felizmente, rodando sobre su costado y acariciando con sus dedos el cabello de Louis. "Eres tan hermoso. Soy tan afortunado."

Louis sonríe tímidamente. "Gracias, H."

Los ojos de Harry buscan los de Louis, las ruedas motoras de su cabeza empiezan a girar. Louis arrastra su mano por el firme pecho de Harry, susurrando suavemente, "¿En qué piensas?"

"No puedo esperar a casarme contigo."

Louis suspira, cerrando sus ojos. Siente como los hombros de Harry se tensan, sus dedos se detienen en su cabello y caen en su brazo murmurando, "¿Qué tienes en mente ahora?"

"Harry, nosotros no nos vamos a casar." Louis abre sus ojos, rompiendo la burbuja en la que se encontraban.

Harry frunce su ceño. "¿Qué?"

"No nos vamos a casar. No te vas a casar conmigo."

"¿Por qué no?"

"Porque," Louis suspira, sentándose y enterrando su cara en sus manos, "así es como debe de ser. Estoy haciéndote perder el tiempo."

Harry resopla, "Oh por favor, Louis. Dime cómo es que estas haciéndome perder tiempo."

"Porque," Louis chilla, saliendo de la cama. "¡Porque tengo muchos problemas! Estoy dañado. Mi tiempo se ha terminado. ¡Soy—Soy un asaltacunas! Ya estuve casado, ya tuve las estúpidas peleas sobre hijos y no puedo hacer todo eso otra vez. ¡Honestamente no entiendo tu obsesión con eso, Harry! Y lo está arruinando, ¡te vas a aburrir de mí y encontrarás una persona de tu edad que pueda darte todo lo que tu necesites!"

"Wow, wow." Harry se sienta, arrodillándose en la cama. "Bebé, cálmate."

Louis toma unas cuantas respiraciones profundas. "Te mereces estar con alguien de tu edad, Harry. He desperdiciado tu tiempo y lo lamento mucho."

"Louis, ni siquiera eres viejo. ¡Tienes treinta y cuatro! ¡Tienes mucho tiempo, nosotros tenemos mucho tiempo!"

Louis siente las lágrimas correr por sus mejillas mientras comienza a vestirse rápidamente. "Harry, necesitamos terminar esto ahora. Será menos doloroso."

"¡No!" Harry entra en pánico, saliendo de cama y tratando de detener a Louis. Él tira de su ropa interior y corre a la puerta para ponerse delante de ella. "No, no puedes."

"Harry, por favor," Louis ruega, sollozando y tratando de quitarlo del camino. "Por favor, déjame ir. Necesito irme."

"Te amo," Harry solloza, lágrimas cayendo en sus mejillas. "Por favor no te vayas."

"Muévete, Harry." Louis niega con su cabeza, mordiendo sus labios para tratar de no soltar más sollozos. "Por favor. Esto se suponía ser algo casual, algo de sexo espectacular para curar la soledad por un par de semanas. Nunca debió de haber llegado tan lejos."

"Nunca fue algo casual para mí, Louis." Harry niega con su cabeza mientras más lágrimas caen a sus mejillas. "Te amo y lo supe desde el momento en que pusiste un pie dentro de mi clase, sabía que eras especial. Quería que fueras mío."

"Nunca fui tuyo, Harry. Nunca lo podré ser. Ahora por favor, muévete." Louis solloza, finalmente moviendo a Harry hacia un lado. Él corre por el pasillo para ponerse sus zapatos y tomar su abrigo. Saca la llave de repuesto de su bolsillo y la arroja sobre la mesa, saliendo por la puerta principal.

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"Louis, cariño, ¿en qué estabas pensando?" Kim pregunta, mirándolo incrédula. "Él es perfecto para ti."

Anna interviene, "Louis, él te ama."

Louis niega, mirando su copa de mimosa completa. "Ya lo sé, no necesitan recordármelo."

"No puedes permitirte hacerte esto, Louis. Tú realmente puedes tener un final feliz." Lisa le sonríe suavemente mientras aprieta una de sus manos.

"Ya no quiero hablar de eso." Louis resopla. "¿Podemos cambiar de tema?"

El silencio es doloroso mientras el único que sonido que hay es el de los cubiertos de las mesas que comen a su alrededor. Louis bebe su mimosa completamente, inclinándose hacia adelante para agarrar la jarra y servirse otra copa.

Louis escucha a las chicas suspirar, el estómago de Louis se hunde mientras piensa en lo horrible amigo que es.

"¡Oh por dios!" Kim chilla, haciendo a todos saltar. "¡Louis, olvidé decirte! ¡Vi a Tim el otro día!"

Louis mira a Kim con una ceja alzada. "¿Okey?"

"Louis. Él esta jodidamente calvo ahora." Ella ríe. "¡Y se ve horrendo!"

Louis jadea audiblemente, "¡Y también usa peluca!"

"Aparentemente se le cayó o algo así, ¡porque su cabeza era sumamente brillante cuando lo vi! El sol se reflejaba en ella, ¡casi me deja jodidamente ciega!"

Todas las chicas ríen a carcajadas y la conversación fluye, Lisa resopla por la nariz cuando Kim habla sobre montar a su esposo la otra noche solo para que él se terminara quedando dormido. Louis intenta sentirse mejor, reír y ser feliz con sus chicas; solo que su mente regresa a Harry cada minuto.