Capítulo 19

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-¡¡¿Qué tu hiciste QUUEEEEEEE?!!! – grito Yó mirando fijamente a su hijo envuelto en un aura oscura provocando que el rubio termine temblando de miedo.

-Fu-fui a pe-pedir ayuda a Eren pa-para resolver el misterio d-de Eijun-kun.

-¡¡¡Y porque hiciste algo como eso, acaso tú, tu, tu AAAAGGHHHHH!!! – se agarró los costados de su cabeza con frustración para luego agarrar su celular y marcar el número de esa persona quien respondió a los cuatro toques – ¡¡¡EREN JAEGER, TRAE TU MALDITO TRASERO A LA ENFERMERIA DE SEIDOU EN 10 MINUTOS SI NO QUIERES QUE YO VAYA PERSONALMENTE POR TI A TU ESTUPIDO CONSULTORIO Y SACARTE DE AHÍ JALANDOTE DE LAS OREJAS O DEL CABELLO PORQUE SABES PERFECTAMENTE QUE SOY CAPAZ!!! – colgó sin recibir respuesta del peli marrón y volteo a ver nuevamente a su hijo – agradece que no somos médicos del equipo porque si no llegaríamos tarde al partido y te juro, ¡¡TE JURO!!, que terminare golpeándote repetidas veces con la enciclopedia de la real academia española.

-Pero no sabes hablar bien el español.

-¡¡¡NO ME CONTRADIGAS QUE AUN ESTOY ENOJADO CONTIGO JOVENCITO!!!

-H-Hai – fue todo lo que dijo encogiéndose en su lugar temiendo que termine agarrando en verdad el diccionario de la real academia para que lo use como un arma contra él.

-Solo – comenzó a hablar apretando el dorso de su nariz – espero que esto no se repita y que Sawamura no haya tenido un pasado difícil.

-De hecho – hablo con timidez Dante rezando que lo que vaya a decir no termine por hacer explotar a su padre – ningún familiar tenía la gonorrea de tipo B por lo que se dio mediante un abuso sexual y a los nueve años sus padres lo ingresaron a una casa de psicópatas.

-Es oficial – respondió sentándose en su escritorio con su cetro – bastón en mano sin dejar que Dante termine de hablar – si no me termina matando mi problema de espalda lo hará el caso de Sawamura o que tú le pidas a tu novio Eren esos tipos de favores.

-¡¡¡Que Eren no es mi novio, ya te lo dije desde antes!!! – grito sonrojado a mas no poder.

-Y yo soy Frida Kahlo con inmovilidad en la parte inferior del cuerpo – se señaló a sí mismo y la parte inferior de su cuerpo.

-No seas sarcástico conmigo papá.

- ¡Pues no seas mentiroso conmigo jovencito!, pero ya dejemos de lado el tema de tu noviazgo con Jaeger y esperémoslo para que tanto a ti como a él los castigue por hacer una imprudencia como esa.

-Como dirían los mexicanos, otra vez la burra al trigo que Eren no es mi novio – iba a decir algo más pero la puerta fue tocada repetidas veces, Yó se levantó de su asiento y se encamino a la puerta y al abrirlo se encontró con el chico peli marrón de ojos azul verdosos quien parcia cansado empapado de sudor.

-Qué bueno que llegaste mi querido yerno Eren Jaeger – sonrió el mayor de los presentes pero su sonrisa no era nada sincera provocando que el menor temblara de miedo – ahora si van a ver ustedes dos por haber indagado en los documentos confidenciales de la familia Sawamura y ni crean que alguna deidad o poder supremo los salvaran del castigo.

Yó tomo el brazo del menor metiéndolo a la enfermería de forma brusca cerrando la puerta con seguro, si hubiera personas en los corredores del colegio lo único que escucharían provenir de la enfermería serían los gritos y las suplicas de los menores junto con las palabrotas y regaños del mayor.

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Los chicos de tercero junto con Eijun ya estaban listos para ir al estadio Meiji Jingu donde jugara Ichidaisan y Seidou, para su fortuna el estadio casi no queda muy lejos del lugar de donde están además de que tenían cerca la estación de tren.

Roto DNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora