MI ALUMNA... MI AMANTE (Luciale)

CAPITULO 21

5º mes

16 de septiembre de 2019

- Pareces más nerviosa que yo. - Lucía habló dando una pequeña risa.

Alex seguía hacia el consultorio y sus músculos del cuerpo estaban tensos. Era el gran día que descubrían el sexo de los bebés, parte de ella ansiaba ver las vidas creciendo dentro de Lucía y la otra parte de ella sentía que iba a desmayarse.

En el cuarto mes de embarazo, intentaron ver el sexo de los bebés, pero los dos estaban de piernas cruzadas, entonces Alycia les pidió que esperaran un mes más.

Alex estaba tan perdida en sus pensamientos que ni siquiera percibió que no le había respondido a la castaña.

- Eh... dame tu mano. - Cuando pararon en la señal, Lucía cogió la mano derecha de Alex y la colocó en su vientre, que ya estaba mucho mayor de lo normal. - ¿Puedes sentir?

- No, ¿yo debería? - preguntó con la mano aún en la barriga de Lucía.

- No sé...

- ¿A ellos no les gusta mi toque? - Alex preguntó insegura.

- ¿Qué tontería estas diciendo?, te adoran, se animan cuando estás cerca de nosotros. - Lucía hizo cariño en el rostro de su novia. - Creo que todavía es muy apresurado, tal vez sólo yo pueda sentir.

Alex suspiró un poco frustrada, retirando la mano de la barriga de Lucía cuando la señal volvió a ponerse verde.

Cuando finalmente llegaron al consultorio, Alex parecía una pila de nervios, su pierna se balanceaba de un lado a otro mientras estaban sentadas en una silla de vinilo a la espera de ser llamadas. Lucía estaba más distraída, ella conversaba con algunas futuras mamás que sonreían para la castaña y para Alex, como si supieran que eran una pareja feliz a la espera de su bebé.

En el otro lado de la habitación, había un hombre con su hijo descansando en su regazo, mientras él y la mujer conversaban bajito, también había un pequeño bebé que dormía en un carrito al lado de una mujer que lo sacudía levemente.

- ¿Lucía? - Una mujer rubia, que ya conocían bien, llamó a la puerta que llevaba a la sala de preparación para exámenes.

Alex fue sacada del trance, Lucía sonrió y se levantó, siendo seguida por la ojiverde. La muchacha le dio un delantal para que se cambiara de ropa y esperara a la médica allí.
Alex se sentó en una de las sillas mientras esperaba a Lucía, ella estaba ansiosa por ver a sus bebés una vez más y no podía decidir si quería niños o niñas. Definitivamente niñas dejaban su corazón abofeteado, ella sería la mayor muggle del mundo con sus niñitas, pero niños también le llenaban el corazón de alegría al pensar en tenerlos. Tal vez una pareja sería lo más adecuado.

Lucía salió del pequeño cambiador, vestida con el fino delantal de hospital, casi al mismo tiempo que la doctora Alycia entró en la sala. Alex se apresuró y en segundos ya estaba al lado de Lucía.

- ¿Ansiosas por ver a los bebés? - Alex asintió frenéticamente, lo que causó risa, era muy visible que la ojiverde estaba nítidamente nerviosa.

- Ella está nerviosa y muerta de la curiosidad por descubrir el sexo de los bebés. - Lucía habló por Alex, cambió una rápida mirada con la ojiverde, que sonrió levemente.

- Ustedes van a ver pronto a sus pequeños, pero antes... - Alycia acentuaba a Lucía a subir en la balanza. - Vamos a ver cómo está la mamá. ¿Cómo están las cosas? ¿Estás digiriendo bien los alimentos?

- Sí, todo genial.

- ¿Cómo te sientes últimamente?

- Hay horas que estoy extremadamente sensible, otras veces me irrito fácil, cuando Alex se retrasa un poco del trabajo eso ya es motivo para que haga una tempestad en un vaso de agua... ¿es normal no sentir ganas de tener relaciones sexuales y de una hora para otra eso cambiar y ya sentir mucha voluntad de hacerlo?