hiding from the moon (Remus Lupin)

8

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Remus se encontraba apoyado en la puerta con las manos en los bolsillos y una mirada tranquila.

-Claro Lupin, toda tuya.- dijo el profesor de encantamientos.- Felicidades por la lección Madison, no esperaba menos de ti.- dijo antes de salir.

Y Madison solo pensaba en que no la dejara sola con ese hombre. Con ese atractivo hombre.

Sin embargo, recordó las palabras de su amiga. Ella podía con él, ella sabía cómo salir de todas las situaciones. Ya lo había hecho antes.

-De que necesita hablar profesor?- preguntó mientras recogía sus cosas.

Remus se acercó a ella lentamente, mientras la analizaba detenidamente intentando ponerla nerviosa.
-Veo que usted está muy familiarizada con hacer trabajos extra.- dijo mirándola.

Madison levantó las cejas con algo de sorpresa.
-Cuál es el punto de su pregunta, profesor? Interesado?- preguntó ella tomando por desprevenido a Remus.

"claro que lo estaba." respondió en su mente mientras la analizaba detenidamente.

-Deberías usar ese entusiasmo... y aplicarlo en mis clases, no cree señorita Bellemore?- preguntó mientras veía como ella se ponía cada vez más y más nerviosa.

Y vaya si lo estaba, le temblaban las piernas pero eso él no debía saberlo.
-No me está gustando la actitud que está teniendo en mis clases últimamente.- empezó a decir.- Parece ser que no se toma la materia como debería...

-No se equivoque profesor, mis notas de momento son perfectas así que no veo problema de su angustia.- dijo ella con la mayor tranquilidad del mundo.- Aunque... puede que tenga algunas dudas, señor.

Ella hizo creer que se le había caído su pluma al suelo, así que se agachó para recogerla ante la atenta mirada de Remus.
-D-dudas? Si mal no creo recordar, usted es una excelente alumna...- dijo cruzándose de brazos.

-Ah si?- preguntó ella manteniendo el contacto visual.
-Solo una mente brillante como la suya podría haber escuchado la clase mientras le susurran cosas, en la oreja.- dijo lo que ella sonrió.

-Esas cosas, como usted dice, no deberían angustiarlo tanto.- dijo con más seguridad.

"celoso profesor Lupin?"

-Y si, lo soy profesor, como ya le dije soy una excelente alumna, sin embargo hay cosas que no acabo de entender del todo. Es fácil desconcentrarse en clase...- dijo ella manteniendo la mirada en el.

"dímelo a mi, querida y eso que yo doy la clase." pensó el hombre mientras intentaba descifrar a la chica.

Su alumna.
-Usted? Desconcentrarse?- preguntó ahora esbozando una pequeña sonrisa.- Mi mejor alumna con la mejor nota de clase?- preguntó.

-Suena increíble no?- preguntó ella pasando su mirada por los brazos de este.- Profesor, no soy especialmente lista ni especialmente dotada. Solo soy muy, muy curiosa, y siempre me esfuerzo por lo que quiero.

"Curiosidad por saber que más sorpresas escondes, pequeña."

Remus levantó la ceja.
-Y que es lo que quiere obtener señorita Bellemore?- preguntó acercándose más a ella e ignorando el hecho de que se encontraban solos.

Profesor y alumna.

Se olvido el hecho que de la tensión acumulada estaba a punto de llegar al límite, tanto de ella que lo miraba con deseo como de él mismo que intentaba mantener la compostura.

Madison iba a responder, iba a dar el paso, en serio que iba a hacerlo, pero de repente la puerta se abrió de golpe provocando que Remus se apartara de inmediato.

Oh cielos.

-Minerva...- dijo algo nervioso.- Que la trae por aquí?- preguntó a lo que la profesora se extrañó bastante.

Que hacían solos?
-Profesor Lupin, me preguntaba donde estaba, los alumnos de cuarto año están destrozando el salón!- dijo preocupada.

"saltándose clase para hablar con ella?" se preguntó la chica con una sonrisa algo soñadora.

-Lo siento Minerva, estaba comentándole a la señorita Bellemore...- empezó a decir mientras la miraba.

-Si profesora, estaba comentándome que no podré hacer ningún trabajo extra para mejorar mis calificaciones. Siento haberlo molestado, profesor.- dijo con cara inocente.- Además, le estaba preguntando unas dudas de la última lección.

McGonagall miró a Madison con una sonrisa.
-Oh, es que aún no conoce a la señorita, ella siempre es muy dedicada y preocupada por sus notas, sus trabajos de investigación son absolutamente impresionantes!- dijo a lo que la chica sonrió orgullosa.

"acaso era una indirecta?"

Remus miró a Madison con una sonrisa con una pizca de diversión.
-Entonces... viendo la situación, creo que no tendré problema en que hagas un... trabajo extra.- dijo de repente.

"si especificara con trabajo extra sería de mucha ayuda." pensó la chica mirando al hombre que seguía de lo más nervioso.

Madison se volvió a acercar a Remus esperando hacer efecto sobre él.
-Será un placer, señor y tranquilo, no quedará insatisfecho.- afirmó ella.

"no esperaba menos." respondió en su mente el hombre. Miró a Minerva quien seguía sonriendo para volver a la chica que aguantaba sus libros con inocencia.

"pero inocencia tenía muy poca."

-Espero haber aclarado tus dudas, ahora si me permite tengo que ir a dar clase.- dijo arreglándose la corbata.

La chica se armó de valor y pasó a rozar su brazo con suavidad.
-En realidad no lo ha hecho, pero supongo que le pediré ayuda a otro amigo...- empezó a decir la chica cuando el mismo la interrumpió.

Oh, Madison...
-Entonces encuéntreme después de clase para aclararlas. Ahora si me disculpan.- dijo este para salir finalmente de allí.

Madison no tenía palabras, no las tenía. Sentía que su cuerpo en algún momento empezaría a fallar. Sentía que el corazón le saldría por la boca además de no ser el único que palpitaba.

Oh Merlín, que le habías hecho Remus Lupin.

Sin embargo ella no era la única. Que va, ella no era la única que se moría de ganas por volver a tocarla.

Trabajo extra, trabajo extra....

-Como ya le dije, soy una excelente alumna...

Las palabras de la chica no paraban de surgir en la mente del profesor que difícilmente consiguió dar clase a los de cuarto año.

Trabajo extra...