MI AMOR PLATONICO

43. SEGUNDO DÍA

Ya ha pasado una hora desde que le hice un pequeño lavado de organismo a luke, todavía duerme por la anastecia, se preguntaran como es que se hacer eso?, pues en la vida hay que estar preparado para todo.

Cierro los ojos y empiezo a quedarme dormido.

Estoy durmiendo plácidamente, cuando siento una mano suave y delicada sobre mi cabeza, es mi madre.

-Señor por favor - dice mi madre llorando - solo tu puedes tratarle, solo tu puedes hacer que el entienda que te necesita, y te reconozca en todos sus caminos.

Quito su mano de encima mio, con fastidio.

-es que acaso ahora no puedo dormir tranquilo? -pregunto estresado.

Abro los ojos.

«Dios mio, cuando podre dormir tranquilo? »

Escuchó como cargan un arma, me siento en la cama y observó a Fares parado al frente, metiendo balas en su revólver.

- es que acaso, aquí es el cuarto de armas? - preguntó.

Fares se sorprende al verme despierto.

- lo siento Joven Xian, en realidad no vine solo a cargar mi arma - dijo mientras metía la última bala, lo curioso fue que esta se cayó, y rodó hacia mi, por el suelo, yo me acerque a la orilla y la recogí, la observe y no es cualquier bala, es de muy alto calibre, se la paso a Fares y este la recibe - también vine a pedirle un permiso.

-todos los escoltas usan este tipo de balas? - preguntó.

-no joven Xian, - responde - pero a mi personalmente me gusta usar de lo mejor.

-uumm ya, para que quieres un permiso?

- quiero un permiso para ver a mi nieta que acaba de nacer. - dice el.

-sabes que horas son? - preguntó.

-si lo se, son la una de la mañana, pero quiero ser el primero en verla.

- okey - digo bostezando - si es lo que deseas entonces ve.

-muchas gracias joven Xian - dice antes de marcharse.

-oye, - le digo - espera.

- si, digame.

-como es que entraste a mi cuarto si tenia seguro la puerta.

-soy muy bueno con las seguridades - responde antes de cerrar la puerta.

Yo vuelvo a cerrar los ojos.

Horas después.