Epílogo

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Zabdiel espera pacientemente en casa, quiso ir al hospital en cuando recibió la llamada pero el transito combinado con la larga distancia se lo impidieron por lo que la mejor opción fue quedarse en casa.

Espera pacientemente mirando la puerta constantemente.

Al inicio no tomó bien la relación de su hijo pero siendo honesto consigo mismo se dio cuenta que si en alguien confiaría algo tan importante con Erick ese sería Joel.

Se divirtió de manera sádica al fingir estar enojado con ambos lo que provocaba que lo llenaran de obsequios y salidas a restaurantes para conversar y una vez que les confesó que estaba de acuerdo con su noviazgo las cosas no cambiaron mucho.

Siguieron divirtiéndose y ver a su hijo realizado al lado del hombre que ama lo hizo feliz.

Camina al mini bar, abre una botella de tequila y bebe directo sin importarle nada, el alcohol puede calmarlo o al menos eso cree.

Escucha un sonido así que deja la botella y se acerca de nuevo a la puerta pero se da cuenta que solo fue provocado por un adorno que se tambaleó en la entrada.

Más desesperado se pone a dar vueltas en la sala, no puede estar quieto sabiendo que su hijo está en el hospital y él no lo acompaña como debería.

Una vez más un ruido se hizo presente y corre a la puerta.

Esta vez la perilla gira y tres personas, o bueno, dos y medio entran lentamente.

─Hola papá...

─Erick gracias a Dios, ¿Cómo les fue? ─pregunta ignorando el saludo y se acerca.

Nota un pequeño bulto envuelto en un par de cobijas que es cargado por Joel que está igual de sonriente que su novio.

─No puedo creer que te hayas atrevido a embarazar a mi hijo ─se queja Zabdiel observando al pequeño que carga en brazos─ ¿Están bien?

─Lo están, ambos lo están ─asegura extendiéndolo─ ¿Quieres cargarlo?

Asiente y lo toma siendo cuidadoso, abre las cobijas y mira al pequeño que duerme tranquilamente.

Le recuerda a Er cuando era bebé.

─Es tan precioso que podría desmayarme ─halaga al borde de las lágrimas─ ¿Ya pensaron en un nombre?

─Sí Zabdiel─dice Erick.

─No me llames así, podrás ser mayor pero sigo siendo tu padre.

─No, él se refiere a que ya tiene un nombre ─interrumpe Joel─ su nombre es Zabdiel.

El suegro se queda callado al oír eso último, si sonríe más está seguro de que romperá sus dientes.

─Detengan a Zabdiel que creo que ahora si me voy a desmayar.

Ahora si fin

Joerick: El último (Completa)Where stories live. Discover now