Capítulo 11

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Los chicos habían regresado cerca de las 7 de la tarde a la escuela, el partido amistoso contra Seirin fue duro y apenas habían ganado por un punto de diferencia pero gracias al revelo entre Furuya y Nori pudieron ganar aunque el chico de primer año termino regalando un total de 2 boletos y anotaciones. Ahora los jugadores se dirigían a sus habitaciones en búsqueda de su ropa para tomar una ducha mientras que las managers se iban al comedor para preparar la cena.

Mochi ingreso al suyo encontrándose con Sawamura profundamente dormido, se acercó con el menor acariciando una de sus mejillas y le quitaba un mechón de su frente para mirarlo mejor, sonrió con nostalgia por no haber encontrado aun a la o las personas que están lastimando a Sawamura, le dejo un beso en la frente y salió del cuarto con su ropa limpia

- ¿Cómo se encuentra Eijun-kun? - pregunto Haruichi cuando vio entrar al peliverde

-Ahora está dormido así que lo despertare después de que me bañe para que coma un poco

-Ahora que recuerdo el Doc. le dio día libre a Wamura ¿no?

-Si, el entrenador nos dijo cuando estábamos regresando.

- ¿Cómo le haremos para cuidarlo?, todos nosotros estaremos en la escuela, Suzuki-san está ausente por unos días, el entrenador, Rei, el entrenador Ochiai, el señor Oota, el doctor Hiroshi y su hijo estarán ocupados.

-Lo único que podemos hacer es rezar para que nada malo le termine pasando el día de mañana - el peliverde se encamino a una de las regaderas dando por terminado la conversación.

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- ¿Estás seguro de esto?, porque no me quiero meter en problemas con tu tío y abuelo - le pregunto Nagisa a su hijo mayor.

-Él fue que me lo pidió además recuerda que ya tuvimos esta conversación hace una semana.

-Lo se hijo pero ya sabes cómo es tu abuelo y tu tío, a ellos no les puedes ganar si dicen algo o piden algo se debe hacer sin ninguna excusa - respondió viendo como su hijo guardaba su billetera dentro de su bolso de club.

-Y gracias a eso es que tiene un trauma desde pequeño, ¿no te acuerdas como estaba? - pregunto mirándola fijamente - estaba devastado mi tío y abuelo decían que debía de haber ocupado su lugar, ¡¡se lo decían cada maldita hora y todos los días me llamaba para que lo consuele, todos los días!! - dijo sin percatarse que estaba elevando la voz mientras algunas lágrimas recorrían por su cara - ¡¡si algo le está pasando en esa escuela no pienso quedarme de brazos cruzados otra vez y esperar que se vuelva a derrumbar y en caso que mi tío y abuelo se enteren lo van a terminar de romper, es mi familiar y no le voy a dar la espalda!! - sentencio dejándose caer en su cama ocultando sus sollozos.

Nagisa no dijo nada porque lo que dice su hijo es verdad, desde lo que le paso al menor su padre y hermano fueron muy duros con su sobrino sin alguna razón, ella también estaba devastada por lo del chico pero ¿Qué podría hacer?, además no por ello debería pegarle a su hijo sin importar que, recuerda perfectamente como su hijo lloraba por no poder hacer nada para salvar a su primo así que ella también luchara con uñas y dientes para protegerlo de esa "familia", se sentó a lado de su hijo y lo abrazo para tratar de calmarlo.

-Tranquilo Daichi o alteraras a tus hermanos y hermanas ¿sí? - pidió abrazando al menor viendo como el chico se tranquilizaba un poco - ¿mejor?

-Si má gracias

-No hay de qué y con la situación de Eijun ve por el junto con tu amigo Sugawara-kun y tráelo a su nuevo hogar, en caso de que tu tío y abuelo vengan por él lo protegeremos junto con los vecinos así que ahora límpiate esas lágrimas y ven a comer.

Roto DNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora