IN YOUR EYES | Peter Parker

Cap 56:Reencuentro

—Si, he estado practicando—Susurraba Cameron con el celular sostenido en su oreja—No, hasta ahorita no se han salido de control... Si estoy calmada... Si Tony, seguiré así—Rodé los ojos—Sólo quiero aprender a controlarlos. No, no quiero ser como Natasha Romanoff, no entiendo porque quieres que también entrene a base de peleas... Si, como digas... adiós—Dicho esto gruñó un poco antes de devolver el celular—Gracias Happy.

—¿De nuevo con querer que te unas a los vengadores?—Cam rodó los ojos nuevamente asintiendo.

—Y quiere que me presente como la hermana de Nat, ese hombre si tiene los pies en la tierra de vez en cuando ¿No?—Happy rió—Creo que toda esa mierda galáctica se le quedó en la cabeza.

—Es egocéntrico, pero es un buen hombre—Cam se dejó vencer coincidiendo.

—Si, un buen hombre que no me permite manejar mi propio auto—Suspiró.

—Sólo hasta que puedas controlar bien lo que tus manos hacen—Respondió—Por lo que necesitas dejar ese mal humor que tienes y tratar de tener un buen día.

—Claro, como si eso fuera a pasar—Rió al bajarse del auto—Gracias por traerme Happy.

—Un gusto, avisame cuando salgas, no quiero que vuelvas a escaparte como la última vez—Advirtió él.

—Claaro—Dicho esto cerró la puerta caminando a la escuela pensando en lo que Tony le había dicho.

Los últimos días eran subidas y bajadas para Cameron, ahora podía contener sus poderes aunque le faltaba mucho por saber, al igual que emprendió la búsqueda de pistas acerca de la mutación de su abuela, todo era nuevo para ella.

No había hablado con Peter, realmente la noticia no era nueva para ella pues ya lo sospechaba pero el lanza telarañas no fue la gota que derramó el vaso, si no que haya mencionado la "zona de paz". Aunque que haya mentido sobre la fiesta de su vecino, fue un gran descubrimiento.

De todas formas, aún no tenía una posición respecto al tema, sólo quería saber que hacer con aquellos arranques de energía que no la permitían dormir y que además calentaban tanto sus manos que destruyeron su manta de mil dólares por la que no gastó ni un centavo durante meses.

Peter por su lado, sentía que hoy era el día de decírselo por su propia voz, confesarle porque no lo había hecho antes, y proponerle un nuevo inicio fuera de mentiras con mucho cariño de su parte.

Aunque sonara un poco estúpido cuando lo pensaba.

Por eso mismo con Ned desaprobando su idea detrás de él, caminaba entre los pasillos buscando encontrarse con esa chica de la que se enamoró desde la primera vez que la vio.

—Te va a ignorar—Peter negó intentando ignorarlo—Yo digo que mejor la aísles en algún salón.

—¿Privarla de su libertad es la mejor forma de conseguir que me hable?—Preguntó Peter deteniendo su paso, le parecía una pésima idea.

—¿Tienes una mejor opción?—Contraatacó Ned, a lo que Peter mejor siguió su camino.

—¿Qué hacen perdedores?—Habló MJ desde su casillero.

—Peter le rogara de rodillas a Cam para que le vuelva a hablar—Rió Ned.

—Quiero ser parte de eso—Habló ella siguiéndolos—Espera ¿No eran algo ya? ¿Por qué te volvió a ignorar?

Peter se detuvo nuevamente para mirar a Ned y que se le ocurriera una idea antes de decir una estupidez como... decir la verdad.

—Peter volvió a mentirle—Respondió Ned.

—No se puede ser más idiota—Se burló MJ—Dejen a la pobre chica sola, ya olvídenla.

—Si te molesta tanto, entonces vete—Habló Peter olvidando completamente cualquier pinta de chico respetuoso que tenía en busca de Cam.

Justo en el tercer piso, en el cruce de un pasillo, logró divisarla, se veía muy radiante después de varios días en los que parecía un muerto viviente andante, esto era por la falta de control de sus habilidades las cuales ya podía dominar.

Hablaba con Betty Brant respecto a algún tema desconocido que a Peter no le importaba ahora, el necesitaba hablar con ella pues cada día sin hablarle había sido un infierno para el.

Este era el momento, debía hablarle, por lo que a paso veloz caminó con el objetivo de llegar a su lado.

Hasta que un fuerte estruendo se escucho.

—¡¿Dónde esta Spiderman?!

Algunos gritaron respecto al fuerte golpe, pero también estaban sorprendidos de lo que veían.

"El Buitre" recién preso por su tráfico de armas ilícitas, y villano de Spiderman ahora regresaba atravesando la pared de la escuela buscando a su némesis, el chico por el que toda su vida se vino abajo.

—Estoy buscando al escuincle que arruinó todos mis planes—Habló desde la máscara aunque todos estaban cegados por las luces de su traje que parecía ahora muy descuidado—¿¡Dónde estas escuincle!?

La mirada de Ned y Cam se centró en Peter, el estaba atónito, no sabía como podría arreglar eso, aunque no parecía que lastimaría a nadie, el buitre sólo lo quería a él.

—¡Perdí mi negocio, mi familia, mi reputación por tu culpa!—Habló el hombre desde el coraje que guardó por mucho tiempo—Te he vigilado, he visto lo que haces... no podrás escapar tan fácil. Sé que estás escuchándome.

Peter no hablaba, no movía ni un músculo, el resto de los muchos alumnos presentes se miraban entre ellos asustados, rogando porque aquel chico saliera a hablar y no lastimara a ninguno de los que se encontraban ahí. Pero Parker... no hacía nada.

—¿¡No hablarás!?—Preguntó él molesto antes de soltar una gran carcajada—Bien... entonces como tu me quitaste lo que más quería... yo te quitaré lo que más quieres... a tu noviecita.

Dicho esto, en un acto totalmente veloz, voló hasta las personas frente a él hasta encontrarse con Cameron, a quien tomó como tal costal de papas y voló hasta salir por el otro lado del edificio donde todos miraron desde lejos, como en la ventana se visualizaba al Buitre soltar a Cam.

—¡Cameron!—Exclamó Peter corriendo hasta el otro lado del edificio.

Al llegar hasta la otra ventana rota, pudo ver a Cameron sobre el techo de un auto quejándose del dolor.

—¡Mierda!—Apenas pudo decir mientras trataba de alcanzar su espalda para sobarla, pero le era imposible.

Ni siquiera le dio oportunidad de volver a levantarse cuando el Buitre la volvió a tomar en brazos y volar.

—¡Su vida por la tuya Spiderman! ¡Piénsalo, tienes menos tiempo del que crees!—Dicho esto voló hasta que se perdió entre los edificios, dejando a Peter con la impotencia más gigante que podía sentirse.

Se la habían quitado, y no tenía ni idea de donde se podría encontrar.