Capítulo 5: " Apprendre d'un Gymnaste"

181 12 2
                                    

Aesop Carl

Iba a realizar mis ejercicios normales, pero no me esperaba que fuera a entrenar conmigo, es decir, sé que Joseph hace ejercicio, pero...¿se aguantará mis rutinas?, por ejemplo, yo no aprendí a trotar, yo corro, como cuando voy a realizar mi pirueta, de esa forma yo "troto"

Joseph: Listo amor- empecemos...

Empezamos con "trotar" llendo hacia el parque, y darla la vuelta, pensé que todo iba bien, pero...apenas llegamos al parque y tomamos una pausa para tomar agua y descanzar un momento, pero cuando lo noté que a duras penas caminaba hacia mi dirección, está ahogado, tal vez debí "trotar" a su nivel.

Aesop: Mon cher...¿estás bien?- apenas estuvo frente a mí, cayó al piso..- Joseph- creo que exageré, demaciado.

Joseph: Ah...me encanta que me digas así- le dí su botilo y me aseguré de que no botara el agua...- gracias- el descanso duró más de lo esperado, aunque si logró llegar a mí, eso significa que por lo menos tiene buena resistencia, me pregunto que ejercicios....ejercicios...ya sé.

Empezamos con estiramientos básicos, se los tomó bien, entonces puedo aumentar el nivel, con el tiempo se fue cansando, pero es normal, después de todo, el ejercicio cansa a cualquiera, y el que no se canse..debo conocerlo para ser igual.

Aesop: ¿Vas bien?- la parte de estirar las pierlas exagero, pero puedo hacer el split, y todas esa cosas, así que para mí esto es estirar de verdad.

Joseph: B-bien- apenas logra que su rodilla toque su pecho, pero lo aprecio, la flexibilidad lleva tiempo, esfuerzo y práctica. Después de otro descanzo largo, volvimos a trotar, esta vez lo hice a su nivel, le fue mejor, creo que empezó a correr por alcanzarme, pero bueno, estoy aprendiendo de él, y él está aprendiendo de mí, no pensé que sería tan...divertido.

Unas horas de ejercicio después...

Llegamos a casa y pensé en darme un baño de hielo, los deportistas lo usan para los músculos, así que me toca hacerlo, apenas me metí en la bañera empecé a temblar, se supone que ya debería estar acostumbrado, pero no puedo con el frío, puedo bañarme con agua fría, pero no puedo con esto...

Joseph: ¿Estás seguro que deberías hacerlo?, mejor ven a estirar.

Aesop: P-pues....por s-si acaso...me que...quedaré un....rato- él se quedó ahí a mi lado todo el tiempo, mientras yo temblaba él preparaba mi toalla y mi ropa, una vez que sonó la alarma salío.

Joseph: Cuando salgas, baja a almorzar- salió y cerró la puerta, me alegra que sepa respetar mi espacio personal, aunque no soy tan reservado, bueno..a veces, pero con él todo el tiempo siento que puedo abrirme más a él, de la nada, empecé a sentir un dolor en la pierna, me arrodillé en el piso y empecé a buscar el donde era- amor, ¿estás bien?

Aesop: Creo que no- dejé que entrara y trató de ponerme de pie- despacio, me duele.

Joseph: OK amor- logré llegar a la cama y me senté con las piernas estiradas, Joseph empezó a tocar músculo por músculo, de la rodilla para abajo nada, pero una vez que me tocó más arriba, tomé su mano y la detuve- debe ser que te dió un calambre.

Aesop: Pensé que en estás alturas ya no daba eso, solo me daban cuando era un principiante.

Joseph: Así seas principiante o experto los calambres aparecen cuando menos te lo esperas, ojalá se te pase rápido.

Joseph Desaulniers

Después de ese pequeño incidente, me ha tocado cuidarlo un poco más, sé que está muy acostumbrado a realizar sus rutinas, sus ejercicios y lo demás, pero me preocupa que se lesione si sigue de esa manera, sé que aún le duele, trata de ocultarlo, pero conmigo eso no funciona.

Joseph: Amor, ya te dije que es mejor que te tomes un descanso, al menos por 5 días mientras te recuperas- otra vez tratando de hacer sus ejercicios- y para que esta vez me hagas caso, tomaré esto- tomé su pelota, su lazo y sus masas y las encerré con llave en mi caja fuerte- y se quedarán aquí.

Aesop: Pero ya estoy bien- me le acerqué y con cuidado toqué donde le dolía, tensionó el músculo y dejó de respirar para no soltar un quejido- ¿ves?

Joseph: A mí no me engañas, vamos a echarte crema- finalmente se rindió, ya en la habitación, le eché un poco, y le hice un pequeño masaje- perdón, sé que te duele, pero mientras el músculo se recupera, haremos esto.

Aesop: ¿Cómo sabes tanto sobre esto?

Joseph: Porque....simplemente lo sé- aún no quiero contarle, es muy temprano para decirle...- lo aprendí en el colegio cuando era jóven, tenía amigos que también eran deportistas y me contaban mucho al respecto.

Aesop: Increíble- solté un suspiro, no puedo creer que casi le digo, no quiero guarlarle secretos, pero....siento que aún no es el momento apropiado para decirle- ¿estás bien?

Joseph: Si...solo estoy cansado...

Aesop: Ven, recuéstate- jamás me he acostado en sus piernas, pero...-descuida, te avisaré si me duele- que honor, me recosté con cuidado y me acarició la cabeza- ¿estás cómodo?

Joseph: Sii~- escuché su risa y siguió consintiendome, me encantan estos momentos con él.

En la noche...

Una vez que se durmió, me paré de la cama un momento, hay un cuarto en esta casa que está con llave, solo yo puedo entrar, verifiqué todas las cosas, en algún momento dejaré que Aesop se enteré, pero por ahora, debo mantenerlo calmado.

Hasta el próximo capítulo....



Mon OmegaHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin