Cumple Daniel parte 2

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Beatriz comenzó a darle un masaje a Daniel.

B. Amor? Todo bien en el trabajo?

D. Sí amor, por qué preguntas?

B. Es que tu espalda está realmente contracturada, estas muy tenso.

D. Por eso te pedí un... auu justo ahí me duele... un masaje amor.

B. Tranquilo que te dejaré como nuevo, pero de verdad, te pasa algo? Puedes contarme si quieres.

D. La verdad es que sí,  hoy le conté a Marcela de lo nuestro y claramente no lo tomó bien.

B. Qué?!!! Pero amor, ahora me debe estar odiando.

D. Si amor, pero sabes en algún momento se tenía que enterar, además a mi no me importa lo que los demás piensen, solo me importas tú, yo acepté lo de ella y Armando y si ella me quiere de la misma manera debe aceptarte.

Beatriz estaba realmente triste, pues sabía que su relación con Marcela Valencia ya era complicada y ahora sería mucho peor.

D. Amor no dejemos que nos amargue si?, además el rey aún tiene más peticiones.

B. Ok, qué necesita su majestad?

D. Quiero que me sorprendas 1313.

B. Ok, dijo con una sonrisa pícara.

Betty sacó un pañuelo del ropero y le vendó los ojos, luego lo tomó de la mano para que se sentara en la cama, lo acarició suavemente recorriendo su cuerpo con la yema de sus dedos, le acarició los labios, dejándole un beso en cada lugar que sus dedos recorrían, de esta manera continuó besándo el cuello bajando hasta llegar al pecho de él.

Dios está mujer me está volviendo loco, pensaba Daniel mientras sentía como Betty despertaba todos sus sentidos.

Ella continuaba bajando en su ruta de caricias y besos hasta llegar al pantalón de Daniel, donde ya era evidente su excitación, le quitó el cinturón y lo utilizó para amarrarlo a la cama, tal como él lo había hecho en una oportunidad. Le desabrocho el pantalón y le bajó el cierre con los dientes, le quitó el pantalón y los calzoncillos.

D. Amor quiero verte.

B. No quiero que me veas aún, le susurró al oído.

Beatriz se quitó rápidamente toda la ropa quedando completamente desnuda. Comenzó a recorrerlo nuevamente, pero esta vez iniciando desde los pies hasta que llegó al pene de Daniel, primero lo acarició y luego comenzó a lamer, ella no sabía realmente lo que hacía, pero por la respiración agitada de él entendía que lo estaba haciendo bien, continuó succionando, a veces lo hacía lento y luego más rápido.

D. Amor ya no puedo más.

B. Aguanta mi vida, le dijo mientras le quitaba la venda, aún falta.

Ella lo montó, se tapó los ojos con la venda y comenzó a moverse sobre él, le gustaba experimentar nuevas posiciones y movimientos, sentía que cada vez que estaba con él podía aprender algo nuevo.  Después de un rato ella acabó primero y luego él.

B. Te sorprendí? Le preguntó agotada mientras le soltaba las manos.

D. Ni te imaginas mi amor, este ha sido mi mejor cumpleaños.

Ambos se durmieron abrazados, Daniel despertó por el sonido del timbre. Se puso una bata y se dirigió a abrir la puerta. Solo cuando la abrió y vio a María Beatriz con dos botellas en las manos recordó que la había invitado.

Betty se puso una polera de Queen de Daniel y salió del cuarto por un vaso de agua, justo en ese momento entró su cuñada viéndola en esa facha.

Dios, dijo Betty mientras corría al dormitorio a vestirse.

M.B. Dani, no le avisaste que venía?

D. Nop, lo olvide... espérame un rato me visto y regreso.

B. Daniel!!! Por qué no me avisaste que María Beatriz venía,  mira como estoy.

D. Estas perfecta, pero si quieres verte más hermosa aún pues ponte algo y ya.

Después de un rato ambos salieron arreglados para compartir con María Beatriz.




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