Él es mi vecino ~Lando Norris ~ (Parte 2)

Capítulo 220

VIERNES

Tras acabar tarde anoche, me había levantado y había quedado con Lando para desayunar en el circuito. Como yo llegué antes, cogí el desayuno para no tardar mucho.

- Buenos días - dijo Lando cuando yo estaba esperando sentada en la mesa y me abrazó por detrás.

- Buenos días ojazos - dije mientras que le acariciaba la mano.

- ¿Cómo estás? - dijo Lando sentándose.

- Un poco cansada pero bien, ¿y tú? - pregunté.

- Bien, con ganas de empezar - dijo Lando.

- ¿Trabajaron mucho ayer? - pregunté.

- Pues sí le verdad, queríamos revisar cosas de la última carrera aqui y en que podíamos mejorar - dijo Lando.

- Recuerda aquella curva que siempre te sales del trazado - dije mientras que comía.

- No me acordaba, gracias - dijo Lando.

- Nada - dije y sonreí -. Me sorprendes que estés tan temprano por aquí.

- Es la única manera de poder vernos -  dijo Lando.

- Si es durante semana de carrera sí - dije.

- Menos mal que somos vecinos - dijo Lando.

- Sí, menos mal - dije.

- ¿Todo bien con Max? - preguntó Lando.

- Muy bien la verdad, pero a ver como va el fin de semana - dije.

- Esperemos que bien - dijo Lando.

- Yo también lo espero - dije y sonreí.

Estuvimos hablando un rato más mientras terminábamos de desayunar, hasta que era hora de empezar a trabajar para prepararnos para los libres 1.

- Nos vemos esta tarde por aquí - dijo Lando abrazándonos.

- Sí, nos vemos por aquí - dije y le di un beso en el cuello.

- ¿Me estás debilitando para los libres? - dijo Lando mientras que seguíamos abrazados.

- No, es para que vayas con muchas más - dije y nos separamos.

- Adiós pequeña - dijo Lando.

- Adiós ojazos - dije y comencé a caminar hacia RedBull.

- Dalia - dijo José cuando me vio de lejos.

- José - dije y nos abrazamos.

- Dios mío como te echo de menos - dijo José apretujándome.

- Yo también, te echo muchísimo de menos - dije y nos separamos.

- ¿Preparada para el primer día? - preguntó José.

- Sí, y con muchas ganas  - dije.

- Vamos a ver que tal les va contigo - dijo José.

- Tuve al mejor profesor - dije.

- Eso es verdad, no vamos a negarlo - dijo José y comenzamos a reírnos.

- Exacto - dije.

- Bueno, me voy a trabajar - dijo José.

- Lo mismo digo, nos vemos luego - dije.

- Mucha suerte - dijo José cuando se iba.

- Igualmente - dije.

Llegué a la oficina y sólo estaban algunos compañeros, me fui a mi sitio y comencé a trabajar.

- Buenos días - dijo Christian entrando.

- Buenos días - dijimos todos.

- ¿Todo bien? - preguntó al llegar a mi mesa.

- Sí, un poco nerviosa - dije.

- ¿Y eso? - preguntó.

- Mi primer fin de semana - dije.

- Verás que todo saldrá genial - dijo Christian.

- Gracias - dije.

Llegó Max y estuvimos hablando de los libres, de las cosas que teníamos que hacer para empezar los libres.

- Muchas suerte - dije mientras que salimos para yo ir al box y él a cambiarse.

- Muchas gracias - dijo Max y me guiñó un ojo.

Llegamos al box, estaba muerta de miedo porque era la primera vez. Un nuevo equipo, nueva gente y lo principal, nuevos colores.

- ¿Nerviosa? - dijo Max apoyando la mano sobre mi espalda y notó que estaba temblando un poco.

- ¿Lo has notado? - dije mirándolo mientras que se ponía a mi lado.

- Has estado muy callada en la reunión y tu no eres así - dijo Max.

- Yo no soy una profesional - dije.

- Hemos cogido todo lo que has dicho para hacer las tácticas para hoy - dijo Max.

- ¿Por qué lo has hecho? Ellos no estaban seguros - dije.

- ¿Sabes una cosa? Lando me dijo que debería confiar en tus intuiciones, que eres muy buena en lo tuyo - dijo Max.

- Pero es que Lando ya sabe como trabajo - dije.

- Y yo quiero ver como trabajamos con tus ideas - dijo Max.

- ¿Te has metido en problemas? - pregunté.

- Tú eso me lo dejas a  mí - dijo Max.

- Gracias - dije y me apoyé en su brazo.

- Te espero en la radio - dijo Max y se fue a poner el casco.

Comenzaron los libres, estaba muy feliz por los resultados que estaba teniendo Max pero sobre todo los resultados de Lando que iba mejorando. A medida que pasaba el tiempo a veces me tocaba hablar con Max y los del equipo no estaban muy de acuerdo menos Christian, que estaba contento con cada cosa que le decía a él y a Max cuando entraba Max en el box.