Capítulo 3: La votación

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Era la hora de la verdad.

Todos los participantes habían sido colocados en una de las mitades del salón, unos botones enfrente de la multitud, uno rojo que servía para marcharse de allí, y uno verde para quedarse y luchar por el premio.

Con solo mirar a la gente que allí se encontraba, podías notar como todos estos tenían los nervios a flor de piel, la mayoría indecisos sobre que elegir. Era verdad que estaban arriesgando sus vidas, pero tampoco es que tuvieran nada en el mundo exterior (no todos claro Xd). Además, ese dinero podría cambiarles sus vidas para siempre, podrían volver a ser felices...

Pasaron unas diez personas antes de que fuera el turno de Vegetta, este camino decidido hacia el panel de votación, marcando el botón rojo. El de ojos amatistas no pensaba permitir que Rubius muriera.

Después de una tanda de participantes más le tocó al pelinaranja que había suplicado por su vida hacia unos cuantos minutos, el cuál, como todos predecían, apretó el botón rojo.

Justo después de este, un joven de pelo negro y bandana del mismo color fue llamado. El chico caminó lentamente hacia el lugar, indeciso sobre que elegir. Tras unos segundos se giró hacia el pelinaranja de antes, viendo todos como este simplemente negaba con la cabeza, antes de que Mangel tocara el botón rojo.

Un par de minutos pasaron y llegó el turno de Frank, el cuál sonrió burlón antes de tocar el botón verde con confianza; mataría a todos esos desgraciados e invertiría su dinero para hacer una gran mafia.

Un montón de participantes pasaron antes de que fuera el turno de Luzu, el cuál, con la mente centrada en su hijo, decidió apretar el botón que cancelaría aquel retorcido juego.

Tras tan solo 2 personas el número de Auron fue dicho. Realmente le daba pena que toda esta gente fuera morir, pero él no tenía nada en el mundo real. No tenía nada que perder... Por lo que, con ese pensamiento en mente, apretó el botón verde.

El turno de Rubius llegó unos minutos después, tomando este la decisión de que no quería ver morir a su novio solo por dinero, así que pulsó el botón rojo.

Después de él Willy salió elegido por lo que salió hacia el panel. El albino estaba dividido, quería matar a Frank sin ninguna consecuencia, pero, no quería ver morir a Fargan. Tras unos segundos se decidió: No dejaría que el de ojos color miel sufriera por su sed de venganza, por lo que marcó el botón rojo.

Un participante más pasó antes de que le tocara a Alexby. Inmediatamente este apretó el botón rojo. No arriesgaría ni su vida, ni mucho menos la de su hermana menor.

Tras unos minutos fue el turno de la única mujer de nuestro grupo protagonista. Esta caminó hacia el lugar, un ligero temblor en su labio, antes de apretar el botón rojo, tal y como su pariente lo había hecho.

Después de unas cuantas personas un chico de cresta salió, eligiendo rápidamente el botón verde. Cuando saliera de aquí sería rico y podría hacer lo que le plazca.

Cuando solo quedaban dos participantes Fargan caminó hacia el panel, golpeando el botón rojo sin ninguna duda. No quería ver a su mejor amigo morir por su avaricia.

Era el turno del último jugador e iban 91 votos a favor del juego y 90 en contra. Si aquel hombre votaba en contra estarían en empate y seguramente podrían llegar a algún trato para que se fueran los que quisieran, pero, si este votaba a favor...

Todos estarían condenados a morir.

El señor de 63 años de edad miró dudoso a la multitud, mordiéndose el labio con inseguridad; no tenía ni idea que decir.

Squid Game (El juego del calamar) || Karmaland Auजहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें