51. NO, OTRA VEZ NO

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Después de llorar como Magdalena por los diamantes, me puse a pensar que podría haber sido peor, si yo hubiera estado tal vez me hubieran hecho daño, pero gracias a Dios estoy bien.


Puse el denuncio, pero como era de esperarse, no me hicieron mucho caso, hable con el vigilante, por si había visto algo y dijo que no, así que ni modo.


Abrí los ojos, después de dormir como dos horas, y recuerdo que hoy hay culto y ensayo.


Corro a alistarme lo mas rápido posible, no le pongo cuidado a mi atuendo, me pongo lo primero que encuentro, un vestido blanco, desenredo mi cabello y trato de hacerle una coleta, pero queda con churupos, finalmente opto por dejarlo suelto, solo espero que no se me espante mucho.


Voy en la moto, a una velocidad mas o menos moderada, lo que es hoy alcanzó el ensayo, son las 4:00pm, y el ensayo hoy comienza a las 5:00pm, así que tengo tiempo de sobra.


Cuando voy a mitad de camino, empieza a llover.


«no, no me puede pasar esto a mi, y justo hoy que decidí llevarme este vestido blanco, sera mejor que aumente la velocidad.»


Ya casi llego, cuando veo a través de mi espejo, un moto que viene con intenciones de adelantarse.


Es una moto de las misma que yo tengo, veo que en sus espejos tiene la J y el 1.


«que curioso »


Decido aumentar la velocidad y centrarme en la carretera, el me hace señas para que le de vía, miro como hace olas cuando pasa por los charcos y justo por aquí hay muchos.


«ni loca le doy vía »


El ya me esta alcanzando, mejor dicho me alcanzó.


«ahora si me va a dejar, vuelta nada el vestido »


Es raro, pero el merma la velocidad, va a mi ritmo y ya no levanta olas, aun así, yo decido adelantarlo, y sin querer, lo chispeo al pasar por un charco, buenos mal que tenia impermeable.


«lo siento, pero tengo que llegar rápido ».


Aun así, el se adelanta y entra al parqueadero del templo.


«no puede ser, es un hermano »


Yo la pienso para entrar, pero aun así entro, no me queda otra opción, y quedo atónita, cuando se quita el casco.

MI AMOR PLATONICODonde viven las historias. Descúbrelo ahora