Subject 7 || Tom Riddle

Molestar - 016

El día después de su...interesante...evento, todavía tenía que disculparse o mostrar simpatía por los moretones que se formaban en su cuello, de hecho parecía orgulloso de lo que podían hacer sus manos.

Especialmente en la chica.

Él le había infligido dolor a la niña, de esto era ilustre.

Sin embargo, estaba confundida por los eventos de la noche anterior, ¿cómo terminó en su habitación? Ella siguió los pasos que había hecho pero no terminó en su habitación.

Solo en el camino hacia la cocina notó las manchas en la pared que no puso.

Furiosa, bajó las escaleras mientras estaba ansiosa por ver al Slytherin, sabiendo que él tenía algo que ver con las paredes.

Estaba sentado alto y orgulloso en la mesa larga, bebiendo su café humeante con un diario en sus manos a su lado. Tenía una pluma a su lado, se dio cuenta de que estaba escribiendo algunas notas.

Ella echaba humo hacia su asiento y lo abofeteó.

Difícil.

Su mandíbula se apretó en respuesta, su lengua se arremolinaba alrededor de su boca. Sus ojos se clavaron en los de ella, deslumbrando a través de su alma.

Le prendió fuego, la peor parte fue que no estaba segura de odiarlo.

"¿Te importaría explicarme, cariño?"

Rompió el contacto visual mientras cerraba los ojos, tratando de mantener la calma, pero estaba seguro de que había humo saliendo de sus oídos en este momento.

"¿Te importaría explicar Tom???" Ella gritó, "Anoche, ¿por qué pusiste más dints en la pared?"

"La pregunta es, amor. ¿Por qué pusiste dints en mi pared?" Acentuó cada palabra, cada sílaba mientras escapaba de su boca.

Él arqueó las cejas hacia ella como si fuera una niña estúpida que había hecho algo tonto, sus discusiones siempre terminaban en ella luciendo como una tonta.

No este, pensó.

"Para ayudarme a rodear tu mansión ridículamente grande".

"Estabas dañando mi propiedad. Eso merece alguna consecuencia, ¿no es así, amor?"

Tragó saliva, el sonido resonó en las paredes en blanco, se atragantó con sus palabras, estaba atrapada en lo que diría. Así que las palabras que salieron a continuación lo sorprendieron tanto a ella como a él.

"¿Qué tipo de consecuencia?"

Él se rió de ella. La hacía sentir tan pequeña, eso lo sabía.

"Tu audacia es ridícula. Usé mis manos a la ligera como un...collar anoche, y tú estabas llorando, sangrando incluso. Así que esta actitud es ridícula".

Él la miró una vez más, el humor brillaba en sus ojos. Su mirada la hizo extremadamente consciente de sí misma, como si estuviera revisando sus defectos y empujándolos en su cara.

"Me estabas lastimando Tom."

"Bien. Te lo mereces."

"No te mereces nada." Ella escupió.

Él cargó contra ella, empujándola hacia la sala de estar mientras ella volaba hacia el sofá detrás de ella. Su cabeza golpeando contra el brazo del sofá.

"Cariño, me lo merezco todo, tú por otro lado", se acercó un poco más a ella de modo que su aliento se abanicaba en su oído, "tú no".

Su respiración se entrecortó cuando comenzó su contacto visual, esta cosa con sus ojos era común.