moonchild 「taegguk」

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Ya había actualizado su bandeja de entrada unas cinco veces en los últimos dos minutos. Jeongguk esperaba con ansias la respuesta a su postulación para la escuela de artes a la que quería entrar. Se esforzó un montón construyendo un pequeño portafolios el último año y esperaba que todo aquello por fin le diera frutos.

Se mordió los labios y volvió a dar click. Un mensaje nuevo, lo abrió rápidamente.

Leyó el correo completo y una gran sonrisa se había dibujado en su rostro. De inmediato tomó su celular y marcó.

-¿Hola?

-¡Entré! - exclamó emocionado aún mirando el monitor enfrente de él.

-¡Felicitaciones! Sabía que lo lograrias Jeonggukie, me siento muy orgullosa de ti - contestó lloriqueando. Su madre era un poco sentimental.

-Estoy muy feliz mamá, gracias por dejarme hacer esto. - habló mientras ojeaba nuevamente su portafolios.

-Sabes que siempre te apoyaré en lo que sea mientras te haga feliz... y por supuesto que sea legal - bromeó. - Bien, debo colgar. Estoy de turno así que no me esperes para cenar.

-Está bien, nos vemos. - se despidió y colgó.

Jeongguk sonreía y le brillaban los ojos al igual que un niño. Su sueño de a poco iba tomando forma frente a él, esperaba que en el camino las cosas fluyeran para bien. Le emocinaba el conocer nuevas personas, más aún cuando compartirian la misma pasión y gustos que él.

Su celular le notificó un mensaje.

Jimin
Me contó un pajarito que te convertirás en un universitario

Jeonggukie
A veces siento que mi mamá te mensajea más a ti que a mi.

Jimin sonrió, se sentía orgulloso de su amigo. También agradecido de ser el amigo favorito de su madre, siempre se enteraba de todo antes que nadie.

Jimin
Estoy extremadamente, muy, demasiado contento de que hayas entrado

Jeonggukie eres un chico muy especial, y ten por seguro que absolutamente TODO lo que te propongas lo lograrás

T.T

TKM

El menor rió, Jimin tendía a exagerar cuando se trataba de él. Era un gran amigo y aunque a veces su amor era un poquito intenso lo quería y apreciaba un montón.

Jeonggukie
Gracias Jimin, yo también tkm!!

Debo dejarte

quiero empezar a ver
que cosas me llevaré

ah, y dile a Nam
que no llore por mi.

Nos vemos ^.^

Dejó el celular a un lado y se estiró en su colchón. Suspiró, se sentía emocionado y asustado. Tal vez más asustado. Pero, por primera vez en su vida estaba haciendo algo que era completamente para él. Extrañaría su casa, a su madre y a sus amigos a pesar de que probablemente lo visitarán muy seguido.

Por otro lado ahora tendría que ser responsable de su propia vida lejos de casa. Tendrá que hacer nuevos amigos y aprender a controlar sus emociones. Porque a veces las demostraba de más y lo hacia lucir infantil o hasta débil. No quería que otras personas se aprovecharan de eso, porque sabía que no todo iba a ser color de rosa. Pero al menos tiene la certeza de que en caso de que algo malo le ocurriera siempre tendría a sus amigos que lo recibirán y le daran una mano.

Dejó de pensar en lo que podría ocurrir en un futuro y se enfocó en comenzar a armar una lista con las cosas que debía comprar.

Tomó su croquis y comenzó a pasar las páginas. Se detuvo antes de pasar a una hoja en blanco.

Los trazos eran desordenados, habían manchas de grafito por todos lados y lo único decente o que se podía lograr distinguir era un par de ojos. Lo observaban a la distancia, prominente. A veces sentía que lo seguían. Nunca pudo lograr terminar aquel retrato. Es más, cada vez que intenta volver a él, se bloquea y le dan ganas de llorar.

Se tocó el pecho, su corazón se había acelerado y la boca la sintió seca. El cristal de su colgante le rozó la mano y sintió la urgencia de llorar.

-¿Quién eres?