Final

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Joel tenía miedo.

Miedo de enamorarse, de caer loco por alguien y ser abandonado, saber lo que se siente que te rompan el corazón y te dejen a un lado cuando quieran.

Y temía que su futuro con Erick sea ese, alguien tan joven y lleno de solicitudes lo abandonara cuando encontrara a alguien de su edad.

Y por primera vez se siente feliz de haberse equivocado.

─¿Estás listo? ─pregunta Joel viendo a Erick.

─No lo sé, mamá estuvo feliz pero papá es otro asunto ─responde suspirando hondo.

─¿Quieres posponerlo?

─No, ya lo hice por mucho tiempo y sé que es hora pero sigo teniendo miedo.

─Hey, pase lo que pase estoy contigo ─asegura el mayor tomando sus mejillas entre sus manos─ si no lo acepta no puede hacer nada, terminaste la carrera, eres mayor de edad y trabajas, siempre te apoyaré.

Er asiente un poco más seguro y le sonríe para hacerle saber que está bien.

Joel pensaba que no durarían más de un mes y hace dos días acaba de pasar su segundo aniversario, por obvias razones han tenido que mantener su romance en secreto ya que si bien Erick ya tenía la mayoría de edad cuando comenzaron las reglas de la universidad son claras y no permiten las relaciones entre alumnos y personal docente.

El mayor quería hablar con Zabdiel de esto en cuanto pasaron su sexto mes juntos, hacerle saber que sus intenciones con Erick son buenas pero por petición de su novio no lo hizo.

Erick temía que su padre tomara represalias contra Joel y podrían echarlo de su trabajo por lo que decidió esperar a su graduación para contarle, de este modo es menos probable que pueda hacer algo al respecto.

Es raro como comenzaron pero el ojiverde no se arrepiente para nada de lo que ha hecho, disfruta de lo que han construido y se siente bien con Joel a su lado.

Y quiere que su padre sepa lo feliz que es.

Sus problemas se resolvieron con el pasar del tiempo, Zabdiel entendió que su hijo solo necesitó de asimilar su nueva vida y éste a la vez comprendió que el que sus padres se separen no quiere decir que todo deba cambiar.

Ambos merecen ser felices.

Aún con algo de nervios pero ganando seguridad con el toque de la mano de Joel sobre la suya toca el timbre de su casa y espera la respuesta de Zabdiel.

Pero pase lo que pase sabe que estará bien porque Joel le prometió hacerlo feliz, estar con él y que sería el último.

Y lo ha cumplido.

Así que le cree cuando dice que todo estará bien.

Su sonrisa se ensancha cuando ve a su padre abrir la puerta y está listo para contarle.

─Hola, papá...

Fin

Joerick: El último (Completa)Where stories live. Discover now