Cincuenta y dos

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El monitor de Surf entró en la academia dónde cabizbajo tropezó con su compañero y minutos después, se le cayeron varias cosas que había cogido en la estantería para comenzar con sus clases del día.

...—Hey, amigo, ¿Te pasa algo?, parece que tienes un mal día—habló Win mirándolo con el ceño fruncido, tras escucharlo maldecir.

—Hey, amigo, ¿Te pasa algo?, parece que tienes un mal día—habló Win mirándolo con el ceño fruncido, tras escucharlo maldecir

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El moreno resopló con tristeza

—Krist me ha llamado.

El rubio abrió su boca con sorpresa pues estaba al tanto de lo mucho que el monitor sufría por ese amor perdido.

—Wow, ¿y qué te ha dicho?, ¿Va a volver?, ¿Por eso estás así?

Singto se encogió de hombros.

—No lo sé, en realidad nada, solo me dijo que me extraña y que se había dado cuenta de que me ama.

Win puso los papeles que tenía en la mano sobre el mostrador y a continuación le dio una palmada en la espalda.

—Joder, ¿Y eso no es nada para ti?, ¿Qué tienes sangre en las venas o horchata?

El moreno chasqueó la lengua resignación.

—¿Y de qué me sirve saber eso?, él está en China y yo aquí...allá tiene su familia, dinero, una casa, unos estudios, se fue de ni lado porque aquí no tenía nada de eso.

El rubio suspiró con pesar.

—¿Y por qué crees que te ha llamado para decirte eso, si no quisiera estar contigo?.

Singto suspiró también.

—Le he dicho que regresase a mi lado y se ha quedado callado, luego me ha colgado.

Win frunció el ceño con confusión.

—¿Qué extraño?, quizás se cortó la llamada, ¿Le marcaste de nuevo?

Este asintió.

—Si, si lo hice pero me salió el buzón de voz...¿Por qué me llama después de semanas sin saber de él?, me suelta eso y luego me corta, ¿A qué demonios juega?, ¿Acaso quiere volverme loco?

Su compañero le dio otra palmada en la espalda.

—Joder, lo cierto es que no sé qué decirte, el amor es jodidamente complicado a veces.

—Déjalo, ya da igual—habló molesto—...supongo que solo quería saber cómo estaba y que diría al soltarme eso pero en el último momento, se acobardó.

—Hey, no te pongas así, no sabes lo que ocurrió en verdad...quizás al chico se acabó la batería, no tenía cobertura o tuvo algo urgente que atender... yo no es que lo conociera mucho pero no me dio la sensación de que fuese de esa clase de persona.

El moreno se sentó en una silla y sujetó la cabeza entre sus manos.

—Bueno, si te digo la verdad, creo que yo tampoco lo llegué a conocerle del todo, aunque me enamoré de él como un tonto...compartimos cosas pero lo cierto es que nunca me contó nada de su pasado, que no fuera sobre el imbécil de su exnovio...Tan solo sé que está en China con sus padres.

—Oye ¿y qué hay de su amiga?, Sammy si debe saber algo más.

El monitor negó.

—No tengo ni idea dónde está ella, luego de terminar la temporada de verano, no he vuelto a verla.

El rubio entonces sonrió ampliamente.

—Yo sí sé dónde está, puedo darte la dirección si quieres, seguro que ella lo sabe, no pierdes nada por intentarlo.

—No, no sé, además seguro que Krist le prohibió decirme algo.

El rubio caminó al mostrador y cogió un papel y un bolígrafo donde apunto algo  y a continuación se lo dio en la mano.

Esta es la dirección de la Universidad donde estudia, lo sé porque un día fui a ver a mi novio allí y me la vi junto con otras chicas.

Singto miró el papel durante unos segundos y chasqueando la lengua lo guardó en el bolsillo.

—Supongo que tienes razón, no pierdo nada por habar con ella, bueno me voy a trabajar, los primeros alumnos ya deben se haber llegado.

Toda la mañana, el monitor de surf estuvo pensando en lo que había hablado con su compañero y varias veces miró el papel donde estaba la dirección que le había escrito.

Era cierto que no perdía nada por hablar con Sammy, así que decidió que al terminar las clases de ese día se acercaría al lugar para ver si podría localizarla.

En la hora de la comida, Singto volvió a la academia dónde volvió a encontrarse con el rubio.

…—Oye, emm, he estado pensando una cosa.

El moreno resopló.

—¿Y qué has pensado? a ver iluminame.

Win rió.

—Oye, creí que estarías más animado...bueno, como sea...emm, ¿Qué tal si es que está viniendo para acá y quiere darte una sorpresa?

El monitor soltó una carcajada.

—Oye déjalo vale, no está viniendo, ¿por que iba a hacerlo?, ¿y con qué dinero?, todo se lo pagan sus padres y no creo que después de la forma en la que le exigieron irse de aquí, dejarían que volviese.

El rubio chasqueó la lengua con fastidio.

—Oh vaya, menuda mierda...hey, un momento—le detuvo este—… espera, ¿Y por qué no vas tú?, presentate en su casa y ya está.

El monitor lo miró sorprendido.

—¿Acaso estás loco?, mirame, no tengo ni el tiempo, ni el dinero necesario para irme a China en su búsqueda.

El recepcionista sonrió incrédulo.

—Por el tiempo no te preocupes, puedo decirle a mi padre que te de unos días libres... la academia y los clientes pueden esperar una semana,  además estamos en temporada baja y el mar va a seguir ahí cuando regreses, no va a desaparecer.

Singto negó.

—¿Acaso no recuerdas lo poco que me pagáis?, no puedo permitirme un billete de avión a China y mucho menos pagarme un hotel allí.

El rubio suspiró profundamente.

—¿Y qué hay de tus amigos ricos?, ellos pueden prestartelo, eres como un hermano para ellos, ¿O no?

—No, no puedo hacer eso, yo jamás les pediría nada y mucho menos dinero.

—¿Y tu hermano?

Este se quedó pensativo por un momento.

—Bueno, quizás tengas razón, puedo hablar con Gulf, ahora tienen muchos gastos con la boda y el bebé pero supongo que podría preguntarle.

Durante el resto de la tarde, Singto estuvo pensando en ello, aunque todo dependía de lo que hablaría con Sammy, ya que esta seguramente sabría la verdadera situación de Krist y si estaba jugando o era real todo lo que el barman le había dicho por teléfono.

.....

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7. «AMIGOS» - Mewgulf, Zaintsee, Offgun, SamYu y Singtokrist TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora