Mi lugar

Capitulo 10 - Tu me facinas

Hace dos semanas que mi hermano y las niñas llegaron de visita, y el tiempo de estar fuera se les acabo, esta noche regresan a mexico.

Alex nos dio un tour por londres y lugares muy bonitos a las afueras, nos divertimos mucho, frente al Palacio Buckingham, Palacio de Westminster, el ojo de londres y el puente de la torre logramos tomar varias fotos de recuerdo, Alex tambien se unio a ellas, como ya estaba perdonado por su comportamiento hacia Franco. Tomamos una foto frente al Palacio Westminster juntos besandonos.

Pedi que me cambiasen el turno de una semana en la mañana para asi gastar mi tiempo con ellos. Desde la visita de mi familia Alex y yo no hemos tenido ni un dia a solas, asi que le propuse quedarse el fin de semana completo conmigo despues de llevarlos al aeropuerto y el encatado acepto.

-Cuidate mucho gordita, come bien cuando trabajes. Te quiero mucho y llamame de vez en cuando, ¿esta bien?- mi hermano me abraza para despedirse, yo lloro porque los extrañare -Casi se me olvida, aun no me hagas tio- sonríe y camina hacia la puerta de abordar. Les digo adios con la mano y todos lloramos.

Segui llorando por todo el camino hasta llegar a la casa de Alex, me quede esperando en la Land mientras el recogia las cosas que necesitaba.

-Te sientes mejor o quieres que vallamos a cenar una hamburguesa- ambos reímos.

-¿Porqué siempre que sabes que estoy preocupada o triste me das comida chatarra?-

-Cuándo tuvimos el pequeño tiempo de conocernos, descubri que te "tranquiliza" esa comida- da énfasis en las comillas con sus dedos.

-Ok, ok ya entendi. Enciende el motor y vamos por una hamburguesa- ambos reimos fuerte y el obedece.

(...)

-Ahora si totalmente para mi, y por todo el fin de semana- me aprisiona contra la puerta de la entrada y me besa desesperado.

-Es exitante todo esto cariño pero tengo que hacer una llamada al hospital, porque no vas y te das una ducha y yo te alcanzó ¿si?- hace pucheros como un bebé pero hace lo que le pido. Lo veo desaparecer por el pasillo que conecta a mi habitación, realizo la llamada para asegurarme que no me necesiten y saber el estado de mis pasientes.

Me preparo para entrar a la ducha junto a Alex. Entro al cuarto de baño, y admiro su figura a través de la puerta de vidrio, me desago de la ropa que llevo puesta y entro despacio en la ducha. Recorro su ancha espalda sintiendo sus músculos en las llemas de mis dedos, esta caliente, fuerte, mojado, Dios este hombre es todo un Titan, mi titan.

-Pense que no vendrias cariño- se gira y me abraza por la cintura, yo coloco mis brazos en su cuello.

-Tenia que venir a tallarte la espalda- beso su cuello.

-¿Sólo quieres tallar mi espalda?- respondo con un sonido nasal afirmante y sigo mi recorrido de besos por su cuello -¿Segura?- me da una nalgada.

-Tal vez un poco mas que tallar tu espalda.

-Se mas especifica cariño.

-Quiero que me hagas el amor aquí y ahora- me concentró en su mirada, el rie seduciendome.

Y no dice nada más, ya no hay espacio para las palabras, ahora son solo respiraciónes agitadas. Toca y aprisiona mis glúteos, fuerte, pero no lastima. Siento su dura erección rosando en mi abdomen, pero ya no hay tiempo para mas caricias, me carga, mis piernas a cada lado de su cadera, y es ahi cuando me penetra, fuerte, como a ambos nos gusta, me llena completamente, me recarga en la pared y comienza con sus embestidas, bombeando para darnos placer, jadeo fuera de su oido y cada vez que hago eso, el me penetra mas fuerte. Llega esa sensación que recorre mi cuerpo entero, grito al llegar al orgasmo, Alex llega unos segundos después que yo pero su quejido varonil me enciende de nuevo.