Capítulo uno

5K 203 77
                                    

Podrá ser él mejor amigo de mi padre, pero debía de admitir que ese hombre de tan alta edad -para mi- me traía colgada de los hilos de su irresistible porte de macho. Esa esencia, esa mirada y esa misteriosa alma, me cautivaba como ningún otro chico. A veces hasta pensaba que estaba loca, y sí, estaba loca pero por él, lo quería a toda hora cerca, en todo momento a mi lado y no despegarme de él por nada.

-Tú estás loca Yuna -me espeta mi amiga negando de un lado a otro.

Llevaba más o menos tres horas teniendo una no muy grabe disputa con mi mejor amiga por medio de la vídeollamada en la laptop, y todo se centraba en un solo tema, en el tema que invadía mi mente a cada día, cada mañana, cada tarde y cada noche.

-¿Loca, por qué? -verifiqué que mis uñas quedarán bien decoradas y esmaltadas pero sin dejar de hablarle, cuando le conté mi secreto pensé qje me apoyaría y no me recriminaría por ello -¿Qué tiene de malo que deseé que Jeon Jungkook me arranque la ropa con sus dientes y acabe conmigo en la cama? -sonreí pícara de tan solo imaginarlo, vale, tenía que reprocharme cuando lo único que ronda mi cabeza es ser follada por él. Pero sigue siendo mi amiga y quiero que me apoye.

-¿Te estás escuchando? -SooHa de nuevo me regaña -Ese señor podría ser tu padre Yuna -me recrimina. Yo suspiro.

-Tiene treinta -ruedo los ojos por su exageración -Jeon no está viejo. Esta buenizimo que es diferente.

-Ay, amiga -suspiró -Si tú padre te escuchara diciendo esto, te meterías en problemas gordos -y lo se, claro que se que si Kim Namjoon -mi padre- se entera de que estoy teniendo los deseos mas impuros con su mejor amigo y compañero, en donde lo único que alimenta es tenerlo entre mis piernas, me mata, lo mas seguro me compre un billete de avión y me mande a la otra punto del mundo por tal de que esté lejos de Jungkook.

-Pero no me esta escuchando -arrugo mi ceño ya cansada -Se preocupa más por su trabajo que por mí. Desde que mi madre murió, es otro, y ni siquiera sabe si estoy mal ahora o si necesito algo ¿te sigo contando la lista de cosas que ha dejado de hacer por eso? Porque estaríamos hasta el año que viene aquí.

-Lo siento amiga, yo no quise hacer que te sintieras mal -la mirada de la morena se ve ahora preocupada. En cambio la mía permanece fuerte, porque es algo que ya ni me afecta, ya he pasado bastante tiempo con el plan de la ignoración de mi padre.

-Yo estoy bien -concluí -Mañana mismo comenzaré a trabajar en la mansión Jeon. A esa bruja que tiene de esposa, la tal Haerin, me encargaré de desaparecerla del mapa y a esa mocosa de mierda, terminará haciendo lo que a mi se me de la puta gana -ya tenia todo fríamente calculado en mente -Si hago todo este sacrificio, es por el hecho de hacer que Jeon Jungkook se fije en mi. De obtener su atención, su amor, sus placeres y yo complacerlos. Nada es más importante que él.

Y ella lo sabía, sabía que iba a llevar a cabo como fuera mi plan de tener toda su atención puesta en mi, era un hueso duro de roer, pero era hombre, y cuando la polla habla, la cabeza no reacciona.

━━━━❰・❉・❱━━━━

"Yuna, portate bien, no quiero recibir quejas de ti por parte de Jeon"

Fue lo que me advirtió mi padre al verme salir de casa para dirigirme a mi primer empleo como niñera. No era que me hacía gracia ser lo, pero eran pasos significativos pata poder acercarme a Jungkook.

Sonreí con picardía al ya estar posicionada en la gigante puerta de madera elegante que impedía el paso al interior de la enorme casa que lleva el apellido "Jeon". En pie de guerra me encontraba, totalmente dispuesta a causar que muchas cosas cambiaran aquí, porque cuando a Kim Yuna, se le mete algo en la cabeza, no hay quien se lo saque.

¡No soy una niña! › jjkOù les histoires vivent. Découvrez maintenant