Amor Infinito

~Capítulo 13~

Subí al piso mientras Kyle cogía la bolsa, entré en mi apartamento y me encontré a toda mi familia, incluidas mi tía Amy y Kayla. No me dio tiempo a dar un paso en el interior cuando Kayla se me lanzó a mis brazos emocionada.

-Lex.- dijo Kayla abrazándome. Kayla se separó de golpe apenada. -Lo siento.- dijo apenada. No me moví, quería gastarle una broma pero Kyle abrió la boca

-Lex, ¿dónde quieres que te ponga la bolsa?- preguntó Kyle. Kayla y mi tía Amy abrieron los ojos como platos, no sabían que Kyle y yo nos reencontraríamos después del despido de la modelo.

-En la primera habitación de la derecha.- dije riendo. No dio ni dos pasos cuando su madre y su hermana se lanzaron a sus brazos, todos nos reímos.

-¿Hacía más de tres años que no sabía nada de mi hermanito?- dijo Kayla.

-¿Enserio? A mí me ha dicho un pajarito que hablas con él casi todos los días…- empecé a decir elevando y bajando las cejas riendo -Y si mal no recuerdo, fuiste con tu padre a buscarlo en el aeropuerto, que por cierto, coincidí con él.- terminé

-No te atrevas.- dijo Kayla amenazándome.

-No digo nada pero tú y yo tenemos que hablar muy seriamente como mejores amigas.- dije. Kayla se sonrojó. -Antes de iros todos, necesito contaros algo.- dije nerviosa.

-Estás embarazada.- dijo mi prima Mía.

-¿Estás embarazada?- preguntaron mi tío y mi hermano Carlo al unísono enfadados.

-Nooo, además os lo hubieran dicho mientras estaba en coma.- dije. Hice una pequeña pausa para tranquilizarme un poco. -Es mucho más serio que un embarazo.- dije.

-Ahora sí que nos estás preocupando, Alexa.- dijo Savannah. Sí, también estaban los Taylor y los Cooper en Nueva York.

-Estoy enferma…- empecé a decir. Todos abrieron la boca. -Unos meses después de empezar la universidad me sentí mal…- seguí diciendo.

-Espera, ¿el día que te encontré en el ascensor inconsciente?- preguntó Savannah interrumpiéndome.

-Sí, unos meses después me hicieron más pruebas y averiguaron lo que tenía.- dije.

-¿Qué tienes?- preguntó Kayla.

-Lupus, el tratamiento no funcionaba y necesitaba un trasplante, por suerte encontraron un donante en pocas semanas, me operaron y hago revisiones cada seis meses.- dije.

-¿Por qué no nos lo dijiste?- preguntó mi tío Marco.

-Porqué ya os había hecho daño.- dije con lágrimas en los ojos. -Ya estoy bien, no ha habido ninguna complicación por el accidente y ni siquiera tengo secuelas.- dije. Hice una pequeña pausa. -Voy a quitarme el olor a hospital.- dije.

Me dirigí a mi dormitorio y cerré la puerta. Una vez que la puerta ya estaba cerrada, me deslicé hacia el suelo con la espalda apoyada, flexioné mis piernas, me las abracé y me derrumbé llorando. Pasé un buen rato llorando en silencio, me levanté del suelo y me acosté en la cama sin darme una ducha.

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POV’S KYLE

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Lex se encerró en su habitación y nos quedamos hablando entre nosotros. Me quedé un rato en silencio y empecé a preocuparme. Me acerqué a su puerta y no oí el agua de la ducha correr, no habían pasado ni cinco minutos desde que se había ido. Di media vuelta, di un paso cuando de repente oí un sollozo desde el otro lado de la puerta. No quise molestarla y volví al salón.