Izuku Midoriya: El Primer Mestizo

20. El último Prime

Hay múltiples reliquias legendarias de Cybertron que los humanos descubren vagando por Internet o en sus clases de historias. Las hay en distintos tamaños y formas, pero sin duda, una de las más importantes es la llave del liderazgo Autobot: La Matrix de liderazgo.

Un artefacto que pasa de líder en líder cuando la Spark del anterior se extingue: Ha sido así desde la época original, donde solo existían Trece Primes.

Hace quince años, la Matrix fue portada por Optimus Prime, para que después fuera pasada al que hoy se conoce por Rodimus Prime. A pesar de sus quince años como Prime, los Autobots esparcidos por la Tierra compartían la misma idea: Él no debía portar la Matrix, y solo lo hacía por un error del verdadero elegido de Prime.

Pero, ya no se podía hacer nada, solo tolerar al líder que les tocó... Y como líder, debía encargarse de muchos problemas: Entre ellos, estaba el de Izuku Midoriya, el recién descubierto híbrido. Lo tenían encerrado con esposas en sus muñecas y tobillos, capaces de soltar una descarga eléctrica con un simple botón.

Aunque él no necesitaba una descarga para entender que debía comportarse. Estaba en conciencia de lo que había causado y revelado, y le provocaba un mal sabor de boca cada vez que repetía la escena en su cabeza. Fue como ver en perspectiva una película de terror, donde él era el monstruo.

Cuando Izuku se encontraba encerrado, había dos escenarios en la superficie: El lado de los cadetes y el de los generales y Autobots. Un lado que apenas procesaba lo que había ocurrido, sin creer lo que habían dicho, y otro, que estaba pensando en las consecuencias y buscaba llegar al fondo del asunto.

Al paso de las horas, más y más unidades Autobots llegaban a la academia, cada una de una unidad especial: La división de fuerza policiaca, aérea, Wrecker, Dinobot, hasta la Femme y la Élite.

Pero la que hizo que todos se pusieran serios, fue la división Prime. Cuando Rodimus hizo aparición en la instalación académica, entrecerró los ópticos, apretando los gigantes puños de metal escarlata: No le gustaban los adolescentes.

Más de treinta Autobots reunidos en un solo lugar, solo para discutir el gran tema del cual fueron llamados: La existencia del Mesías de los cybertronianos y los humanos.

La reacción colectiva fue la dada por el militar Bulkhead:

—¡¿Cómo chatarras pasó esto?!

Consecuente de eso, la sala de juntas se volvió un desorden en cuestión de segundos, donde todos los Autobots y generales humanos discutían o sobre el tema en cuestión o sobre el hecho de que hacían demasiado escándalo. Sin previo aviso, una llamada ígnea fue disparada hacia el techo, generando un rugido similar al de un tigre, solamente para hacer que todos guardaran silencio absoluto.

Rodimus miró a todos los Autobots y generales con una expresión de frustración en su grisáceo rostro.

—¿Quiere alguien decirme cómo rayos puede existir un híbrido entre humano y cybertroniano del cual no estuve enterado...? —preguntó, con una superioridad en su voz.

—Con gusto, Rodimus Prime —dijo Jet Fire, enfrente de los demás generales Autobots—. Pero primero, necesito que todos se relajen y los que puedan, tomen asiento.

Los humanos tomaron asiento y los cybertronianos simplemente dirigieron su mirada al desertor Decepticon.

—Con la información recopilada en las últimas veinticuatro horas, hemos llegado a un punto sin retorno donde descubrimos el asunto: Izuku Midoriya, cadete del pelotón 1-A de la academia, es verdaderamente un híbrido equipado con Energon artificial en funcionamiento —Los Autobots presentes comenzaron a murmurar, al haber escuchado el término de "Energon artificial" —. Y para apoyar nuestra información, tenemos a una fuente de datos confiable: Inko Midoriya, la madre adoptiva del muchacho.