Oвrα dєl Dєѕtinσ || Chat Noir/Adrien × Lectora

「Cry Baby」

Me encontraba conversando con Alya fuera del instituto mientras esperábamos a la azabache, hablabamos de las pendejadas que pensábamos de niñas.

—Yo de pequeña creía que la luna me seguía—río la ojiavellana al recusar su niñez.

Yo también reí—Eso no es taaaan loco—sonreí—Yo creía que las vacas blancas daban leche blanca, que las marrones daban leche de chocolate y las rosadas, leche de fresa—reí al recordar mis burradas.

La ojiavellana se carcajeo tan fuerte que las personas empezaron a mirarnos raro, pero nos valió madres—Daría lo que fuera por conocer a la mini tú—dijo mientras se secaba las lágrimas—Apuesto a que eras terrible—rió.

—No lo dudes—sonreí mientras levantaba mi pulgar—Ay~ extraño eso tiempos en los que me valía v*rga la vida—dije con nostalgia—Y donde no buscaba la pvta x en matemáticas—me quejé por lo último.

—¡Mamá, no tienes que traerme al instituto!—oímos exclamar a alguien, volteamos y era un chico pelinegro de otra clase—Entiende, ya no soy un niño pequeño—dijo avergonzado.

—P-pero para mí siempre serás mi niño—dijo con tristeza una mujer pelinegra de cabello corto—Déjame concentirte—le extendió una lonchera.

—¡Ya crecí!—gritó el chico con enojo y tiró la lonchera—¡Me estás avergonzando!—dijo y entró al instituto con el ceño fruncido.

Volteé a ver a la pelinegra, ella recogió la lonchera y subió a su auto, se le notaba dolida, finalmente se fue—Pobre señora—dijo la ojiavellana con tristeza.

—Maldito mocoso de miércoles—dije mientras me cruzaba de brazos con molestia—A mi me hacen venir al instituto a pata—me quejé.

—Bien dicen que a veces la gente no valora lo que tiene—dijo la ojiavellana con molestia por lo recién sucedido.

Sonó el timbre y decidimos olvidar lo sucedido, no queríamos estar enojadas todo el día—¿Qué curso nos toca?—pregunté mientras nos dirigíamos hacia el salón.

—Dos horas de Historia—dijo la ojiavellana con pesadez, no es que no nos gustara el curso, es sólo que tener dos horas del mismo curso nos cansaba.

—Ay wey—dije lloriqueando—Altas ganas tengo de que me trague la tierra y me escupa en Corea—reí por lo último.

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La clase ya había comenzado, Marinette llegó unos segundos antes de que comenzara, yo estaba aburrida, este tema me daba sueño, creo que debí dormir temprano anoche y no quedarme despierta viendo doramas.

Estaba con mis brazos sobre el pupitre y mi cabeza estaba recostada en ellos usándolos de almohada, estaba durmiendo plácidamente, pero un pelirrojo interrumpió mi descanso—Despierta—susurró mientras tocaba mi mejilla con su lápiz—Te va a ver la profesora—susurró y siguió picando mi mejilla con su lapiz.

—Ayyy~—me levanté mientras me quejaba en voz baja—Como chingas, deja dormir al prójimo—susurré mientras lo miraba.

—¿A qué hora dormiste?—preguntó el pelirrojo mientras levantaba una ceja.

—¿Cuál perro triste?—pregunté mientras me frotaba los ojos.

Él me miró con cara de "wtf"—¿Me tas webiando?—preguntó mientras sonreía—Pídele permiso a la profesora para ir al baño—sugirió mi amigo pelirrojo—Y así te lavas la cara, porque tienes cara de zombie.

Estaba por decirle que no para poder seguir durmiendo, pero no era mala idea, podría salir y caminar mientras me despegaba de las letras—No es mala idea—sonreí, me golpeé un poco las mejillas para que no se notara mi sueño, luego levanté la mano—Disculpe Miss Bustier, ¿Puedo ir a los servicios higiénicos?—pregunté.