Capitulo XVII Te volveré loco, pero no puedes conocer mi secreto.

639 79 5
                                    

-" ¡No me lo puedo creer!, ¿has visto la que han montado, estos dos?"- me dijo Gara tan sorprendida como yo.

Los Narcisos, habían creado una especie, de barrera invisible alrededor de nosotras, cada vez que un hombre se nos aproximaba, un miembro del personal de la empresa de Eduard, lo interceptaban con alguna escusa, a un pobre desgraciado, le habían hecho derramar una copa por encima, al no darse por aludido desde el principio.

Por lo que pudimos observar, tanto Eduard, Martín, como mi tío, se lo estaba pasando a lo grande mientras, veían como fracasaban, aquellos que se atrevían acercarse a nosotras. Al mismo tiempo, los dos primeros, se mantuvieron a distancia, como para castigarnos, así que, en ningún momento teníamos ninguna atención masculina.

-" Gara, ¡esto es la guerra! "- la atraje hacia mí y al oído le dije la idea que se me había ocurrido, teníamos poco tiempo, para realizarla. Mi prima me miro con ese brillo en los ojos, de cuando vamos a cometer una gran travesura.

Sólo lo detecto mi tío, que nos conocía, ya estaba acostumbrado a nuestras maldades. Cuando éramos pequeñas, fue el cómplice de muchas de ellas. Siempre decía a nuestros padres, que, si sus niñas querían montar la Tercera Guerra Mundial, o invadir un país, él pondría sus tropas a nuestros pies, y seria nuestro general de batalla. Esto le hizo ganarse, más de un castigo por parte de mi tía y mi madre, por el contrario, muchos cumplidos, por parte de mi abuela, la generala y jefa de la familia Arteaga.

Así que no nos sorprendió, cuando recibimos un mensaje en el móvil de mi prima, de nuestro tío. Decía:

-" ¿Qué necesitáis?, ¿tengo que controlar a la policía?, ¿habrá muertos?, o ¿un escándalo que tengo que tapar?... lo más importante, ¿tu madre me puede matar, Gara?"- nos reímos del mensaje de mi tío.

-" Dos preciosas modelos, que con la mirada hagan que los hombres entreguen su mundo. No será ilegal, al menos, no delante de los invitados, no puedo decir nada de las consecuencias en las que pueden desembocar nuestra travesura, cuando estos dos vean lo que va a suceder. No sé si habrá muertos tío, entraríamos en información, que nosotras como tus sobrinas, no querrías saber, por su contenido poco adecuado. Será un escándanlo, así que dejamos en tus manos las consecuencias. Y lo último, depende de si la tía no se entera, así que cúbrelo bien, tío Dimitri"-
Vimos como el padrino de Gara leía el me mensaje, y estallaba de risa.A continuación, llamaba a uno de sus hombres, y le daba instrucciones.

-" Quince minutos, para el inicio del espectáculo, os envió el número de las modelos para que concretéis la puesta en escena. Todo será cubierto, ya tengo a mi gente trabajando en ello, yo me sentare a ver la escena desde aquí, ah y espero sobrevivir a esto, sino ocurre, ya lo tengo todo arreglado, para que sigáis haciendo de la vuestras, nunca me defraudáis, niñas."- le mandamos un beso volado. Y el termino riendo de nuevo.

Tras contactar con las modelos, nos fuimos a retocar el maquillaje, le pregunte a mi prima si estaba preparada, que íbamos a montar un escándalo bueno. ¿Qué a lo mejor me había pasado?, podíamos pararlo cuando quisiera.

-" ¡Está loca!, es una de las mejores ideas que has tenido. Además, así tendremos una experiencia más, me encanta que volvamos a estar juntas, como cuando éramos pequeñas, hermanita."- se rio Gara.

-" Vale, todo sea por poner en su sitio a estos dos."- le dije y salimos, para ponernos donde habíamos acordado, en la pista de baile.

Mientras bailábamos de forma sexual, vimos entrar a una pelirroja y una rubia, de esas que esclavizan a los hombres, con solo pestañear, ambas fueron anunciadas como conocidas modelos, provocando la atención en el sector masculino, como pretendíamos, hasta los guardaespaldas que nos habían colocado Eduard, quedaron traspuestos. No quisimos mirar a nuestras presas, por no ver si a ellos también, les afectaba, era un riesgo que debíamos correr, para cumplir nuestra misión.

Deseo LiberadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora